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Sentir como Kukuru le agarro de la muñeca sorprendio al azabache, se quedo quieto en donde estaba y con lentitud fue girándose hasta verlo a los ojos.

— Yo no creo que seas débil, Nobita. —

Nobita no dijo nada, se quedo completamente callado sin poder apartar la mirada de él y de alguna forma, la manera en como Kukuru lo estaba viendo lo empezó a poner nervioso, pensaba que tal vez lo había incomodado o algo por el estilo, no podía adivinar que era lo que estaba pasando por la mente de Kukuru.

El azabache paso saliva tratando de que no se notara que estaba nervioso pero era en vano, él era como un libro abierto y el de tes morena se dio cuenta, así que para no alterarlo más, suavizo su mirada y una pequeña sonrisa se formo en sus labios.

— Nobita. —

— ¿S-Si? —

Kukuru agarro ambas de las manos de Nobita con las suyas, las agarro con bastante cuidado como si el mas mínimo movimiento brusco lo fuera a lastimar, usando sus pulgares le dio unas cuantas caricias y bajo la mirada viendo en dirección a sus manos, este tiempo también lo usaba para armarse de valor y decírselo, mientras mas pensaba sobre esto el color rojo iba subiendo a su rostro hasta que finalmente, suspiro y levanto la cabeza volviendo a mirarlo directamente.

Ver como el de tes morena volvió a verlo tan repentinamente hizo que se sobresaltara pero se mantuvo en su lugar.

— La razón por la que quiero protegerte es porque eres especial para mi y no quiero que te pase nada. — Kukuru podía sentir como su corazón se aceleraba, pero a pesar de sus nervios, no se detuvo. — Desde que estuviste conmigo, ayudándome cuanto mas lo necesitaba, sabia que ibas a significar algo para mí, en un inicio creí que seria solo una amistad, pero me equivoqué. — Dio un paso hacia adelante, acercándose un poco mas al azabache.

Mientras mas lo escuchaba, los nervios en Nobita iban aumentando y sus mejillas se iban enrojeciendo, los nervios impedían que hablara y si algo salía de su boca, estaba seguro que no iba a entendérsele.

— A lo que quiero llegar es que... — Volvió a tomar aire, y fue lo más directo que pudo. — Te necesito conmigo, Nobita, y mientras este a tu lado voy a protegerte de cualquier cosa. —

Tras la confesión de Kukuru, el azabache podía sentir su rostro arder y su corazón dar mil latidos por minuto, sus manos empezaron a temblar, no sabia que decirle pero, se sentía feliz.

— K-Kukuru... Eso es... — Temblaba, con cada palabra que salia de su boca reflejaba el manojo de nervios que era. — Yo... —

El de tes morena se dio cuenta de los nervios de Nobita así que para no hacerlo sentir obligado a responder, rápidamente negó con la cabeza llamando la atención del azabache, una vez hecho esto le mostro una sonrisa.

— No tienes que responderme ahora. — Esto sorprendió un poco al azabache, aunque también lo tranquilizo. — Solo quería que sepas... Que tienes mi corazón. —

Kukuru llevo las manos de Nobita a su propio pecho cuando dijo eso último.

Por parte del azabache, se lo quedo mirando sintiendo como aun sus mejillas ardían y estuvieron mirándose por unos segundos mas hasta que finalmente, Nobita le regalo una sonrisa al de tes morena.

Ahora, ambos iban de la mano en dirección a la montaña, Nobita aún quería mostrarle la vista que tenían desde ahí así que en silencio, fueron avanzando. Ninguno se sentía incomodo, el silencio de hecho era bastante agradable para ambos, por parte de Kukuru no pensaba nada en particular, en cambio Nobita, él estaba bastante confundido, habían pasando tantas cosas en estos días que no sabía ya ni como sentirse pero, de lo que podía estar seguro, es que estaba feliz, tenerlos a su lado.

Combinados (Nobita x todos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora