Capítulo 23

9.8K 604 32
                                    

-Bueno, Nora, creo que no me he fijado en tantos detalles. Ahora mismo también estoy alucinando. Sabes que no voy a dejar que nadie más te toque - Me respondió Christian acariciándome la mejilla con sus nudillos.

- ¿Cómo vas a conseguir eso, Christian? Ni siquiera has podido evitar que te torturaran a ti... No quiero que ningún hombre me toque, Christian...por favor, haz lo que tengas que hacer pero no permitas que me quiten lo más preciado, puro y sincero que tengo, mi virginidad, al menos no por la fuerza. - Le dije a Christian susurrando. Exploté en llanto de nuevo. Christian me acercó a su pecho y me abrazó.

- No permitiré que eso pase nunca, cariño. Sabes que jamás lo haría. Tengo una idea, no te va a gustar para nada, pero es eso o nada - Me contestó aferrándome más fuerte a su pecho.

- Dímelo, Christian. Seguro que prefiero eso a la otra opción.

- Nora, Ángel quería ser el primero que se acostase contigo porque eres virgen, pero si alguien lo hiciese antes que él, tú ya no le interesarías, ¿no? - Dijo Christian un poco nervioso.

- ¿Me estás diciendo que me acueste con otra persona para que él no lo haga conmigo? ¿Qué sentido tiene eso? Perderé mi virginidad igualmente... - Dije agachando la cabeza. Christian enseguida me agarró del mentón y me la subió de nuevo.

- Pero, como has dicho tú antes...por lo menos no la perderás por la fuerza - Respondió Christian.

- ¿Y quién se supone que querría meterse en ese problema por mí?
- Le pregunté sonriendo tímidamente. Obviamente ya sabía la respuesta.

- Pues... ¿Yo, por ejemplo? ¿Te sirvo? - Dijo sonriendo. Me reí ligeramente.

- Sí, Christian, tú me sirves - Le respondí sonriendo. Me acerqué a él riendo y le besé. - De hecho, me vienes a la perfección para este trabajo, señor Christian. Sabe usted bien que conoce mi cuerpo mejor que yo. Creo que tendré que explorar yo el suyo, ¿no cree?

SecuestradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora