-¿Te pasa algo?- Comentó Caitlyn mientras volvíamos en coche a su apartamento -Te noto muy callada y es extraño- Negué con la cabeza y pasamos todo el camino en silencio, con la radio de fondo.
Cuando llegamos al apartamento me desvestí y me puse a ver la tele con una bolsa de patatas que Cupcake me había comprado, mientras ella se arreglaba en su cuarto. Ya me había explicado que esa noche iba a salir y me quedaría sola en casa, no hice preguntas pues ya había escuchado toda la historia. Cuando salió del cuarto quedé totalmente impresionada, la morena iba con un vestido negro ajustado, algo más corto que el que suele llevar de normal, también sin tirantes y con detalles dorados, en el cuello portaba un bonito collar también dorado a juego y calzaba unos zapatos negros de tacón. -Wow- Fue lo único que se me ocurrió decir al verla, ella me miró de reojo y sonrió mientras se dirigía a coger su bolso del perchero. -Espera Cupcake- dije levantándome del sofá. -No puedes ir así, quiero decir, claro que puedes, pero no puedes ir así a una cita con "martillitos"- dije refiriéndome a Jayce.
-¿Cómo sabes que he quedado con él? y muestra algo de respeto, es un héroe de esta ciudad- comencé a reír ante ese comentario.
-Porque es la única persona que ha hablado contigo hoy a parte de mi, y conmigo no has quedado así que... - Dije levantando los hombros. -Y por favor, no me hagas reír, si ese es un héroe yo... bah da igual. Lárgate si quieres, pero como te ponga las manos encima lo mataré- Me di media vuelta y volví a tirarme en el sofá algo malhumorada.
-Al final resulta que te pareces a tu hermana más de lo que pensaba- susurró Cait, aunque logré escucharla. «Mi hermana» eso me había dado una idea. Cuando Caitlyn se fue rebusqué entre los papeles de la morena y tras un rato encontré lo que quería, fui al teléfono y marqué el número que estaba escrito en el papel.
-¿Si, Cait?- Se escuchó al otro lado del teléfono.
-Soy tu querida hermanita, ma-na-zas- Contesté, antes de que le diese tiempo a responder continué hablando -Necesito tu- tosí -ayuda, se trata de Cupcake.
-¿Qué? ¿Está bien? Como le hayas hecho algo te aplastaré con mis propias manos- Estaba tan agresiva como siempre, aunque posiblemente eso me vendría bien.
-No, no es nada de eso, acaba de irse a una cita, con el gilipollas de Jayce. Se que no te importo, pero ella si, y sé que si hay alguien a quien odies más que yo es a ese estúpido pijo refinado que se cree alguien importante- No pude evitar sonreír pues tenía un plan para arruinar esa cita y vengarme por todo lo que había dicho de mí ese creído aquella mañana.
-No puede ser ¿por eso ha rechazado mi oferta de ir al cine? -Vi gruñó, pude notar la rabia que tenía dentro la pelirrosa, y eso me gustaba, la verdad es que era algo divertido. -¿Y qué piensas hacer? Porque estoy segura de que no me has llamado solo para contármelo- Me había calado.
-Pues verás...- Continué contándole mi plan, sorprendentemente no puso muchas pegas. -Entonces espero aquí- Después de eso colgué.
Rebusqué por el armario de Caitlyn hasta encontrar una camiseta y unos pantalones negros, «esto servirá» pensé. Me vestí y esperé, habían pasado unos quince minutos desde que había hablado con Vi y de repente escuché un ruido extraño que venía detrás de la puerta, luego se abrió.
-¡Al fin! Has tardado una eternidad Manazas- Comencé a caminar en dirección a la puerta pero al salir Vi me agarró de las trenzas -Aaauu.
-No vayas tan rápido saco de huesos, primero hay que poner unas normas. La primera y más importante, yo estoy al mando- gruñí- y la segunda, como intentes escaparte te partiré todos y cada uno de tus pequeños huesecillos. Aclarado esto, vayámonos.- Acepté las normas pues me importaba más fastidiar a Jayce que hacer o no caso a la estúpida de Vi, ya me encargaría de ella en otro momento.
Montamos en su moto, por suerte tenía sidecar y no tuve que agarrarme a ella, me puse el casco que me tiró y una vez en marcha le indiqué dónde habían quedado.
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Hola!! Siento mucho haber tardado tanto en actualizar, desde que empezaron las clases he tenido poco tiempo de relax y mucho menos para ponerme a escribir, aun así quiero que sepáis que no tengo esto olvidado y que intentaré actualizar más a menudo ya que bastantes me lo habéis pedido. También quería daros las gracias por los comentarios de apoyo, espero que este capítulo no os decepcione (a mi me ha resultado bastante divertido escribirlo).
Recordad, todas las críticas, tanto positivas como negativas (con fundamento) son bienvenidas y agradecidas ^^
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¿Oficial o delincuente?
Hayran KurguHasta a la delincuente más buscada de todo Piltover tiene una debilidad, algo por lo que dejarse atrapar. Pero eso no es todo, al igual que ella, la sheriff más respetable de la ciudad es capaz de caer en las garras del corazón más frío y vandálico...