Ethan:
Entro a la casa tras Savannah – quien diría que estarías haciendo esto hace unos días, sonrió para mí mismo – Ella parece nerviosa o como si le afectara mucho mi presencia, eso me gusta.
Cuando enciende la luz puedo ver el interior de su hogar. Es un lugar bastante amplio pero cálido, lo cual es contradictorio con la entrada de la casa que la hace ver pequeña.
Camino tras ella hacia lo que sería su salón y sigo su indicación para sentarme en el enorme sofá negro que decora la estancia y me sorprendo al darme cuenta de lo cómodo que es.
Todo se ve extremadamente pulcro y organizado. Este lugar no luce de una persona de su edad, más bien parece de una mujer divorciada con un gusto consolidado, es bastante fino, demasiado bien decorado y reluciente – miro los cuadros de la pared hasta que detengo la mirada en una pintura que llama mucho mi atención
¿Es ese un Velásquez?
Me pregunto con ambas cejas levantadas de la impresión.
Cuando Savannah regresa con una botella de agua y un vaso nota mi cara de sorpresa y mira en la misma dirección en que mis ojos se habían quedan plasmados.
-¡Ah!, el Velásquez, es muy bonito ¿verdad?
Yo solo asiento con la cabeza.
-Sabes, te tengo que hacer una pregunta que tú ya me habías hecho a mí - hago una pausa dramática como las que Santana acostumbra a hacer y yo detesto - ¿Quién eres?
Savannah se ríe, me entrega la botella de agua y se sienta en el otro extremo del sillón subiendo las piernas cruzadas una sobre la otra en la mesa del centro.
-Soy Savannah Torres, ya te lo había dicho.
-Más detalles, ¿Por qué tu casa luce como sacada de una revista?
-¿No puedo simplemente ser una persona de buen gusto y tener cosas bonitas?
-Estas cosas no solo son bonitas, son costosas.
Me mira detenidamente y sus ojos muestran algo de diversión. Durante unos segundos parece deliberar algo.
-Tengo suerte - Toma de su bolsillo algo redondo y pequeño, segundos después caigo en cuenta de que es una pastilla, la pone en su boca y toma agua de su vaso - mi padre es dominicano y mi madre americana, ambos de familias acomodadas, algunas de las cosas que ves, la mayoría de hecho, fueron proporcionas por ellos. El dinero nunca ha sido un problema para mí.
-¿El Velásquez también? Porque déjame decirte que eso va más allá de un buen regalo para tus dulces dieciséis
Pasa una mano por su flequillo en manera de nerviosismo, esto la hace ver bastante tierna.
-El Velásquez me lo regalo mi ex-novio.
Mi boca cae abierta y siento algo caliente subiendo por mi cabeza, algo que sentía cuando quería jugar con mis amigos en vez de estar grabando películas todo el tiempo y que me hacía desear tener una vida normal como la que ellos tenían, sentía celos.
-¿y tú ex novio era? -Esta vez mi voz sonó áspera - ¿hijo del presidente o algo así?
-El presidente no tiene hijos, tiene hijas.
-Ya lo sé, pensé que detectarías el sarcasmo.
Savannah pasa un dedo por su vaso y sonríe con coquetería.
-¿Celoso? - se acerca más a mí, lentamente, aguarda un momento, ¿está provocándome? - ¿Ethan Sloan siente celos de un extraño?
Para cuando me doy cuenta ella está a mi lado bastante cerca, yo dejo de prestar atención a la ola de celos que me abrazaba y miro sus tentadores labios, entonces se acerca más y pone su mano sobre la botella de agua que había olvidado por completo, la toma, destapa y vierte el liquido en su vaso mientras sonríe juguetonamente.
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Simplemente complicado [En corrección]
RomanceSavannah Torres es una mujer orgullosamente latina, fuerte, independiente y con una familia que la adora, su trabajo siempre fue lo primero para ella, sin embargo, tras descubrir que le queda poco tiempo de vida todo su mundo se rompe en mil pedazo...