Capítulo 23: Recuerdos

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— Nunca pensé que vendrías por aquí, bebé  — Ella me había jalado desde la entrada hasta esta habitación. Era una recámara des aspecto desgastado, sus cortinas rotas y rasgadas, sin ventanas y con muros recubiertos de almohadones y la bombilla en el techo estaba protegida con una caja blindada, por lo que la luz era débil.

— Es mi... — Miré hacia el techo, por alguna razón habían unas enormes marcas de garras cerca de la linterna. Reí por lo bajo al verla y recordarlo — . Mi habitación, la extrañaba. — Gigi siguió mi mirada con un extraño gesto y al sintonizar mi objetivo rió a lo grande.

— ¡No puede ser! — Reía sin parar Gigi, sus ojos dejaban en claro que era una risa auntética dado que estaba al borde de las lágrimas  — ¡¿En serio estás recordándolo?! — Ella nunca mostraba su interior a otras personas, a nadie más que a mí. Una vez ella se encontraba de esta manera, riendo a carcajadas y entró papá con rapidez; pero no la suficiente ya no vio a Gigi reír. Papá me contó que yo tenía suerte porque ella no mostraba su verdadero yo a nadie, que lo hacía conmigo porque me quería enseñar a ser como ella.

—Sí. Fue un poco abrumador aquella vez.... —Era cierto que estaba recordando, y dado que ella siempre sabía lo que yo pensaba yo supuse que ella intuyó en mis recuerdos; pero no....

—Sí, tu primera vez fue un tanto abrumadora pero tengo que admitir que estoy orgullosa de ello. —...

...

......

—¡¿Qué?! Pero yo soy... — Muy bien, estoy MÁS QUE SEGURA que yo soy completamente... No pude haber... ¡NO, NO, NO, NO! Puede que haya olvidado un montón de cosas pero de lo que estoy segura es de que yo no he tenido con nadie ningún tipo de degradante relación. Sólo Seth se ha fijado en mí pero él y yo no... Porque Jacob... ¡¿JACOB?! ¡¿QUÉ TIENE QUE VER ÉL AQUÍ?! No puedo estar pensando en ellos... Pero ¿para qué en Jacob?

Ella rió aún más con mis expresiones, creo que le estoy dando un buen momento. Miré con vergüenza hacia el lado, ella no podía dejar de bromear innecesariamente conmigo ni un día. —No, mi amor —. Corrigió con una luminosidad en sus aperlados ojos y trató de hablarme con determinación. —No hablo de esa primera vez... Pero, hablando de ese tema, me gustaría una actualización de datos, tú sabes. —

—Mamá... —Yo, generalmente, no la llamo así. Le digo Gigi; pero la llamó por su nombre de pila dado por su clan (Mamá), cada vez que estoy avergonzada, triste o muy emocionada. Bueno, aunque ninguna pasa muy a menudo que digamos.

—Bien, bien. Entiendo —Con eso al fin dio fin a su risa y me señaló la marca de garras en el techo. Allí se miraba interesante, pero la verdad yo me preguntaba si ese aún seguía allí—Ese lugar... Ese hermoso lugar y esa hermosa marca son tuyas. Ahí, ese punto es un recuerdo de tu primera transformación en mujer lobo. —En esos instantes tomó mi mano entre las suyas con ternura, como cuando era una niña y tenía miedo, y la llevó a mi pecho — Tu cuarto tuvo que ser sellado y tu padre se enojó por que fuimos muy descuidados al dejarte salir ese día y blah blah blah... pero ¿recuerdas lo que te dije de tu ira ese día? —

—¿Que, aunque sea una mestiza de una pareja cuyos integrantes son una mujer lobo y metamorfo, soy tan especial que ni la manera normal de ser especial me queda? —Pregunté juguetona, yo sabía que eso no era lo que Gigi recordaba.

—No, tonta. Hablo de... —Sus ojos envolvieron un extraño aire de emoción — ... Cuando casi destrozas la lámpara y estabas arrepentida. ¿Sabes algo, bebé? No he podido asimilar todavía que aún en forma lobo tuvieras tanta consciencia, es decir, nadie ha podido ser así... Nadie; excepto los metamorfos. —¿Qué quería decir? Esas palabras... No eran bonitas.

_Al otro día, en Forks. Exactamente 10: 35 a.m._
JACOB Pov.
No es que odiara a Sam, es sólo que si pudiera elegir entre salvar a Sam y salvar a un pedazo se pan.... Tendría para un rico sandwich en la noche. Mira que mandarme a traer su "Cargamento importante".

Pero, cambiando de tema, ¿qué quería decir Blackheart con eso? Todavía recuerdo sus palabras.

*Flashback***
—Bien, Jacob —Él me miró directamente a los ojos, se notaba cuanto temor albergaban sus ojos. Tenía miedo, sí, pero... ¿de qué? —Por favor, trae a mi linda Jeanine. Ella es nuestro tesoro y probablemente... también tuyo —¿Mío? ¡Imposible! Me agrada; pero no de esa forma.
Además, yo aún... con Bella... Aún me duele.

—No se preocupe. Sam me ordenó hacerlo, así que tengo que ir. —Estaba a punto de convertirme, aquí no rompería nada. Estabamos afuera, en el umbral de su casa. — Ella volverá a su casa pronto —

—Jacob, aquí no. —Sam me miraba con desaprobación mientras Blackheart me decía esas palabras. Ellos dos me miraban como si debieran pedirme algo.

*Fin del Flashback***

—Ay, Jeanine. En qué clase de problemas te has metido para que me manden por ti —Realmente no me lo preguntaba ni nada, sólamente quería afirmármelo. Además, no podía ser grave. Ella luce siempre como una indepemdiente y auto-sufuciente chica; ella siendo descuidada ¿Es estúpido, no?

Mision: ImprimaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora