Insanity

CAPITULO 14

DE LA BITÁCORA DE PETYR NORTHMAN

MADRUGADA DEL 7 DE ABRIL DEL 2013

Estos días han sido eternos, las cosas han acontecido de la peor manera, lo único que me consuela es que mi hermosa Alice no me abandonó, ella es la que me mantiene cuerdo, la amo y lo siento de verdad, ella ha llenado mi vida... Aunque Victoria sacuda mi mundo y no tenga la fuerza para alejarme de ella, Alice es mi ancla, algo debo de hacer para que no se repita lo que pasó con Victoria.

Y hablando de no repetir, la situación de Anna fue la peor estupidez que he cometido en mi vida. ¿Cómo no lo vi venir? ¡Soy un tremendo imbécil!

Hoy, al llegar al sanatorio, fui directo a la oficina de David y le pedí que removiera a Anna del cargo de mi asistente y le pedí recomendaciones para contratar a alguien más. Era mucho más que obvio que me preguntaría mis razones, así que pidiéndole su entera discreción se las di, le expliqué lo que había sucedió y me comprendió. Para mi sorpresa y mi fortuna, ese día no se presentó Anna a trabajar, más tarde tocó a mi puerta Alice y me entregó una lista de candidatos para asistente, David me dejó a mí la labor de entrevistarlos y contratar al que me pareciera más adecuado. Alice aún estaba algo herida, eso era evidente, pero aun así me regaló un abrazo fuerte y un dulce y honesto beso antes de salir de mi oficina. Ella es un ángel, un hermoso ángel de cabellos dorados.

En la lista que mandó David había cerca de veinte nombres, más de la mitad eran nombres de varones, creo que esa fue una pequeña broma de su parte o quizá una sugerencia de no volver a traicionar la confianza de la mujer que me ama... no lo sé, quizá se lo pregunte otro día, cuando todo esto se haya calmado y disipado.

Entre los veinte nombres estaba el de un chico, Andrew May, según su currículo es egresado de psicología y está haciendo un estudio sobre las teorías del sueño y la hipnosis. Además, y según la nota escrita por el mismo David Torrence, la cual estaba subrayada tres veces y dentro de un círculo marcado con plumón fosforescente (creo que quería que de verdad notara a este chico) el joven Andrew May solo se dedica a su estudio y ha rechazado hasta el momento todas las propuestas de empleo que le han ofrecido, las cuales no dudé que le sobraran, ya que en sus notas aparecía el "Sobresaliente" por todas partes. Por lo mismo vacilé un poco en llamarlo para concretar una cita para una entrevista, porque pensé que así como había rechazado otros empleos, también rechazaría el de asistente, pero después de todo no perdía nada. Ya veré qué pasa con este chico, ha aceptado verme, pero aún puede rechazar el empleo. Acepte o no mi propuesta de trabajo, me parece muy respetable que quiera dedicarse solo a su estudio, esa dedicación me gusta, es la misma que yo tenía en mis años de estudiante.

He encontrado un disco compacto, de esos grabados en computadora, creo que Alice lo ha olvidado aquí. Lo puse en mi pequeño reproductor y resultó ser El lago de los Cisnes, es una delicia escuchar esas melodías, Dios bendiga a mi dulce Alice por su olvido...

Ha llegado la hora en que el cisne blanco muere; muere con dolor, su corazón está roto, su alma, desgarrada; bueno, al menos a mí siempre me pareció que Odette moría al final, (aunque alguna vez una maestra en la universidad me dijo que Rothbart se la llevaba al cielo, no le dije nada al respecto en ese momento, pero en realidad nunca lo creí). Las notas son vibrantes y amargas, siento que golpean mi cerebro, comprendo a la pobre Odette, su príncipe, su único amor ha sido engañado, ha sido cegado...

Esto es una locura, por un instante pude ver a mi Alice como la princesa cisne, llorando penosamente porque he puesto mis ojos en otra, en Victoria...

No, no puedo hacer esto, mañana que consulte a las chicas hablaré con Victoria...

La música es mágica, puede aliviar el alma o torturarla, es un arma de dos peligrosos filos. Le devolveré su disco a Alice.