- Tranquilízate, estás histérica. Necesito curarte las heridas para que no se te infecten, tienes la espalda llena de sangre. Esto te va a doler.- Dijo y a continuación sentí un escozor en la espalda insoportable. Christian me había puesto el algodón con alcohol en las heridas, no pude evitar gritar.-Lo siento.- Se disculpó.
- Christian, ¿por qué llamas a ese psicópata "señor"?- Le pregunté.
- Bueno, a él le gusta que le llamemos así, quiere que le tengamos respeto, y como te dije antes, escucha todo lo que decimos así que si no quieres que vuelva a hacerte esto, mejor ahórrate los insultos.- Me contestó.
- ¿Cuánto tiempo llevas aquí?-
- Año y medio- Me respondió. Esa respuesta me destrozó, ¿se supone que estaré aquí encerrada tanto tiempo?
- Oh dios mío. No seré capaz de aguantar tanto tiempo aquí encerrada, me volveré loca.- Dije triste y una lágrima calló por mi mejilla.
- No lo harás.-
- Antes dijiste que habían dos personas en cada habitación, llevas aquí mucho tiempo, ¿qué pasó con tu otro compañero?-
- Nunca he tenido un compañero, siempre es un chico con una chica. A la anterior chica la mataron porque se cansaron de ella.- Dijo él y empezó a llorar.
- ¿Cómo que se cansaron de ella?- Le pregunté mientras abrochaba mi corpiño ya que había terminado de curarme.
- Pues, que ella ya no les excitaba.-
- Explícate.- Le pedí intentando sentarme en la cama, pero las heridas me dolían demasiado.
- Tienes que descansar. No hace falta que te levantes, duerme un poco.-
- ¿Y tú dónde dormirás?-
- Pues en el suelo, como siempre.- Me respondió.Hola, chicas esperó que les guste la novela. No sean lectoras fantasma, comenten si les está gustando, se los agradecería mucho. Y muchas gracias a las que la leen
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Secuestrada
Storie d'amoreNora, una chica corriente, de 17 años, pelo negro, ojos verdes intensos y piel blanca. Tan inocente en un mundo como este, nunca había tenido ningún tipo de relación, ni sentimental ni sexual. En su instituto sacaba notas normales, ni muy altas ni b...