Había pasado una semana desde el incidente con Maia y desde que lo ví a Christian. Ambos teníamos mucho trabajo y nos quedaba muy corto el tiempo de vernos.
Por suerte el puto de la editorial no iba a venir hasta por lo menos un mes. Así que decidí escribir los libros con tranquilidad mientras tomaba mi bebida favorita: Cappuchino.
Por otra parte Robert miraba por el ventanal risueño, y suspiraba de vez en cuando con un aire enamoradizo.
-¿A quien vez? -dije sonriendo
-Hacia los locales -dijo sin verme
-¿Estás viendo hacia la disquera? Porque si estas viendo a Christian dejame decirte que en este mundo no cabemos los dos...
-No, no veo hacia la disquera tranquila -rió -hay una chica nueva en la cafeteria -sonrió
-¿Así que el niño Robert está enamorado? -le decía niño porque nos llevamos tres años de edad.
-Tiene 19 años -me miró por fin -salí con ella la semana pasada y me ha revelado que está soltera
-Quiere follarte... definitivamente quiere follarte -él rió
-¿Lo dices por experiencia propia?
-Probablemente, pero luego no fue solamente eso... bueno tal vez un poco -reímos -¿Cómo se llama la doña?
-Jesica... no recuerdo su apellido pero su nombre sí
-¿Jesica? Muy bonito nombre galán... no la cagues ¿De acuerdo?
-No te prometo nada, tengo menos suerte que Christian para deshuesar un pollo
-¡Oye! ¡no lo burles, él lo intenta!
-De todas formas prefiero ver señales de que le gusto, si no la mandaré a volar -aplaudí
-Muy buena frase -él rió ante mi comentario.
*
Miré el reloj, eran las 6:00 pm, hora de irme a casa. Saludé a Robert y bajé por el ascensor, no voy a decir que estaba exhauta porque no hice mucho pero quería volver a casa para estar acostada tranquila.
Cuando las puertas del ascensor se abrieron sonreí al ver a Christian con una pequeña bolsa de cartón.
¿Flores? ¿Un regalo? ¿Un anillo de bodas? No.
Sabe que me enamora con comida...
-Hola ____ -sonrió y besó mi mejilla, ambos sabiamos que no nos podiamos saludar de otra forma en el edificio.
-¿Qué me trajiste hoy? -dije mirando la bolsa.
-Noticias... oh y un trozo de pastel de fresa
-Mmm... pastel de fresas -dije casi babeando, revoloteé mi cabeza -¿Qué noticias?
-La compania de Olga y Jack tienen que viajar de urgencia lejos de Almeria. Por lo tanto... -sonrió- me gustaria que me acompañes a mi casa a cenar
-Sí, sí me gustaria pero debo volver temprano a casa -Christian enarcó una ceja y sonrió
-¿No te quedarás?
-No me haz invitado -me encojí de hombros
-No necesitas invitación, al fin y al cabo pronto será tu casa -sonreí -Vamos, tenemos que pasar por un mercadillo para comprar lo que comeremos.
*
Ya en su casa, su perro comenzó a mover la cola con felicidad al volver a ver a Christian, le festejaba como si no lo hubiera visto hace años. Don gato se asoma, me mira y vuelve a acostarse, o sino me pide comida y no me ve por el resto del día. Aunque a veces le agarran ataques amorosos y no quiere que me vaya de su lado, es un bipolar...
Ibamos a hacer pizzas. Por lo que preparé los ingredientes necesarios. Christian quizo ayudar, y, aunque no supiera nada de cocina me ayudó bastante.
-Cuentame como te ha ido en el trabajo - dijo Christian mientras le daba un mordisco a su porción de pizza.
-Bien, muy tranquila. El jefe de la editorial no viene al edificio hasta dentro de un mes así que puedo trabajar en paz
-Lo golpearé si te molesta otra vez -dijo casi con la boca llena, reí por su frase tan "mafiosa" con una imagen de él tan hostíl. -¿Qué? -dijo con aire autoritario
-Que te vez gracioso amenazando al puto de la editorial mientras hablas con la boca llena -él rió
-Soy una monada... lo sé
-¿Y la humildad dónde? -enarqué una ceja
-Cálla -ordenó. Lo miré aturdida.
-¿Qué suc... -me interrumpió con un siseo fuerte
-¡Shht! -comenzó a asustarme
Las llaves se encajaron en la cerradura y el corazón se me paralizó por casi segundos. Mierda... Olga está aquí.
Corrimos hacia la habitación y dabamos saltos bastante graciosos de pánico.
-¿Qué hago? -casi grito... y lo peor aún... si Olga está aquí... JACK ESTÁ EN CASA
-¡Escóndete bajo la cama!
-¡Está lleno de mugre!
-Entonces... -miró el armario... y de un tirón, me metió en él y cerró las puertas.
La pelinegra abre la puerta exhauta, debe de haber tenido un viaje agotador. Apenas puedo escuchar lo que hablan.
-Hola Christian -dice casi en un suspiro -¿Cómo estas?
-Eem.. ¡Bien! -rascó su nuca nervioso -Pensé que llegarias mañana por la tarde
-Decidí volver temprano, bueno, yo y unos compañeros más -sonrió. Yo casi caigo de culo.
-Y... -tragó saliba - ¿Jack volvió a su casa?
-No -mi alma volvió a mi cuerpo -No, no espera creo que sí -abrí mi boca aterrada -Mmm, no creo que no... No, definitivamente no - "Decídete de una vez hostia!!!" Pensé.
Christian P.O.V
¿Cómo iba a saber que Olga iba a llegar un día antes? Me maldigo por dentro por meter a ____ en una situación muy incómoda. Ella estaba encerrada aún en mi armario, seguramente casi sin aliento, asustada... pobre mi muñeca.
Pero ahora el tema principal... sacar a Olga de la casa. Que la llame mi hermana y la invite unas copas no lo sé ¡Piensa rápido Christian!
-Jack me pidió que llame a ____ para avisarle que vendrá mañana... -sacó su móvil.
-De acuerdo... ¡No, espera!
Tono de móvil de ____ ( clic en sonido)
Me miró con sorpresa y parece ser... aturdida-Oh, eem... mi... radio ¡Baila nena con... MARAMA!
Olga fue hasta la habitación, parecía furiosa. Mierda si encontraba a ____ iba a atacarla y no iba a dejar que eso pasara...
Y apenas se entere de mi noviazgo con ____... le dirá a Jack... y si eso pasa...
No la volveré a ver
***
ESTÁS LEYENDO
Porta y tú [Dulce y Ardiente Venganza] Parte I y II
Romansa»¿Por qué a mi?¿Cuándo fallé? ¿Cuándo dejé de cumplir?« »_____(tn) ______(ta) »-Yo no me crucé en tu vida sólo para cumplir tus fantasías, me crucé en tu vida para quedarme, y no espero otra cosa« »Christian Jimenez« Ella, una conocida escritora de...