la ciencia de Mozart

parte 19

¿Que podíamos comprar para estar en un barco petrolero?

Seria interesante saberlo así que me fui con andrea un mercado que ella me llevo y luego a un centro comercial, cuando nos bajábamos en cualquier sitio la gente nos veía fijamente, un BMW no era algo que vieras cada día aquí en Venezuela. En el mercado compramos algunas provisiones, ella me había dicho que en el barco nos darían las tres comidas junto con los marineros, así que sólo compramos cosas como chucherías, queso chedar, jamón endiablado, café (amo el cafe) entre otras cosas, compramos hielo, jamón, queso, vodka, jugó de tomate para la vodka y unos panes de sándwich y algunos tomates y cosas así....

Ese día fuimos a la playa con veronica y una amiga de verónica que se llama barbara, ellas compraron una caja de cerveza, nosotros teníamos nuestra vodka pero como había cerveza decidimos guardar la vodka para los mareos del barco.

-hey, aprovechando este momento, que están las dos aqui- dije refiriéndome a verónica y andrea.-quiero decirte andrea, que tu amiga verónica, se me desnudo y se me insinuó en la habitación mientras tu estabas abajo....

Barbara se quedo anonada y algo cortada, andrea y verónica se vieron las caras con cierto aire complicidad, rieron y me vieron.

-¿tu crees que estas muy bueno verdad? Dijo verónica

-dime que es mentira. Dije yo retador...

-no es mentira, pero andrea me pidió que lo hiciera. Yo no me hubiese acostado contigo, solo te hubiese dado una cachetada por..

-por que tu amas a Jennifer.- interrumpió andrea a verónica como tratando de que no dijera algo inapropiado...

-Jaja, esta bien andrea, menos mal que soy un buen tipo....

-Jajaja lo siento, es que no podemos ir a un sitio por alguien que no te guste en verdad así que tenia que estar segura. Dijo andrea levantando si hombros.

Pasamos un buen día en la playa, ya al día siguiente nos iríamos, esa noche nos acostamos algo temprano...

Y por fin.... llego el día de irnos, pasaríamos por colombia porque andrea necesitaba hacer algo ahí y luego iríamos a Canadá, con un barco petrolero, estábamos ahí, llegamos al puerto. Olía mucho a gasolina y aceite, y a todo lo derivado del petróleo. Entramos al puerto diciendo que eramos amigos del primo de andrea, verónica nos dejó adentro y se fue, estábamos ahí algo nerviosos, veíamos a los trabajadores y carros pasar y nosotros no sabíamos que hacer porque el primo de andrea no había contestado el teléfono en la mañana, cuando derrepente llego un señor.

-¿Buenas ustedes son los primos de Diego?

-si. Respondimos ambos...

-siganme por favor...

Nos llevaron a una zona de estar mucho más linda que la entrada donde veíamos casi todo de los barcos, donde estábamos ahora era como un restaurante dentro del puerto.

-Esperen aqui a diego, si desean algo pueden pedir lo que quieran. Dijo el señor muy amablemente.

pedimos un par de batidos de fresa hasta que llegó el famoso Diego.