Un humano, un vampiro.
Uno cruel y perverso, amante del sufrimiento ajeno y causante de muerte. El otro frágil e inocente con la mala suerte de encontrarse en su camino.La oscuridad es la única que acompaña su sufrimiento, la única que escucha sus gritos y ve sus lágrimas bajar por sus mejillas cada noche desde que todo comenzó. Cada noche desde que ellos tomaron el control.
Todo ocurre en una noche a causa de una broma de mal gusto. Yuseph después de ser encerrado en el cuarto del conserje por sus compañeros, logra salir cuando ya ha llegado la noche, perdiéndose en esas calles en las cuales en ese momento desconoce.
Yuseph es débil e inocente, bastante para su mala suerte y su propio bien.
Su primer error fue estar en su camino y su segundo y más grande error fue enamorarse. Puede sentir su fría mirada incluso cuando no está cerca, le siente incluso cuando está solo, y le ve todas las noches en sus pesadillas.
Cuando el terror y la atracción chocan entre sí y ya no puede ser negado descubre su secreto, aquel que le condenará a su constante sufrimiento.
Tal vez haya una única pregunta que puedan hacerse: ¿Hasta dónde estás dispuesto a sufrir?
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La mascota del depredador
VampireNunca debió cruzarse en su camino, nunca debió enamorarse del predador.