Me desperté, pero esta vez había sido por mi cuenta. Niall seguía durmiendo, se veía tan tierno. Momento ¿Yo dije eso? Un secuestrador no es ni un poco tierno, tiene el corazón de piedra, no se apiada por nadie.
Esto es muy raro ¿Por qué me tratan así? Tal vez no sea por mucho.
Me senté en el colchón, tomé mi cuaderno y también tomé una foto que tenía de mis padres en mi mochila, si sé que suena raro, pero que más da.
Coloqué la foto a un lado y la observé mientras imitaba la foto en dibujo. Cuando terminé, una lágrima recorrió mi mejilla, los extrañaba, no puedo evitar recordar nuestros momentos juntos, nuestras risas, nuestras discusiones. Probablemente no los viera más, pero no sabía la puta razón de éste secuestro, yo no me llevo mal con nadie.
Durante el día trato de olvidar a mi familia, por eso no hablo seguido de ellos.
Necesito ser fuerte, pero no puedo, ellos tarde o temprano me harían daño, no dudaba de ello.
Mientras pensaba en todo eso más lágrimas recorrían mi mejilla.
Vi que Niall se movía en la cama, se estaba despertando.
Se da vuelta mirándome, en la mañana se ve extremadamente sexy, no no puedo pensar en eso, Eva concéntrate.
— ¿Has llorado? —Pregunta con su ronca voz sexy.
Por dios Eva.
—Sí—Digo.
— ¿Por qué?
—Por mi familia, los extraño.
Él se quedó callado.
—¿No sabes si los volveré a ver? —Pregunté con la voz quebrada.
—No lo sé—Respondió seco.
— ¿Por qué me secuestraron?
—No te lo puedo decir—Habló con cierta frialdad.
Miré el dibujo que había hecho sobre ellos y otra lágrima recorrió mi mejilla.
—Por favor no llores—Me dijo ¿Preocupado?
—No lo puedo evitar—Dije.
Froté la foto en la cual me encontraba con mis padres, como si de alguna forma se hiciera real.
—¿Puedo ver? —Me pregunta Niall.
No le respondo y le enseño la foto.
—Linda foto—Me dice tratando de animarme.
—Quedó en el pasado—Dije.
Él volvió a su colchón sin decir nada.
— ¿No puedes dejar un reloj para que pueda saber la hora? —Le pregunto.
Niall saca de su bolsillo un reloj cuadrado y negro y lo deja a un lado de mi colchón.
—Gracias.
Él sonríe.
Se escucha que alguien toca la puerta. Niall se levanta rápidamente y va hacia ella para que segundos después Liam entre a la habitación.
—Hola Eva, ¿Cómo has pasado estos 2 días?
¿Un secuestrador preguntando que tal la estaba pasando? Esto si es raro.
—B-bien—Tartamudeo.
—Bueno, si te has creído que siempre sería así, estás muy equivocada.
Sabía que esa pregunta no sería nada buena.
— ¿Qué harán?
—Lo que se hace en los secuestros.
— ¿Por qué me secuestraron?
—Verás, estamos en la calle junto a nuestras familias y como tu familia es muy adinerada, te secuestramos y pediremos una suma muy interesante de dinero por tu rescate.
— ¿Por qué a mí?, no es mi culpa.
—Ya te lo dije, necesitamos el dinero.
—No soy la única de la ciudad con dinero.
—Pero si la más mimada.
Bufé.
—¿Qué harán con ella? —Pregunta Niall ¿Preocupado?
—Le dejaremos unos moretones, le sacaremos una foto y se la enviaremos a sus padres, para que nos den más rápido el dinero.
Yo comencé a llorar, no quiero que me hagan daño, ahora realmente tenía mucho miedo.
—No me hagan daño—Dije en un sollozo.
—Lo lamento, Eva—Dijo Niall.
— ¿Por qué?
—No puedo hacer nada—Dijo una vez que Liam se fue.
—Ayúdame.
-No puedo, me matarán, no te matarán a ti, sólo te darán algunos golpes.
—Como si fuera poco—Dijo bufando.
—Tendrás que aceptarlos si nos quieres morir.
Me dirige nuevamente al colchón y me recosté mirando el techo.
Odiaba esto, quiero estar junto a mis padres.
Me cubrí mi rostro, mejor dicho mis ojos. Y comencé a llorar desconsoladamente.
—Por favor, Eva, no llores—Me suplicó Niall.
No le respondí ya que no podía hablar, estaba sollozando.
Él hizo algo que no me lo esperaba, me abrazo, eso hizo que calmara un poco mis sollozos.
¿Acaso éste es un comportamiento normal de un secuestrador?
—Gracias.
—Tranquilízate, no dejaré que se pasen.
—Gracias—Le agradecí nuevamente.
—De nada.
— ¿Por qué eres bueno conmigo? —Le pregunté.
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Enamorada De Mi Secuestrador (One Direction) [En Edición]
FanfictionMe secuestraron, me dí cuenta que eran ellos a los que había visto, si tan sólo le hubiera dicho a mis padres lo que ví, no estaría aquí. Me llamo Eva Crowell y tengo 17 años. Yo tenía una vida normal, exacto TENÍA, hasta que 5 chicos llegaron para...