CAPITULO 13

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Jhon volvió a la oficina, y pasó el resto de la tarde sumergido en sus planos.
Realizó llamadas con su equipo de Nueva York, sin siquiera preguntar por los trabajos pendientes de Arielle.
Cerraba los ojos, apoyando su cabeza en el respaldo de la silla, y masajeando su cien.
—Rania .. Rania... por qué eres tan conformista mujer...y tú, Ainar... Ainar. —pensó, tomó su teléfono y buscó el contacto de Ainar, leyó el mensaje una y otra vez

"También deseaba verte, después de nuestra apasionada noche deseaba volver a verte.'

Cerró los ojos, y dejó el teléfono sobre el escritorio. Volvió a centrarse en su trabajo sintiendo una confusión total, sin poder concentrarse al cien por ciento en lo que hacía.
—Esta situación me volverá loco, Rania pidiendo darle una oportunidad a esta locura de matrimonio. ¡Aash! Maldici0n. —se empujó y la silla rodó, se puso de pie, fua al minibar se sirvió un vaso de whisky y lo bebió de un solo sorbo, luego otro y otro.
—Voy a ponerle punto final a esta situación, no puedo seguir con esta doble vida. —dijo Jhon tomando el teléfono y leyendo nuevamente el mensaje recibido de Airan.

"Tambien deseaba verte, después de nuestra apasionada noche deseaba volver a verte.' —y respondió.
—Entonces te espero en nuestro lugar de siempre.....no tardes tanto.

Miró la hora, ya era casi las ocho de la noche, dejó todo en completo desorden, cerró la oficina y salió en dirección a ese lugar de la playa donde se encontraba con Ainar.

Manejó tan de prisa y llegó al lugar alejado de toda vista pública, bajó del auto y caminó hasta llegar a la orilla de la playa, el viento revoloteaba su cabello y parado frente al mar, con las manos en sus bolsillos cerró los ojos y de pronto sintió la calidez de unas manos que lo abrazaron Desde atrás, contuvo la respiración, y apretó suavemente esas delicadas manos enredadas a su pecho, se giró y se encontró con la hermosa sonrisa de Ainar.
—Ya estoy aquí. —expresó apretando sus labios y formando una línea curva en ellos. Jhon la miró y apartó su cabello que se batía al viento.
—Sabías que tienes unos ojos hermosos, y una sonrisa encantadora.
—Ahora lo sé...tu me lo estás diciendo.
Jhon la miró y su corazón se estrujó.
—Tenemos que hablar Ainar.
—Está bien, te escucho..sabes que puedes decirme lo que sea, incluso si deseas terminar nuestros encuentros lo acepto, asi como acepto que no tenemos una relación, que esto es solo un desliz de ambos. —habló Airan intuyendo que Jhon terminaría los encuentros.
Él la miró fijamente. ¿Ella era así de liberal, otra en su lugar no lo haría.
—No te sientas comprometido solo porque fuiste el primer hombre en mi vida.
—¿En verdad me estás diciendo todo esto Airan?
—Si Jhon.... en verdad te lo estoy diciendo, se que tienes a tu esposa y yo a mi esposo. No sé cómo es tu relación con tu esposa, Pero sino es tan mala como lo quieres creer ve.. date una oportunidad con ella, dale la oportunidad de demostrar de lo que ella es capaz. ¿La has escuchado alguna ves sin reprochar las circunstancias de su matrimonio? —preguntó Airan haciendo que Jhon reflexione sobre su relación con Rania.
—No hay comunicación entre ella y yo.
—¿Eres tú o ella? Jhon, si el destino te cruzó con ella y te unió a ella no....
—Airan...solo di que esto se terminó. —espetó algo molesto.
—Solo quiero que te des una oportunidad con Rania.
—¿Y tu?
—No hay compromiso entre nosotros. Lo Estoy intentando con mi esposo.
—¿Te acostaste con el? —preguntó sin emoción.
—Jhon.....jamás voy a interferir en tu matrimonio..ve a darte una oportunidad con ella. —dijo Airan segura de la decisión de acabar con ese juego. Jhon la miró en completo silencio, Airan acarició su rostro y sonrió.
—Creo tienes razón....nunca le di a Rania, tiempo de demostrar que en verdad quiere darle una oportunidad a este matrimonio.
—¿De verdad le darás un oportunidad a tu matrimonio? —preguntó Airan con una emoción que fue muy clara para Jhon, él la miró y frunció el ceño viendo brillar los ojos de Airan y eso le dió un mal sabor de boca. Se puso de pie y al igual que Rania, se miraron fijamente y salió sin decir nada más.
—¡Jhon! Espera. —gritó Rania al verlo alejarse y Jhon simplemente se alejó, Rania tomó la cesta que no tuvo tiempo de brindar lo que había llevado para compartir.
Rania caminó, y llegó para tomar un Uber y volver al departamento, sentía una mezcla de confusion, y deseaba que Jhon en verdad le diera la oportunidad a su matrimonio.
—Si eso pasa...jamás sabrás que Airan y Rania somos la misma mujer. —se dijo así mismo.
El Uber tardó un poco pero al fin ya estaba de camino al departamento, sentía una emoción que su corazón estaba lleno de esperanzas, por su matrimonio, miró pasar los edificio por la ventanilla muy metida en sus pensamientos, buscó el velo en su cartera y lo colocó en su rostro.
El chófer hizo la parada en la dirección que Rania le había entregado.
—Hemos llegado señora. —informó el hombre haciendo que ella, saliera de sus cavilaciones.
—Muchas gracias. —respondió pagando y saliendo rápidamente del auto para entrar al ascensor, cuando su teléfono sonó.
—Niña ..¿Dónde estás?
—Ya estoy aquí.. tranquila, estoy feliz, feliz lo amo cada día más...Tifa.
—Niña...
—Es un hombre maravilloso, no me equivoqué al....-se abrieron las puertas metálicas. quedando en shock ante la imagen que tenía frente a ella, al momento de tocar los dígitos.
-¡Tu! -dijo abriendo los ojos como plato.

Jhon dejó a Ainar en la playa subió al auto y salió de ahí repitiéndose cada palabra que le había dicho ella.

"Solo quiero que te des una oportunidad con Rania."

"No hay compromiso entre nosotros. Lo Estoy intentando con mi esposo."

"No te sientas comprometido solo porque fuiste el primer hombre en mi vida."

"jamás voy a interferir en tu matrimonio..ve date una oportunidad."

Apretó el volante al igual que sus dientes marcando su mandíbula.
—Ainar...¡Rayos! Rania..ustedes me volverán loco. -se dijo. Pasó por una tienda de venta de flores y compró un ramo de rosas, siguió su camino y llegó al parqueadero del edificio, bajó del auto tomó las flores y caminó.
Tomó el ascensor y entró, marcó los dígitos y empezó a subir Desde el sótano a planta baja dónde se había solicitado el ascensor. Las puertas metálicas se abrieron y se encontró con Rania.
—Es un hombre maravilloso, no me equivoqué al.....—el silencio fue sepulcral entre los dos, al escuchar estas palabras.
Rania miró las flores en manos de Jhon, mientras el la recorría con la mirada viendo como ella intentaba arreglar su velo.
—Jhon. —pronunció asustada...ella creyendo ser descubierta y el malinterpretando las palabras de ella.
—Creo que esto es un error, intentar dar oportunidades es otra locura.
-Jhon...espera, no se que estás pensando yo.....yo..
—Tu nada Rania...tu nada, lo sé todo. No entiendo porqué pides una oportunidad a este disparate de matrimonio si sigues con tu ex. No entiendo en verdad. —expresó algo furioso tirando las flores por los pies de Rania y darse la vuelta para salir de ahi.
—Jhon...espera. —gritó Rania sin ser escuchada. Corrió tratando de alcanzarlo Pero un Uber se interpuso entre ellos al momento de cruzar la calle, Rania lo vio subir al auto y alejarse.
—¿La llevo? —preguntó el chófer del Uber, Rania miró desaparecer el auto en el que Jhon se subió y regresó para tomar las flores y subir al departamento.
—Alá, ¿Que fue lo que pasó? —pensó cerrando los ojos mientras subía.
Miró el teléfono deseando enviar un mensaje o una llamada, Pero no se atrevió, porque sería Airan de quien recibiera el mensaje. Las puertas se abrieron y pasó al interior del departamento donde estaba Tifa esperando pues había escuchado parte de las pocas palabras que cruzaron.
—¿Que pasó mi niña? No escuché bien.
—Tifa.. no se exactamente qué fue lo que pasó. Lo vi con este ramo de rosas y luego lo arrojó a mis pies y cuando traté de preguntar para explicar lo que haya mal entendido, no lo pude hacer..se subió un Uber y desapareció.
—Por Alá, cuando no es una cosa es otra pero algo pasa.
Rania puso las flores en un jarrón y las llevó a su habitación.
Se tiró sobre su cama y cerró los ojos.
—¿Que castigo estaré pagando? ¿Por qué todo me sale mal? —pensó sintiendo estrujar su corazón, tomó el teléfono decidida a enviar un mensaje a Jhon cuando le llegaron unas notificaciones del escándalo de Alih siendo captado con una misteriosa mujer. El escándalo del príncipe era de tanta importancia que estaba en todas las redes sociales.
—Alá...otro escándalo, no dejaremos de estar en el ojo del huracán. —se dijo así mismo dejando de lado el celular, fue al baño se quitó todas sus prendas y entró a la ducha.
Mientras Rania no le daba importancia al escándalo de Fátima con Alih, Jhon también veía el escándalo en las redes cuando miraba el teléfono para enviar un mensaje a Airan ahi sentado frente a la playa.
—Claro, la misteriosa mujer eres tú Rania, por eso llegaste asustada, creíste que jamas me enteraría de tus salidas. —pensó mirando las fotografías de Alih y Fátima que lo seguía acosando por todos lados, siendo el el único en saber la identidad de ella.

LA ESPOSA ÁRABE. Despreciada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora