Capitulo 1

1.4K 44 5
                                    

Me llamo ____ Stone, tengo 17 años y vivo en un barrio pobre que mas bien parece un basurero, vivo junto con mi familia, mi mama Mónica, mis dos hermanas Miranda de 16 años, Joaquín de 4 años y Jennifer de 18 años y mis dos tíos Romina y Exequiel; mi padre nos abandono cuando a penas nació Joaquín y nunca supe nada mas de el, ni me interesa.

 Miranda, mi mamá y yo, nos encargamos de conseguir comida para la familia ya que mis tía cuida a Joaquín y a Jennifer, ya han pasado dos meses desde que ella enfermo y a penas puede moverse de la cama pero entre todos nos ayudamos. Mi tío es el único que sale a trabajar, es un trabajo mal pagado pero nos es de ayuda bastante, es difícil conseguir empleo estos tiempos.

Miranda:

Esperaba que ____ saliera de la panadería con algo para todos pero sólo consiguió que la tiraran desde la puerta gritándole y luego el panadero le lanzaron un palo de amasar, que bueno que no era mi turno para ir.

— Vienes casi todos los días a pedirme.— Dijo mientras la arrojaba por la puerta. —¡Ponte a trabajar maldita mantenida!— Finalizó mientras le arrojaba el palo de amasar.

—¡Púdrete!

____ siempre fue agresiva y respondona con todo el mundo, no importaba que tan grande fuera, ella no era cobarde.

Narra ____:

Apenas le conteste a ese tipo quiso arrojarme un zapato y ya tenia suficiente con el palo en la cabeza, así que salí corriendo seguida de mi hermana, varias cuadras después empezamos a caminar buscando otro lugar para conseguir comida, o si era posible un trabajo, mientras hablábamos.

—¿Puedo saber que hacías detrás de un árbol? Ese tipo tiene mucha fuerza, al menos me pudiste haber esperado en la puerta para sostenerme cuando me arrojara como perro.

—¿Y yo que iba a saber?

— Le vamos a mendigar casi siempre idiota era obvio que algún día nos iba a echar.

—Bueno pero ¿Te mosriste? No, solo te tiro por la puerta no hay nada mas que hacer.

Le blanquee los ojos y seguimos caminando en silencio, luego de caminar un rato conseguimos algo de comida que nos habían dado en una casa donde vivía un amigo de mi edad se llamaba Max. El siempre jugaba conmigo cuando éramos niños y cuando el podía darme algo me lo daba sin problemas, lamentablemente su madre se oponia a que me dieran trabajo en su casa, pensaba que yo iba a hacer algo para meterme con su hijo pero yo siempre lo vi como a un amigo.

—Muchas gracias amigo, te debo otra.

— Sabes que siempre estoy para lo que necesites ____, no me debes nada.

Yo paso todos los días buscando trabajo pero nunca me quieren contratar ni siquiera para limpiar el piso de alguien por que siempre se fijan en mi pequeña cicatriz, no se como paso, mi mamá dice que mi papá me la hizo cuando nací, si esa es la historia, la verdad me alegra que ese tipo se haya ido hace 4 años. Todavía recuerdo las peleas, golpes y maltratos que recibíamos de su parte, agradezco que se haya metido con otra mujer para salir de nuestras vidas.

Cuando llegamos a casa salude a todos y fui al cuarto donde estaba Jennifer para darle algo de comida, ella era mi hermana y mi mejor amiga, todo lo que ella sabe me lo enseño a mi siempre fue muy buena con todos y todos en el barrio la querían, pero durante su enfermedad debía ser yo y Miranda quienes cuidemos de todos.

—Gracias ____.¿Tu ya comiste?

—Si no te preocupes ¿Cómo te sientes?

— Mejor gracias.—Sabia que no era verdad estaba igual que los otros días.

— Esta bien, descansa hermana, mañana tratare de buscarte alguna medicina.

Al día siguiente salí temprano por la mañana y ver si todo estaba bien en el barrio, pero pude ver como un montón de chicos salían corriendo desde un callejón que era conocido por ser el mas peligroso y oscuro, no importa que hora era, siempre había oscuridad y peligro ahí, ellos no eran de este barrio, parecían del barrio de Gabriela.

Gabriela es una chica de un barrio que no estaba muy lejos del mío, pero antes no existía ni esa pandilla ni otro barrio, ¿porque? Gabriela es mi otra hermana, mi melliza, se alejo de nosotros, reunió a un montón de personas del barrio con ella y se fue, nunca entendí porque nos odiaba tanto a mi y a nuestra familia pero nunca me lo dijo y en casa nadie sabe tampoco, solo se fue y a intentado hacernos la vida imposible, pero ella y sus amigos tienen prohibida la entrada aquí y nosotros a su barrio, aunque no lo parezca existen códigos aunque haya gente que no los respete.

Cuando fui a ver que era lo que ocurría, vi a un chico con una cabello parecido al de Joaquín, ya que por estos lados era común ese corte, rapado a los lados pero el cabello del medio era largo, pensé que era un chico del barrio, estaba tirado en el suelo boca abajo, lo habían golpeado y robado, fui a ver como estaba pero estaba desmayado, me acerque a el y lo tome desde el hombro para voltearlo, su cara estaba toda golpeada y ensangrentada, su ropa rasgada, y varias heridas que después se volverían moretones por casi toda su cara, se ve que se había resistido y dio pelea pero no fue suficiente.

 Lo primero que pensé fue que el pobre estaba muerto pero vi como su pecho se movía con su respiración, era un movimiento débil pero sabia que no estaba muerto al menos. Estaba decidida en ayudarlo, si lo dejaba así y solo, ahí si podía morir, decidí llevarlo a casa; no podía dejarlo sabiendo de su existencia aquí y menos en un callejón tan peligroso.

(EN EDICIÓN) Hell is so close to heaven (Andy Biersack y tu) [HOT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora