LA ESPOSA ÁRABE. Despreciada.

CAPITULO 25

Jhon vio salir a Rania y trató de alcanzarla, subió a otra camioneta y fue tras de ella.
Rania sentía los nervios a flor de piel, que hacía maniobras hasta que terminó chocando con otra camioneta frente a ella.
El impacto fue leve que Bruno logró salir lo más pronto posible y correr en su ayuda. Jhon salió de la camioneta y corrió en su ayuda y ahí estaban Bruno sosteniendo a Rania en sus brazos y Jhon apretando sus dientes y puños tan fuerte.
—¿Estás bien? Vamos al hospital para que te revisen.¿Dónde está Tifa y.....—Bruno se quedó en silencio al sentir el leve apretón de Rania y entendió que no debía pronunciar el nombre del pequeño.
—¿Y el niño? —terminó la frase.
—Están bien..vamos los llevo al hospital tienen que ver tu herida en la frente. —habló Jhon mirando a Bruno sabiendo que tenía que aceptar.
Bruno caminó con Rania en los brazos a la camioneta y Jhon los llevó al hospital, todo el trayecto fue en completo silencio hasta que llegaron y fueron recibidos en emergencias.
—Todo está bien señor Ferrer no tiene lesiones graves. —informó el Galeno.
—Y ella...¿Cómo está ella?
—La herida está suturada y la radiografía muestra un golpe en su lado izquierdo Pero no es grave, solo debe descansar y no tener inconveniente que le causen estrés.
Jhon escuchó las indicaciones del Galeno y apretó sus dientes, pues  nuevamente tendría que esperar para decirle que ya sabía que Ainar era Rania y que lo supo Desde hace años.
Bruno salió con Rania y fueron al estacionamiento.
—Muchas gracias por la ayuda Pero pediremos un Uber para que nos lleve a casa. —sugirió Bruno.
Jhon sentía ganas de romper su cara, pero se detenía, miró a Rania y se alejó.
—¿Cómo te encontró? —preguntó Bruno sin entender ese encuentro.
—No tengo idea de que hace en casa de Arielle..su Arielle. Bruno, tenemos que irnos de aquí.
—Seguir escondiendo te de él.. y no piensas en Jhon, el tiene derecho a saber de su padre. Rania no podemos ir contra el destino, si él está aquí no es precisamente en busca de su antiguo amor, de eso estoy seguro.
—El sabe que soy Ainar, jamás vio mi rostro como Rania, nunca quiso verme, así que el persigue a su amante, no a su esposa, además aquella noche le dije que lo intentaría con mi esposo y que el le diera una oportunidad a Rania, su esposa.. ¿Y que hizo?  Simplemente desapareció y cuando volvió su actitud era la misma salir temprano y llegar muy tarde. No Bruno, el no quiere a Rania, el busca el placer de Ainar.
Bruno quedó en completo silencio, subieron al Uber y fueron a la residencia Ferrer. Dejó a Rania en la habitación y al cuidado de Sara y salió nuevamente en busca de toda y Jhon.
Jhon vio subir a Bruno y Rania en el Uber y los siguió a distancia, y luego vio salir a Bruno en otra camioneta. Jhon se adelantó y pudo darle alcance, hasta ponerse frente a él y obligarla parar, Jhon bajó de la camioneta y fue a dónde Bruno ya estaba por salir.
—Necesito hablar con Ainar, y no me digas que es tu esposa por qué se que no es verdad. —habló Jhon seguro de sus palabras.
—¿Y que te hace pensar que no es mi esposa? —contradijo Bruno.
—Por que es mi.....
—¿Tu qué?  ¿Tú amante?.
—No...no es mi amante.
—Y no me interesa saber que es para ti Jhon, y no seré yo quien te impida hablar con ella, ella es una mujer adulta y confío que lo que haga sea  correcto. Puedes ir ahora y hablar yo iré por el niño y su Nana. Y para cuando yo este de regreso no quiero verte en mi casa, ni escuchar un reclamo de ella en mi contra. Aprovecha tus cinco minutos de fama.
Bruno subió a la camioneta y salió rumbo a la hacienda Arielle 'S.
Mientras todo eso pasaba con Jhon y Rania.
En la hacienda.
Tifa subió a la habitación y fue al baño, arregló sus cabello y colocó un velo en su rostro, salió del baño y se asomó en el ventanal y vio todo Desde arriba.
—Aláh...¿Cómo es posible esto? —dijo llevándose las manos a su boca como ahogando un grito.
—¿Cómo supo que estamos aquí? ¿Cómo se enteró? Jhon... Aláh..sabrá que Jhon es su hijo. No puede ser..se le terminó la tranquilidad a mi niña.
Tifa vio salir a Rania y bajó corriendo las escaleras y no la alcanzó, fue a la sala donde estaba Arielle y Dora sin saber quién era Dora.
—Arielle, tengo que irme, por favor pídele a Gabriell que traiga a Jhon que nos vamos. —dijo Tifa algo nerviosa y Dora se puso de pie y se acercó a ella.
—¿El pequeño se llama Jhon? Y la madre Ainar...¿ Cierto? Eso fue lo que pude entender y luego todo este alboroto. —dijo Dora y Arielle apretó  sus labios en una fina línea. Miró a Tifa y esta sin entender.
—Si...así es. —respondió Tifa.
—Entonces es ....
—Mamá Dora dejemos que las cosas se aclaren no estamos seguro de que sea la misma persona que Jhon está buscando, la mujer que el busca su nombre es Rania Al-khalifa, y ella es Ainar Ferrer. Tifa por favor deja que el niño disfrute de la feria junto a sus primos, yo me encargo y si deseas ir con Ainar ve tranquila por favor. —interrumpió Arielle a Dora y refiriéndose a Tifa.
Tifa salió de la sala no muy convencida de lo que había escuchado.
Dora miró a Tifa salir de la sala y miró sonriendo a Arielle.
—Se que es ella hija... Jhon me contó de ese cambio de nombres.
—Por como se dieron las cosas ....veo que Rania y Ainar es la misma...y si es así,  mamá Dora ese pequeño es tu nieto, ese pequeño lindo es tu nieto, pero vamos a dejar que ellos arreglen sus cosas, solo espero no tarden mucho.
—Vamos hija, lléname con el niño por favor.
Arielle y Dora salieron y fueron a la feria donde ya estaban todos, Tifa había salido en busca de Jhon y terminó por irse a la feria.
Bruno llegó al pueblo dando tiempo de que Jhon y Rania pudieran aclarar las cosas.
Tifa encontró a Bruno y se acercó apresuradamente a él.
—Bruno, ¿Donde está Rania? ¿Y que te pasó en la frente? —preguntó preocupada.
—Está en casa, y  tuvimos un pequeño accidente nada grave.
—Aláh, tengo que irme ya...por favor te recomiendo a Jhon..por favor.
—Tifa... Tifa espera..no vayas seguramente está hablando con Jhon.
—¿Qué? Eso no puede ser.
—Si..el la siguió y en estos momentos deben estar ablando.. será mejor darles su espacio.
—Aláh...¿que pasará ahora?
—Confiemos en que se aclaren las cosas entre ellos. Ven vamos a disfrutar un momento de toda esta feria.
Bruno y Tifa pasaron gran parte del tiempo mirando cada evento y siempre vigilantes del pequeño Jhon, dora era fascinada al ver a su nieto estar feliz.
Mientras todos disfrutaban del día de feria.... Jhon y Rania estaban en un ambiente muy tenso.
Jhon estacionó la camioneta, bajó y entró en la sala sin pedir permiso y preguntó por Ainar.
—Está en la terraza señor.
—Me puede llevar con ella supe de su accidente y quería saber cómo estaba.
Jhon fue llevado a la terraza donde vió a Rania pensativa y distante.
La observó por un momento y se acercó a ella a paso lento.
Rania después de que Bruno le dijera todo eso, se cuestionaba mentalmente si descubrirse ante Jhon o estar segura de que era lo que realmente deseaba Jhon, si a Ainar para retomar esa relación y escuchar todo sobre su fracasado matrimonio Desde el punto de vista de Jhon, a buscaba a Ainar
Su mente era un caos completo en esos momentos, pensaba en Jhon su hijo, y en Jhon padre..sabía que ambos tenían derecho a saber la verdad. ¿Pero como decirme a Jhon sobre su hijo si como Rania jamás la toco?
—Aláh... ayúdame por favor. —pronunció en u susurro.
—Ainar...podemos hablar. —dijo Jhon y Rania se giró de una quedando frente a él y muy sorprendida.
—¿Que haces aquí? Mi esposo.....
—Lo ví salir...no te preocupes. Solo deseo que me escuches por favor.
—Jhon...no tengo nada que escuchar de tí, Estoy muy confundida y por ahora no veo como empezar una charla contigo.
—Ainar. Solo escúchame.
—Jhon por favor...me duele mucho la cabeza, tuve un accidente.
—Solo déjame acercarme a ti, escúchame por favor. —insistió Jhon y Rania lo miró fijamente recordando las palabras de Bruno.
—Esta bien Jhon. Te voy a escuchar...vamos a hablar y que sea la última ves que invades mi hogar de esta forma. Se que estamos en un pais liberal, Pero yo sigo fiel a mis costumbres, le debo respeto al hombre de esta familia.
Jhon sonrió aceptando las condiciones de ella, la ayudó a ponerse de pie y salieron de la terraza para ir a otro lugar fuera de la hacienda y poder hablar con más tranquilidad.