(EN EDICIÓN) Hell is so close to heaven (Andy Biersack y tu) [HOT]

Capitulo 5

Al subir las escaleras, nos encontramos con una chica mas o menos de mi edad en el pasillo, tenia el cabello rubio y largo hasta la cintura, un mechón del cabello teñido de rosa, ojos verdes y ropa de colores chillones, lamentablemente me cayó mal al segundo de verla ya que nos miro con mala cara. Se escuchó la voz de Belinda desde atrás.

—Ah, ella es mi hija Melanie, Melanie ellas van a trabajar aquí por un tiempo.

—Hola...—Dijo mostrando una sonrisa completamente falsa. Genial esta es igual de simpática que la madre.

—Les muestro su cuarto.— Dijo Andy ignorando a su hermana.

Andy nos mostro un cuarto bastante acogedor, solo tenía dos camas. De pronto apareció Belinda en la puerta. 

Señora ¿podría dejar de aparecerse como fantasma?

—No creo que se sientan muy cómodas las tres aquí juntas hijo, tal vez debas llevar a la (tn)___al cuarto del fondo.

—¿Ese cuarto quieres darle?— Dijo en tono molesto.

—Andy...— Le llamó la atención su padre.

—Esta bien...— Le respondió de mala gana, obviamente Andy no se llevaba bien con su madre, y que ella tenia un problema conmigo ya que la habitación donde yo iba a dormir estaba demasiado lejos de las demás habitaciones.

—Lamento que tengas que quedarte tan lejos pero ya no puedo seguir discutiendo con Belinda, veré si puedo hacer que te pasen a una habitación mas...

—No. no te preocupes, es perfecta, me gusta estar sola y la privacidad.

Cuando Andy abrió la puerta me hizo entrar primero y luego el, cerro la puerta, estaba bastante oscuro, lo suficiente como para que yo no notara la alfombra en el piso mal puesta y me tropezara con ella, Andy vio toda la secuencia y trato de tomarme del brazo para que no me cayera, pero el tampoco se dio cuenta de la bendita alfombra y fuimos a parar los dos al suelo, quedando el encima de mí con nuestros rostros sumamente juntos que solo los separaba una fina capa de aire. 

 En cuanto Andy cayo sobre mi quedo demasiado cerca, sus labios casi tocaban los míos y lo sentí tragar en grueso, a esta distancia podía ver mucho mejor sus bonitos ojos.

—Pe...perdón.—Dijo casi susurrando

—No te preocupes, fue mi culpa.

La voz de Joey llamándonos desde abajo de las escaleras nos hizo separarnos de golpe y ponernos de pie y bajamos rápidamente.

Luego del tour por la casa/mansión nos llamaron para cenar, a pesar de que nos hacían cenar a mi y a mi familia en una mesa aparte sentía algo incomoda, sentía que me miraban todo el tiempo, la verdad Andy no me incomodaba, la que si me molestaba era Melanie que parecía que me quería matar o algo y Belinda también me miraba de reojo.

 Es un momento me canse y me le quede mirando a Melanie hasta que ella corriera su mirada y me dejara en paz y luego vi como Andy se aguantaba la risa porque también se había dado cuenta de la situación con Melanie. Luego de cenar fui a la habitación de mi mama y la de mi hermana para ayudarlas a preparar su habitación.

—Parece que Belinda no te quiere.— Acotó de la nada Miranda.

—Cállate, a ti tampoco.

—Si pero no es tan obvia como lo es contigo.

—"Si pero no es tan obvia como lo es contigo" le replique con voz chillona a lo que mi hermana me copió y terminamos molestándonos como niñas hasta que se cansó mi madre.

—Ya cállense las dos, nadie nos quiere, basta.—Interrumpió dándonos unas almohadas

—Perdón.— Dijimos juntas,

—____, se que esto parece algo difícil pero hay que hacerlo por la familia que dejamos en el pueblo, ¿si?

—Si además Gabriela no sabe que nos fuimos así que no hay mucho de que preocuparse.— Agregó mi hermana

—Ya se pero igual es peligroso y si ella descubre donde están hospedados de alguna forma siempre se entera de todo y si...

—Tus tíos nos van a mantener informadas por todo, ahora ve a descansar. 

Salude a mi mama y a mi hermana y me fui a mi habitación. Eran casi las 12 am así que debía dormir si no quería parecer un zombi al día siguiente, pero lamentablemente no pude pegar un ojo. Decidí salir un rato al jardín a tomar algo de aire y ver si eso me relajaría lo suficiente como para dormir.

 Salí silenciosamente por la puerta trasera, la cerré despacio como si fuera una ladrona y al voltear vi a Andy sentado en una hamaca mirando la luna. Quise entrar de nuevo a la casa pero el me escuchó.

—¿Insomnio?— Su voz era suave y tranquila.

—Algo así, no se porque no puedo dormir.

Su mirada seguía fija en la luna.— Sientate si quieres.— Señalo el lugar libre a su lado en la hamaca,

Me senté y miramos la luna juntos.

—Lamento mucho la actitud de Belinda y mi hermana.—Rompió el silencio.

—Tranquilo, tienen motivos para reaccionar así, debe ser difícil que tres personas extrañas entren a tu casa.

—De todas formas no deberían actuar así.— Frío de nuevo ¿eh?

—Oye, me acostumbré a ser tratada así e incluso peor, esto no es nada para mí.

Me miró y tuve que verlo yo también tenia sus ojos clavados en los míos.

—¿Puedo preguntarte algo?

—Claro.—Dije bajando la mirada por un segundo.

—¿Alguna vez sentiste que no perteneces a algún lugar?

—¿Porqué lo preguntas?

—Porque creo que no hay día en el que no me pregunte eso.

—Pues...— Bajé la mirada al suelo.—No, no lo creo... ¿te sientes asi?

—Si.

—¿Porqué?

—Viste como son Belinda y Miranda, solo confío en mi padre. No es sorpresa que no las soporte y solo llevas aquí unas horas.

—Todos los hijos tienen problemas con sus padres.

—Pero no todos sientes que su madre no es su madre.

—Andy...

—Lamento hacerte hablar del tema, deberíamos ir a dormir.

Me di cuenta que el ya no estaba cómodo hablando de eso y cuando vi el vaso vacío y sentí su aliento a alcohol me di cuenta que ya no quería seguir hablando, que su estado de ebriedad y sinceridad ya habían pasado.

—Esta bien...—Le dije en voz baja.

Subimos las escaleras y fui directo a mi habitación, no había notado que Andy estaba detrás de mí hasta que voltee para cerrar la puerta y lo vi muy cerca de mi rostro.