Una historia cualquiera

El principio de la nueva vida

Aqui empieza una nueva etapa de mi vida, una etapa en la que yo decido lo que hacer y no lo establecido. Mentiría si dijera que no tengo miedo, que no estoy asustada como una niña pequeña, porque estoy muy asustada, tengo miedo de equivocarme y de decepcionar a la gente pero necesito vivir mi vida y no dejar que vivan por mí, que la gente no me diga de lo que soy o no soy capaz de hacer, necesito quererme y valorarme por mi misma y ver hasta donde puedo llegar. Esto no es un abandono ni una retirada, esto es coger carrerilla para tener un mayor impulso a la hora de alcanzar mis metas.

Ha pasado un mes después de la muerte de Neizan y ya lo tengo claro, en su día hablamos mucho sobre este sueño y a día de hoy yo sola lo voy a cumplir, lo haré por nosotros y por la vida que nos arrebató Philippe. He quedado con las chicas y con mi familia, se lo comunicaré a todos a la vez, así no daré tantas explicaciones innecesarias...
-Hola, os preguntaréis qué hacéis aquí todos juntos y porqué os he reunido. Veréis, como todos sabéis hoy hace justo un mes que Neizan se fue...- cada vez que hablo de él se me coge un nudo en la garganta que no me deja casi respirar... - Le prometí que viviría mi sueño, mejor dicho, nuestro sueño y eso pienso hacer... En poco más de tres meses me voy a Brasil, con una ONG para ayudar a los niños de la calle, hay cerca de 10.000.000 de niños sin hogar que sufren maltratos, abusos y dependen de la caridad de las personas para vivir.- No paro de escuchar un cuchicheo de todos los presentes, sé que no aprueban esta locura pero si me quedo aquí moriré con Neizan... Y no quiero...

No sé cómo proseguir con mi discurso, no paro de ver caras de desconcierto y de miedo...
-Cuando Neizan y yo estábamos juntos, soñábamos con casarnos un día e irnos a Brasil a cuidar de estos niños, él como médico ayudaría con su salud y yo como asistente social ayudaría buscándoles un hogar... Ahora que él ya no está me siento en la obligación de cumplir nuestro sueño, necesito hacer esto sino siento que Neizan morirá de verdad y yo me iré con él... Sé que es duro y que no os gusta la idea porque corro peligro en cierto modo pero aquí corro el peligro de morir de soledad...

Llevamos dos minutos en silencio y nadie se atreve a decir ni una sola palabra...
Mi padre se levanta para romper ese silencio incómodo
-Alice, mentiría si dijera que no me da miedo pero te apoyo, sé lo duro que está siendo esto para ti y más después de lo que pasaste con mamá...-este es mi padre, al que tanto echaba de menos, ese hombre tierno con lágrimas en los ojos que me crió junto a la mujer más maravillosa del mundo... -Así que adelante Alice.

Carlota no para de llorar, cómo siempre intento sacar un poco de humor de donde puedo para parar su llanto
-No te preocupes Carlota, me quedo hasta el día de tu boda, no podría perderme ese banquete.
No puede gesticular palabra alguna y se viene corriendo hacía mí para darme el mayor abrazo que me ha dado nunca y me susurra 'Neizan estará siempre contigo y estoy segura de que te ayudará, te quiero'

Todos han sido muy amables y comprensivos, la verdad es que me hubiera dado igual si no lo entienden. Es lo que he decidido y lo que haré.

Ya es el momento de coger el avión con destino a Brasil, han pasado ya tres meses desde aquella reunión donde dije que me iba, Carlota ya se ha casado y está muy feliz, mi padre ha conocido a una buena mujer y yo... Yo estoy apunto de volar a mi sueño, al sueño de mi gran amor...

-Cuídate pequeña, te quiero mucho. - Y con esas palabras y un beso de mi padre me despido de mi vida anterior para empezar una nueva vida.

Y en ese momento, con ese beso, ella se dió cuenta de que todo había acabado, que ese beso era el punto y final del capítulo del libro de su vida. Después de tanto releer ese capítulo por fin lo había dado por finalizado y ya estaba lista para empezar un nuevo capítulo. Tenía fuerzas para leer y vivir lo que el destino, el autor de su libro, tenía preparado para ella.