Unequal | z.m

< 6. >

Mila's POV.
- ¿La reunión está lista? - me preguntó mi jefe, Aaron, por décima vez en el día.

- Sí, todo perfecto.

Sonrió con nerviosismo y entró a su oficina.

Volví a mi lugar y suspiré, hoy en la noche llegaba el Canadiense y todos estaban nerviosos.

Vi mi celular y tenía un whatsapp de Brynn.

"¿Qué tal la 3ra noche con tu galán?" decía, negué con la cabeza y respondí.

"No es mi galán"

"Pero pasaron la noche juntos, ¿verdad?"

Mordí mis labios al recordar a Zayn sobre mi, gimiendo.

"Ya sabes, pero tuve que salir temprano para el trabajo, lo dejé dormidito".

"Uy, chica ruda" reí ante eso y guardé el celular.

Cerré el documento que estaba leyendo en la computadora y abrí facebook.

Por instinto terminé en la cuenta de Zayn, no había publicado fotos ni estados desde hace mucho.

Estaba de stalker y llegué a mayo de este año, en ese entonces tenía de perfil una foto de él y Danny, estaban de espaldas ante el mar y había una chica al lado de Zayn, era más alta que él, reí un poco ante eso.

- ¿Te causa mucha risa mi estatura? - dijo alguien en mi oído y me ericé.

Voltee y claro que era Zayn, abrí los ojos con sorpresa y besó mis labios, lo empujé y se rió.

- No deberías estar aquí - le dije.

Se recargó en el borde de mi mesa y sonrió.

- Sabes mejor que nadie que nunca hago lo que debería.

- Y tu sabes que hoy es un día estresante, si Aaron te ve aquí..

- ¿Aaron?

- Uno de mis jefes.

- No seré un problema, lo prometo.

- Ok, y perdón por dejarte solo, tuve que salir temprano.

- No importa, me lo vas a compensar.

- ¿Cómo?

Me guiñó, rodé los ojos y sonrió.

- ¿Y qué es tu trabajo aquí? - me preguntó viendo a los lados.

- Pues hoy no mucho, todos están preparando sus palabras para la reunión de esta tarde y no estamos tomando llamadas.

- ¿Tomas llamadas?

- Y las hago, también llevo muchísimos cafés a Aaron y hago informes de ventas.

- ¿Mucho trabajo?

- El suficiente.

- Suena bien, aunque ese Aaron está muy presente en tu trabajo.

Levanté las cejas y se encogió de hombros.

- Tiene que estar presente, es mi jefe.

- ¿No era uno de muchos?

- Sí, pero de él tomo la mayoría de órdenes.
Bufó y empezó a dar vueltas por la sala.

Y de pronto salió Aaron de su oficina, se acercó a mi puesto y sonrió.

- Está todo bien, ya llegó el Ingeniero Anderson a la ciudad y lo llevaron a su comer, en menos de dos horas estará aquí - dijo.