-27-

1.1K 141 18
                                    

LOLIERY. (BELITZIA).

Joder, no puedo creer que esto me esté pasando a mi, necesito que me suelte, necesito regresar con Arodmy.

—Porfavor— susurro débilmente— no hice nada— digo entre lágrimas.

—No, claro que no hiciste nada malo hija— dice ese señor al que desconozco completamente.

Estoy por replicar y decirle que está loco que el no es mi padre, yo soy Loliery Meram. Pero un dolor me hace callar y llorar más fuerte.

"Mi bebé"

Quiero pedir piedad por mi bebé pero si este hombre es enemigo de Arodmy no dudará en separarme de mi pequeño o pequeña, aún no lo sé.

No sé cuánto tiempo pasa pero todo en mi alrededor se vuelve oscuridad.

DIMITRI.

—Rápido llevenla a la sala de operaciones ¡ahora!— indica Artemisa.

Mierda, el plan era sencillo, matar al cabron de Arodmy y recuperar a mi cría, ahora la vida de mi princesa estaba en peligro, y si ella muere juro que quemare vivo al que la lastimó, incluyendo a Arodmy Darotski y a sus hermanos. Claro que también al idiota de Arnold.

—Artemisa— llamó a la doctora que se encargar de salvar a mis hombres o a mi cuando terminamos heridos— si mi hija muere tu te irás con ella— amenazó.

—Nunca ninguno de mis pacientes a muerto y tu hija no será la primera— contesta segura de si misma.

Veo como ingresan a mi cachorra a la sala de operaciones seguida por Artemisa y algunos doctores y enfermeras. Durante tanto tiempo la aparte de mi con tal de que no terminara muerta o raptada por alguno de mis enemigos o socios.

Cuando Belitzia nació he de admitir que no fue de mi agrado tener una hija mujer ya que eso solo significaba que correría más peligro por ser mujer y no por ser hija mía, sin embargo al sentirla en mis brazos por primera vez todo aquel sentimiento de rechazo se fue a la mierda siendo reemplazado por el miedo.

Mi principal enemigo fue Arnold quien juró destruir a cada miembro de mi familia con tal de tener el control absoluto de todo Rusia, sin embargo por más que lo intentara no lo consiguió, pero hace tres años atrás jugó su última carta, carta que casi lleva a la mierda a todos los de mi mafia, mato a mi esposa y a mi único hijo varón.

He de admitir que la muerte de Lorena no me afectó como querían pues a decir verdad no sentía nada por ella, aunque estuvieras casados sabíamos perfectamente que ambos teníamos amantes cosa que no nos afectaba en nada, Lorena y yo nos casamos por conveniencia, era hija de un narcotraficante en México con el cual hice un par de negocios, ella era hermosa en su tiempo nos amamos, pero ese amor se desvaneció dejando a flote a unos completos desconocidos.

Pero la muerte de mi hijo, Bastian, esa casi me lleva a la locura, intenté acabar con todos a mi paso, incluso socios míos terminaron muertos por mi culpa. Fue ahí donde entró Arodmy, con su cara de arrogancia, llegamos al acuerdo de que una parte de Rusia sería de el y una mía, ni el ni yo tenemos permitido cruzar el territorio del otro, sin embargo yo rompí esa regla por ir a recuperar a mi cachorra.

Mi pequeña Belitzia ahora está en peligro de muerte.

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~

Al cabo de tres horas la desesperación ya  empezaba a tomar posesión de mi tranquilidad. Son las nueve de la noche y aún no tengo noticias de mi hija.

—Suficiente— digo para mi.

Estaba por abrir la sala de operaciones cuando finalmente vi salir a mi hija inconsciente en una camilla seguida de las enfermeras y de Artemisa, esta última me dedica una mirada como si no supiera que decir.

—¿Qué sucede?— cuestiono empuñando mi arma.

—Ella esta bien, afortunadamente logramos salvarla a ella y a su bebé, pero, ¿por qué mierda no me informate de su embarazo?, pero logre salvarlos a ambos— hace una pausa.

¿Bebé?, ¿ese infeliz la tocó?.

—¿Dices qué mi cachorra está en embarazo?— preguntó estupefacto— ¿cuánto?.

—Aproximadamente un mes casi dos— informa— pero debido al disparo su embarazo es de alto riesgo, debe de descansar y cuidarse mucho porque si no puede morir el bebé o ambos.

Matare a Arodmy, lo matare.

Salgo del hospital demasiado enojado, tomo el teléfono y le marcó a una sola persona.

—Matare a tu hijo, lo matare, me entiendes— ladró furioso a la perra que está tras el teléfono.

—Para mi ese monstruo murió el día que decidí abandonarlo— es todo lo que dice antes de colgar.

Subo al auto dándo órdenes a mis hombres, uno de ellos me informo que al parecer el bastardo de Arodmy no murió del disparo que le di, y eso es bueno al menos podre divertirme un rato torturandolo.

—Tú hora llego Arodmy Darotski, tu y los tuyos morirán como que me llamo Dimitri.

—Tú hora llego Arodmy Darotski, tu y los tuyos morirán como que me llamo Dimitri

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Capítulo corto, espero poder actualizarles en estos días.

Si no votas la muñeca del juego del calamar se robara a tu mascota xd.

RED LOVE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora