Capítulo 9

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Era difícil esperar por algo que tú sabías que nunca pasaría, pero era aún más difícil renunciar cuando sabías que era todo lo que querías.

Estaba resignada a dejarlo ir, pero cada vez que él volvía todo se complicaba, hacía todo lo que quería de él y mi corazón se aceleraba y a la vez fingía no sentir dolor cuando en realidad quería explotar.

Mi padre se la pasaba diciendo que yo tenía que lograr superarme, adquirir más conocimientos, hacer algo importante y así significar algo para los demás. Pero yo no quería significar algo para los demás, yo quería significarle todo únicamente a Tom.

Tenía una guerra constante en mi mente: ¿sólo significo como una amiga para él? Aquella noche, ¿no sintió los latidos desenfrenados de nuestros corazones al estar tan juntos?

Todo el tiempo estaba pensando en él, cada día era más difícil y al dormir, el momento en que debería estar ausente, era cuando más lo sentía real a pesar de que sólo fueran sueños.

Antes, cuando esto sólo era una pura amistad y hablábamos sin medir el tiempo, era la persona más feliz. Ahora, cada vez que me hablaba, acababa muriéndome un poco más.

Soñaba con la idea de que un día vendría y me confesaría su amor, pero la realidad era otra. Esto no era como las películas, el no vendría a mi departamento en la noche y suplicaría por una oportunidad a mi lado, en la vida real esas cosas no pasaban.

La mañana del miércoles era fría, el cielo estaba gris y las nubes se empezaban a juntar amenazando una fuerte lluvia. En las noticias anunciaron que sería la tormenta más fuerte que ha habido en Nueva York, se recomendó que nadie saliera de sus casas y siguieran indicaciones de los oficiales en caso de inundación.

Con un suéter que me tapaba hasta las rodillas, me recosté en el sofá cerca de la ventana, viendo cómo el agua de pequeñas gotas se iba formando una fuerte oleada de lluvia y viento combinada entre sí. El teléfono sonaba desde temprano, pero no tenía ánimos de contestar y para nada.

La tormenta no cesaba, casi igual como aquella noche. Suspiré en el recuerdo y cerré los ojos para consumirme en un profundo sueño. No sé cuánto tiempo habrá pasado, pero todo estaba oscuro, me asomé por la ventana y aun no dejaba de llover y las calles empezaban a llenarse de agua.

Entré a la cocina encendiéndo la luz y busqué algo en el refrigerador para comer. Una rebanada de pastel seguía ahí, la agarré junto con la lata de Coca-Cola. Me sumí en el sofá con las piernas extendidas y prendí el televisor. Para mi dulce tortura, estaban pasando The Best Of Me. Varios pañuelos después, me digné a revisar mi celular. Llamadas perdidas y mensajes de Jenna.

Jen: ¡Katherine! ¡Prende tu ordenador o lo que sea, pero tienes que ver las noticias!

¿POR QUÉ NO CONTESTAS?

¡PRENDE EL MALDITO TELEVISOR! ESTÁN PASANDO UNA NOTICIA SOBRE TI Y TOM.

Me apresuré a cambiar de canal, y efectivamente estaban hablando de nosotros, y en una esquina había una foto de los dos. Esa foto... Era cuando fuimos al Frick Collection. Ese día yo estaba agotadísima por el recorrido y Tom sin previo aviso me cargó sobre su espalda, pero yo no recordaba haberla tomado así que...

Jenna.

Le subí todo el volumen y me puse a escuchar lo que decían ahora:

Recientemente el actor Tom Hiddleston, mejor conocido como "Loki" uno de los villanos más famosos de Marvel, colgó en su cuenta de Twitter una foto de él en compañía de una hermosa joven. Pero sólo sabemos que su nombre es Katherine Rose.

Mi caballero inglés (PAUSADA) (Tom Hiddleston Fanfiction) (Editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora