Skyfield - Irradiant

A ti.

Sus labios impactaron con los míos en un cálido beso, mi estomago sentía esa sensación de felicidad y mi corazón latía a gran velocidad. Nos separamos y mantuvimos las miradas fijas en el otro, lo jalé del cabello y lo atraje hacia mi, chocamos contra la mesa que estaba detrás nuestro, nuestros besos eran desesperados, como si ambos hubiéramos estado esperando esto.

— (TN)... -soltó en susurro sin despegar su boca de la mía.

— Cállate -uní nuestros labios nuevamente.

Choqué contra la pared y me levantó, enrolle mis piernas en su cadera y mis manos jalaban su cabello. Dios, esto se siente tan bien. Me llevó hasta lo que creo era el sillón, sentí su cuerpo caer encima del mío despacio, sus besos comenzaron a bajar a mi cuello. Empecé a deshacerme de su chaqueta haciéndola hacia atrás de sus hombros y después quitándola por completo, levanté su camisa y en un rápido movimiento ya no la tenía. Su piel.. era tan cálida. Sentí sus manos subir por mi abdomen jalando mi blusa hacia arriba, arqueé la espalda para que pudiera levantarla y después la sacó.

— ¿Qué pasa? -dijo agitado después de que me separé de él.

— Es que.. -qué vergüenza — Nadie me ha visto, así..

Sus ojos descendieron lentamente hasta mi torso desnudo, bueno aún tenía el brassiere pero me sentía totalmente descubierta, una leve sonrisa se dibujó en su rostro y después me miró directo a los ojos.

— Dichosos los ojos que te ven -sonrió y sentí arder como tómate.

Se acercó nuevamente y me besó, volví a recargarme en el sillón y está vez me besó más lento, sus besos seguían bajando, besó despacio por encima de uno de mis pechos y me estremecí se siente tan bien. Siguió su camino de besos hasta mi estómago y después subió hasta mis labios, nuestros besos no paraban, con las manos temblorosas toqué el botón de su pantalón y lo desabroché, bajé el cierre aún con las manos temblorosas y sentí su mano encima de las mías apartándolas.

— Espera.. -deshizo el beso y fruncí el ceño — Hoy no.

— ¿Qué? -mi confusión era aún mayor.

— No quiero que nuestra primera vez sea así (TN), mereces algo mejor.

— Pero.. creí que.. -me moría de la vergüenza.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y me tapé con mi blusa.

— Hey hey -me tomó del mentón — No llores, no tienes porque llorar, yo.. yo no te estoy despreciando, es solo que no quiero hacer esto así —se acercó despacio—. No en el sillón de mi casa donde todos ponen su trasero —solté una risita—. Quiero que sea en un lugar especial para nosotros.

Asentí despacio, sus ojos volvieron a viajar hasta mi torso y tomó la blusa que intentaba esconderlo. Le dio la vuelta y levanté los brazos, su mirada observó bien mi cuerpo y después me la puso. Mis ojos viajaron hasta su entrepierna ¡pero que clase de pecado estoy haciendo! era notable lo que se encontraba ahí, además aún tenía desabrochado el pantalón y se veía la parte superior de sus bóxers. Que grandioso abdomen tienes.. ¡atrás Satanás, aléjate de esta mente! Sus ojos vieron lo que los míos veían y aparté la vista avergonzada, se levantó y se dio la vuelta, hizo un movimiento como cuando las mujeres hacen para subir sus jeans, después giró hacia mí y abrochó el botón seguido de subir el cierre.

— Lamento.. eso.. —¡estaba rojo como tomatito! se me escapó una risita—. ¿Eh? ¿Qué es tan gracioso?

— Nada  —dije tímida.

— Vamos, eso nos pasa a todos los hombres  —miró nervioso a los lados.

— Si.. eso creo.

— (TN).. —lo miré velozmente—. No te alejes de mi.

No recordaba que estábamos separados, ni siquiera recordaba la razón por la que nos alejamos. Pero nuevamente todo estaba ahí, todo.

— Yo no.. 

— Lo que te dije fue cierto —se sentó despacio a mi lado—. Lo que dije ese día fue para protegerte, te lo juro.

Sentí un leve suspiro salir de mi ¿en qué momento deje de respirar? yo lo amaba, más que a cualquier cosa. Me había hecho daño pero también me había hecho feliz, me hace feliz. Mi mente me dice una cosa pero mi corazón otra. Sé que lo quiero, sé que nunca voy a poder arrancármelo del alma.

— Por favor, créeme.

No me importa si es otro error, si después de esto me arrepiento, pase lo que pase esta es la decisión que quiero tomar, es lo que todo mi ser me pide. Me acerqué rápido a sus labios y los uní fuertemente, lo apreté hacia mi y sus brazos me tomaron fuertemente. Te amo Alexander Renfield, te amo. Nos separamos y nuestras frentes quedaron unidas, su mano tomó un mechón de mi cabello y lo depositó detrás de mi oreja.

— Te amo Lestrange.. —sonreí.

— Yo también te amo —hizo lo mismo—. ¿Qué vamos a hacer con todos? 

—Por el momento deben creer que no estamos juntos, es muy rápido desde la junta de la legión, sabrían que mentimos. 

—¿Estaremos en secreto? —pregunté un poco desilusionada.

—Tu no te mereces eso, por eso voy a hacer las cosas más rápido para poder estarlo.

—No quiero estar sin ti este tiempo.

—No lo estarás —tomó mis mejillas—. Te prometo que vamos a estar juntos la mayor parte del tiempo posible.

— Pero.. Reiss seguirá siendo tu pantalla —agaché la cabeza.

— No.

Lo miré.

— Eres la única persona a la que quiero, hablaré con ella y se terminará todo, solo quiero estar contigo (TN) —sonreí.

—Y yo contigo —nos volvimos a besar y después lo abracé fuertemente.

Su nariz chocó contra mi cabello y en un susurro dijo "te quiero".
Mi corazón saldría de mi pecho en cualquier momento, él me hacía sentir todas estas cosas, me hacía volverme loca en un momento, me hacía querer llorar, reír.. él hacía que yo me sintiera de esta manera, de una que no conocía y que no quería dejar de sentirla jamás. Las consecuencias ya ni siquiera me importaban si así iba a sentirme toda la vida a su lado.

— Yo también te quiero —susurré y una sonrisa apareció en mi rostro.

—Será mejor que encontremos a Skandar y Vallerid —se separó de mi.

— De acuerdo.

Se puso de pie y extendió su mano para ayudarme, apareció un portal y me indicó en donde nos veríamos, yo debía aparecer el mío si no quería volver a sufrir un daño como el de hace un rato. Esta vez funcionó, al parecer ya tenía más fuerza. Aparecí en el bosque, en el mismo puente en el que habíamos hablado bien por primera vez que hablamos de nuestros sentimientos. ¿Qué hacemos aquí? ¿Por qué aquí? esto es territorio de lobos. Evidentemente Skandar puede estar aquí pero.. ¿y Vallerid?