Capítulo 16

12.4K 658 50
                                    

Cuando Christian me recordó lo que tenía que hacer la respiración se me volvió entrecortada. Pero después de permitir que me desnudara...no me rendiría. Me acerqué a Christian y empecé a desabrocharle torpemente, debido a mis estúpidas manos temblorosas, la camisa. Cuando terminé, se la saqué y la tiré al suelo, junto a mi ropa. Cada vez estaba más nerviosa, y no me costaba demostrarlo, no paraba de temblar. Conseguí quitarle el cinturón tras intentarlo varias veces...vaya, sí que estaba nerviosa. Le desabroché el pantalón y, armándome de todo el valor que pude conseguir en esas circunstancias, lo bajé. Al igual que él, tuve que agacharme para poder quitárselos.

-Christian... ¿puedes levantar los pies, por favor?- Le pregunté cortadamente.

- ¿No crees que primero deberías quitar los zapatos?- Me dijo intentando no reírse. Lo miré furiosa. Me di cuenta de que Christian no me había quitado los tacones. Le quité los zapatos junto con los calcetines lo más rápido que pude. Le hice una señal a Christian para que levantara las piernas, y lo hizo. Le quité los pantalones y los arrojé con el resto de la ropa. Me levanté con un nudo en la garganta. Me faltaba quitarle los bóxers... Le miré nerviosa. Me acarició la mejilla tiernamente, mirándome a los ojos, animándome a que acabara con eso de una vez. Temblando más que nunca, agarré el elástico de los bóxers y se los quité. Cerré los ojos para no mirar nada... la razón no era "no invadir su privacidad" si no todo lo contrario, en ese instante lo hacía por miedo de ver algo que me asustara. Me levanté nuevamente, tapándome los ojos con las manos. - Nora, abre los ojos.- Me susurró Christian. Negué con la cabeza. Christian me cogió las manos suavemente y me las apartó de la cara.

- No, no, no. Christian, déjame en paz. No pienso abrir los ojos...- Dije soltando en llanto. El miedo había podido conmigo. Christian me abrazó.

- ¿Por qué no abres los ojos, Nora?- Me preguntó en el oído.

- Tengo miedo...- Le dije sin poder parar de llorar.

- ¿Miedo? ¿Miedo de qué?- Me preguntó aferrándome más a él.

- De ti...- Le respondí con un tono de voz casi inentendible.

- ¿Me tienes miedo? ¿Tienes miedo de mí? ¿Por qué?- Me preguntó subiendo la voz.

- No exactamente...Sabes que no tengo mucha experiencia...te aclaro que no tengo ninguna. Me asusta verte...desnudo. Nunca he visto a ningún chico así. Sé que suena estúpido pero...- Le intenté explicar mientras las lágrimas iban cesando.

- No, Nora, no. No es estúpido. Es normal...todo el mundo tiene miedo a lo desconocido. Tienes que confiar en mí, ¿vale? Voy a separarme. Te quitaré los tacones y rápidamente nos meteremos en la bañera. Así ninguno ve nada del otro, ¿te parece bien así?- Me dijo tiernamente y yo asentí.

Christian se separó de mí y me quitó los tacones, tal como me había dicho. De pronto siento que me coge y me introduce en la bañera con él. Me sobresalto, y abro los ojos. Lo veo riéndose detrás de mí. Estoy sentada encima de él. Me aparto de él y me giro, para verlo de frente.

- ¿Qué te hace tanta gracia?- Le digo intentando parecer enfadada, pero su risa me contagia y acabo riendo yo también.

- Te hubieras visto... ¡Qué salto has pegado! ¿Es por la temperatura del agua? - Dijo parando de reír.

- Me has asustado. - Le respondí sonriendo.

- Me...- No pudo terminar, esa maldita voz nos interrumpió.

"Hola de nuevo, chicos. Me alegro de que hayáis cumplido con vuestro deber. Pero...sabéis por qué estáis juntos en la misma habitación, y todo se retrasa cada vez más y más. Hoy, ahora, avanzaréis. Es el momento ideal. Os dejaré solos, pero si no hacéis lo que ordeno, tendréis graves problemas. Al lado de la bañera, hay un folio plastificado. Cogedlo y leedlo. Tenéis que hacer todo lo que pone ahí. Voy a dejaros vuestro espacio, tomaros el tiempo que necesitéis, pero hacedlo. Suerte y adiós." Nos dijo el señor. Miré a Christian confusa. Christian se asomó por fuera de la bañera y cogió el folio. Tardó un par de minutos en leerlo, pero al terminar, su rostro quedó pálido como el hielo.

- Christian, déjamelo ver.- Le dije impaciente.

- No. No te va a agradar en absoluto leer esto. No quiero que te asustes, ¿vale? Te lo voy a dar, pero prométeme que no te desmayarás o algo parecido. - Me dijo y yo asentí. Me pasó el folio y comencé a leerlo.

ÓRDENES A CUMPLIR POR LAS DOS PARTES.

1. Besarse.
2. Tocarse.
3. Sexo oral.
4. Sexo anal.
5. Masturbación.

SecuestradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora