Capítulo 18. ¡Que chica!

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Maratón 1/4.


P.O.V. Blaise Zabini.

Mire por la ventana del vagón cómo pasa el paisaje, mientras comía una rana de chocolate, era relajante no tener que hacer nada. En ese momento llego Theo haciendo mucho ruido, me miro y luego a Draco, el cual ni siquiera se molestó en regresarle la mirada, estaba atento a su libro, se dejó caer a mi lado para luego mirarme con una mezcla de frustración y molestia, al ver que no entendía sus gestos tomó una de mis ranas de chocolate y se la comió con molestia.

–Si amigo yo también te extrañe, adelante come una rana de chocolate, tengo un montón –dije sarcástico.

–Lo siento Blaise, es solo que... estoy estresado –sus últimas palabras salieron en un siseo, mientras miraba a Draco fijamente.

–No, Theo, entiéndelo –Draco levantó la mirada, giró la página a su libro y se puso a leer.

–Ok ¿De qué me perdí? -pregunte confundido, era imposible estar molesto con alguien que no habías visto en mucho tiempo.

–Aquí nuestro amigo se hizo una diva, y no quiere hacer lo que le dicen -siseó Theo.

–Theo no voy a acercarme a ella, es peligroso -susurró con cansancio Draco sin despegar su mirada del libro.

–Claro y no es nada peligroso que la espíe uno de tus elfos domésticos -rebatió Theo.

–Wow ¿Enserio hiciste eso Draco? -pregunte divertido.

–Puede ser –respondió evasivo.

–Amigo si la amas, ve por ella -dije más que emocionado.

–Ustedes no ven todo lo que pasa ¿Verdad? –replico Draco.

–Explícanos -pedí al ver la cara de pocos amigos de Theo, no era un secreto que odiaba no saber algo.

–Mi padre rondará por Hogwarts todo el año, Hermione lo enfrentó antes de venir, lo que quiere decir que si nota algo raro estamos acabados, porque les recuerdo quienes se volverán mi sombra.

–No puede hacer eso –dijo Theo molesto y porque negarlo, algo asustado.

–Puede y lo hará -respondió Draco soltando un suspiro.

–Vaya y yo creía que mi vida era difícil –dije con una sonrisa, para aligerar el ambiente.

–Blaise tu vida es pan comido –replico Draco, pero pude notar la pequeña curva de una sonrisa.

–Claro que no, es complicado evitar a tantas admiradoras -dije con algo de drama, nada como unas risas, para aliviar las tensiones.

–Sí, claro -se burló Theo.

–Enserio, me acosan -dije fingiendo sentirme ofendido.

–Si tu vida es TAN difícil como dices, trata de que esa chica te ignore.

Me gire para ver a hacia donde apuntaba Theo, justo en ese momento pasaba por el pasillo una chica pelirroja, que estoy seguro nunca había visto en la escuela, ella parecía algo enfadada en estos momentos, pero sabía que unas palabras mías la calmaría, no por nada era el único del grupo que podía hablar con las chicas, además de Pansy, pero ella no cuenta.

– ¡Hey linda! -la llame desde la puerta del vagón -Siéntate aquí –la invite al vagón, poniendo mi mejor sonrisa.

La chica parecía dudosa, sabía que se estaba cuestionando si aceptar o no la invitación, pero su pelea mental no duro mucho, entonces una ligera sonrisa se dibujó en sus labios y se comenzó a acercar a paso calmado.

Estupido y loco amor (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora