"Puedes llegar a cualquier lado siempre que andes lo suficiente"
Lewis Carroll
Maldita sea era jodidamente rápido, solo había una persona que me podía poner resistencia en combate y no estaba presente, pero la agilidad con la que se manejaba este idiota era magnifica.
Lance una patada en dirección a su abdomen y en el momento en el que mi rodilla estaba por impactarlo el, la detuvo sin dificultad y me aplico una llave que pude deshacer y nos apartamos.
-Tienes ataques impredecibles, no sigues un plan fijo, me agrada, eres firme pero lenta - salto tranquilamente
- Tú tampoco atacas mal, aprovechas al máximo tu fuerza y cualquier titubeo, contigo no se puede pensar mucho, no das tiempo, obligas el combate pero eres distraído - hable mientras acomodaba mi ropa.
- ¿Por qué lo dices? - levanto una ceja, yo sonreí complacida, abrí la mano y tome una grueso anillo de plata liso poniéndolo contra la luz.
- Lindo anillo, perfecto sello - él sonrió negando con la cabeza.
- Ya me aburrí pongámosle más sabor a esto - jugo con una pulsera de plata con grabados sensillos de flores que me pertenecía - como dije eres lenta.
- Y tu distraído - solté el anillo y el la pulsera, al caer es metálico sonido inundo el lugar, fue en ese momento que nuestras energías se liberaron.
Sus ojos tomaron un verde intenso, mis ojos se aclararon hasta tomar un gris pálido y mi cabello no se quedó atrás, este también se aclaró dejando relucir su gris oscuro e intenso.
Una intensa corriente nos envolvió a ambos, nuestras energías chocaban y reñía para poder escurrirse por todo el lugar, la escena tuvo que ser espectacular para los presentes, él tenía sus manos en las bolsas de su pantalón y yo permanecía firme, ambos retándonos con la mirada, creando una nueva estrategia, nos envolvía una transparente nube de energía la mía despedía ligeros tonos intensos de azul índigo y turquesa y la de el presentaba claros tonos de verde acuoso pero intenso.
Ambos atacamos al mismo tiempo con más intensidad y desenfreno, el lanzo un puñetazo, que esquive con éxito al bajar mi cuerpo y girar sobre mi propio eje extendiendo una pierna para someterlo, pero en su lugar retrocedió con elegancia mientras me levantaba, se aproximó rápido, lo bloque, estaba por inmovilizarlo y retrocedió considerablemente.
- ¿Cómo conoces esa técnica? - indago tranquilo.
- Tuve un bien maestro - me encogi de hombros.
- Con que la escuela antigua.
- Es más divertida.
- Entonces utilizas puntos de bloqueo en cada golpe.
- Así es - sonreí.
- Pero no eres la única que la práctica - dio un paso y callo en rodillas, quizás no lo inmovilice del todo pero si pude tocarlo.
(...)
- Jefe ¿Cómo ha conseguido esa chica que Raimon se doble? - sonreí al ver aquella entretenida pelea.
- Ella usa una técnica antigua Dimitri.
- Si pero Raimon la conoce.
- No te confundas Dimitri, esta técnica es muy complicada de dominar, pero observa las manos de la chica al combatir ¿Aun no te has dado cuenta que solo esquiva y utiliza las piernas, nunca las manos? - impresionante, solo tenía una agente con esa habilidad tan desarrollada, pero era evidente que estos dos chicos la dominaban a la perfección.
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¿Cual es tu realidad, mi princesa?
Teen FictionElla tiene la imponencia de un dios, la pureza de un ángel y la fuerza de un demonio sin embargo sufre la frajilidad humana. Y cada vez que la veo, más inalcanzable parece ser, pero algun dia lograre que seas solo "mi princesa" esperame.