Chapter Three.

24.9K 570 101
                                    

Leah's.

Fuck, esta tan cerca de mi <sus labios están por besarme> pero el de pronto toma distancia.

Perdón Leah, no sé que me esta pasando -suspira fuerte y frota sus sienes-

No pidas perdón -lo miro- solo haz lo que sientas, eso es lo que necesitas

No lo necesito Leah, yo soy esposo de tu madre -me mira y gruñe-
Vale, vamos por partes, número 1. no es tu esposa, número 2. Ella nunca esta en casa y número 3. Siento que me deseas como yo a ti -enumeró cada punto con mis dedos y lo miro desafiante-

-abre los ojos como plato y me mira- ¿acaso estas demente, Leah? Yo amo a tu madre, nunca le sería infiel, menos con su propia hija, además, yo no te deseo y no puedo creer que tu me desees a mi, estas demente.

-río fuerte y lo miro fijamente- en ningún momento he hablado de tener sexo contigo, mucho menos de que le seas infiel, tienes una mente sucia, papi -muerdo mi labio y sonrío-

No me llames así por que.. -corta la respiración y suspira sonoramente-

¿Por qué papi? -me acerco a el y aprieto su polla ahora duro- ¿me deseas? ¿Deseas a tu hijastra? -lo miro y muerdo su labio inferior-

Aléjate -cierra sus ojos pero me toma de la cintura- por favor, aléjate Leah.

Tu boca dice algo, pero tu cuerpo responde de la manera contraria -aprieto aún más su polla- Papi ¿crees que no me doy cuenta de que en las noches entras y acaricias mis piernas?

¿Que? No, Leah, yo no -me mira nerviosamente y se aleja de mi-

-suspiro- vale, no lo haces -sonrío falsamente y camino hacia el inicio de las escaleras- almuerza tu, yo no tengo hambre, Harry -el solo me mira mientras camino y desaparezco en las escaleras-

<Joder, el me desea, lo vi en sus ojos, quiere tener su polla en mi coño, estoy tan jodidamente caliente>

Me doy una ducha larga y fría, me recuesto en mi cómoda cama y cierro los ojos cayendo en un profundo sueño.

Harry's.

Puta, esta maldita erección que me a dejado Leah por toda la tarde, y cuando recuerdo sus labios decirme papi, me mantiene duro como una roca, cuando me levanto de mi asiento la bragueta de mi pantalón me rosa la polla y duele infiernos.
Ya es hora de salir, es mi empresa, pero, tengo que cumplir como todos los empleados, no quiero regresar a casa y ver a Leah, no quiero regresar y tener que masturbarme en la ducha, detesto saber que Leah es prohibida, mi pequeña niña, es prohibida.

Salgo de las instalaciones de la empresa y destrabo los seguros de las puertas de mi auto para poder entrar en el, enciendo el auto y emprendo camino hacia mi casa, hacia mi pequeña Leah.

Leah's.

Ya he terminado de hacer mis deberes escolares (tarea) he limpiado un poco mi recámara, hoy tengo una fiesta, así que tengo que estar lista a las 7:00 pm.

Busco en mi armario algo sexy, quiero verme bien, es una fiesta, quizás encuentre a un chico que me interese, para poderme sacar de una buena vez a mi puto padrastro.

Encuentro un hermoso vestido blanco, se amolda perfecto a mi cuerpo, unos tacones (tacos) en color nude, me veo, linda, creo, ondulo ligeramente las puntas de mi cabello, un poco de maquillaje y estoy lista, no tengo permiso de nadie, me importa una mierda, no lo necesito de todas maneras.

Bajo las escaleras, tomo mi bolso, mi teléfono celular y las llaves de mi auto y me dispongo a salir de mi casa, para así ir a la fiesta, mañana habría escuela, pero no me importa, esta noche bebería hasta que no sienta mi cabeza.

Harry's.

Entro por la puerta que conecta al garage y a la casa, me extrañó no ver el auto de Leah en la cochera, seguro le presto el auto a Sophia, su compañero de estudio y mejor amiga de Leah.

Leah -grito para que me escuche- Leah -insisto de nuevo pero no hay respuesta, subo las escaleras y toco la puerta de su recámara- amor ¿estas bien? -suspiro y abro la puerta- Leah ¿estas en el baño? -abro la puerta y ella no esta- joder, se fue ¿donde esta? Ella es tan pequeña, no puede estar tan tarde por las calles, sola, es muy peligroso, son las 12:30 pm.

-tomo mi celular y me voy a llamadas rápidas, tecleo el numero 2-

Suenan 3 tonos y contestan.

Leah, amor ¿donde estas? -suspiro-

No soy Leah -ríe- <joder, la voz de un chico> soy Sebastián.

Cuelgo rápidamente la llamada, siento que la sangre me hierve y los celos se me suben a la cabeza en cuestión de nada.

°°°
Hola chicas, ya estoy de vuelta, aquí está la nueva actualización de capítulos, estoy algo seca de imaginación jaja, aún así creo que el capítulo me quedo bastante aceptable, muchas gracias por leer, las quiero.

Nat x.

Dirty Mouth |H.S| daddy kink.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora