Un amor no superado puede llevar a tantas cosas... Especialmente si tras él vive el sentimiento de rencor por un rechazo.
¿Hasta dónde sería capaz de llegar en busca de venganza? O... si realmente puede llevar a cabo su plan.
Después de todo... Dond...
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Seungmin estaba tranquilo, pasaba a buscar a Kyujin a su departamento ya que ambos de sus padres le habían pedido que la llevase, él no tenía ningún tipo de inconveniente con ello.
Juntos fueron a la cena en la que se reunió con el resto de sus hermanos, muchos confundiendo a Kyujin como su novia.
Y no sabía si era peor el hecho de que su familia les había dicho que hacían buena pareja, o que Woobin hubiese empezado a coquetear con ella tras descubrir que eran sólo amigos.
-Estás casado, cerdo.- dijo molesto, sentado a un lado de Kyujin pero apoyando su mano en el sofá más allá de ella, de manera que tapaba sus piernas.
-Respeta a tu hyung.- dijo.
-Quien pide respeto tiene que ser capaz de darlo primero, respeta a tu familia y a Kyujin, ¿No ves que la incomodas?- cuestionó molesto, quitándose la chaqueta para cubrir las piernas de Kyujin y que ella se sentase como quisiera, ya que el vestido que llevaba hacía algo incómodo en sentarse bien.
Pasó su brazo por sus hombros, ella lo abrazó de costado, recostados de él.
-Y se preguntan después el porqué.- dijo su padre riendo.
-Seungmin… sabes que hay una tradición en la familia que nunca pudimos cumplir contigo, ¿No?- cuestionó la mujer.
-¿Cuál?- devolvió al pregunta, no sabiendo bien a qué se refería.
-A todos nuestros hijos al cumplir los veinte pasamos su primera borracheras con ellos.- explicó su padre mientras que la mujer sacaba unas cuantas botellas de alcohol de la alacena.
-Sabemos que viviste muchas borracheras antes de los veinte… pero igual, tú y Yoojung son los únicos con los que no lo hemos hecho.- dijo y él sonrió, no teniendo problemas con eso.
Al ratito, todos en la sala estaban algo perjudicados.
-Pasé yo primer una borrachera contigo que tus padres.- dijo Kyujin en un susurro que no era tan susurrado.
-Dos… ¿Lo del domingo cuenta como borrachera?- cuestionó, y ella negó.
-No, sólo la de la graduación.- dijo simple y ambos rieron.
-Sí… qué noche.- dijo y ella miró a los alrededores, poniendo uno de sus índices sobre sus labios y el otro en los de Seungmin.
-Cállate.- dijo divertida, ambos riendo después, habían sido los que más tomaron, el resto no parecía tan prendidos como ellos.
-Shh…- dijo y volvieron a reír.
-No se pueden ir así.- dijo el padre del chico.
-No, no podemos.- dijo Kyujin estando de acuerdo. -Si hubiese sabido que íbamos a tomar me ponía algo más cómodo.- dijo y Seungmin se levantó del mueble.