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-No, pero si vos me estas cargando. -le dije y me separé de el. -La mina te está tirando los re palazos y yo no me voy a quedar tranquila, aparte va a estar acá siempre yyy no. -me senté en el piso y Salvador vino corriendo a abrazarme. Combate había ido a la pausa, así que nos podíamos quedar hablando un rato. 

-Vos sabes que no te voy a cambiar por nada ni nada, bobita. Déjala, ya va a encontrar a alguien acá adentro. -dijo Ramiro y luego de unos minutos se fue ya que estaban al aire otra vez. Me tiró un beso desde la casa del rojo y yo le sonreí. El programa finalizó y Salvador y yo fuimos a hablar con mi hermano. 

-Hola enano. -le dije, cuando llegué a su lado. Ahí también estaba Bian, quién me dió un beso a mi, uno a Salvi y se fue a cambiar. 

-Hola chiquita, ¿cómo estan? -me preguntó. 

-Bien bien. -Salvi lo abrazó y Gonza lo alzó a upa. 

-¿Rama donde anda? -me encogí de hombros dándole a entender que no sabía y me di vuelta. Lo ví ahí, hablando con la tal Azul. Gonza hizo una mueca y Paio vino hasta donde estábamos nosotros. 

-Me llevo al pequeño este, en un rato te lo traigo. -dijo y agarró a Salvador. Mi hermano se acercó a mi y me abrazó. 

-No pienses cualquiera, mi vida. Vos sabes que no te va a cagar. -suspiré en su hombro y sentí unas manos en mi cintura. 

-¿Pasa algo, mi amor? -me dí vuelta y lo vi a Ramiro, negué con la cabeza. -¿Estas segura? 

-Si, si. -me abrazó y me dió un beso en la frente. Mi hermano nos saludó y se fue con Bianca que estaba hablando con Agustín, uno de los nuevos. -¿De verdad no pasa nada, mi vida? -preguntó Ramiro. 

-Sí, de verdad Ramita. No pasa nada, no te preocupes. -me agarró de la mano y fuimos a buscar a Salvador y después de un rato fuimos a casa los tres juntos. Cenamos y Salvi se quedó dormido mirando los dibujitos en su habitación, le apagué la tele y volví a donde estaba Ramiro jugando con su celular. -¿Qué haces? -le pregunté mientras me tiraba a su lado y miraba su celular. Tenía un chat abierto. -¿Quién es? ¿Nacho? ¿Le queres decir que venga?

-No es Nacho... es Azul. -bufé.

-¿Para qué te habla?

-No, pasa que quiere que vayamos juntos al canal mañana porque no conoce. 

-¿Y por qué no va sola? ¿No tiene a nadie que la lleve? ¿Por qué no le pide a Nacho o a alguno de los chicos? -pregunté mientras caminaba hasta la cocina para servirme un vaso de agua.

-Qué se yo, _______. No le ando preguntando la vida a cada persona que conozco. 

-Deberías, uno no sabe con que clase de persona se puede encontrar. -dije y me senté en el sillón que se encontraba en frente suyo. El suspiró y se pasó la mano por el pelo: eso solo lo hacía cuando estaba nervioso. -A vos... ¿te gusta Azul? -pregunté, mientras jugaba con mis manos y miraba al piso. El soltó una carcajada.

-¿Te das cuenta de lo que me estas preguntando? Es una boludes tremenda ¿te pensas que si me gustara Azul yo seguiría con vos? Yo la conozco a Azul desde hace una semana que entró, y te sigo amando como antes y más todavía, porque a mi esa piba no me interesa y me da igual si esta o si no. -sonreí y suspiré.

-Pero... lo mismo, no quiero que este cerca tuyo, me cae re mal. Se te tira mucho y es re obvia. -el me abrazó y puse mi cabeza en su pecho para escuchar los latidos de su corazón.

-Si lo que te preocupa es que yo me vaya con ella, deja de pensar en eso porque no lo voy a hacer nunca. Ya te perdí una vez, no voy a ser tan boludo para perderte otra. Vos sabes que te amo mucho. 

-Yo te amo más. -dije, nos dimos un beso.

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Holaaaa! ¿cómo estan?

Mañana subo otro sin falta, pasa que esta semana estuve llena de pruebas y no tuve tiempo para nada. 

Un beso, disfruten el cap.

Mi elegido {ramiro nayar}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora