Capítulo 11. El bosque prohibido.

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P.O.V. Draco Malfoy.

Estas fueron las peores vacaciones de la vida, ojala el tiempo hubiera desaparecido unos minutos para poder respirar, todo el tiempo paso en una lenta agonía, empezando con mi padre quien se apresuró en hacer el contrato de matrimonio sin siquiera preguntar como estábamos con eso Pansy y yo, hablando de Pansy tuvo el corazón roto más de una semana luego de la confesión de Theo, esos fueron días difíciles para todos, luego mi madre me dio una noticia más que desagradable, Crabbe y Goyle pasarían más tiempo conmigo por orden de mi padre, como ''buenos amigos'' y aunque no lo dijera como mis sombras personales, en definitiva esta fue una lamentable y muy horrible Navidad.

De regreso a Hogwarts, en el expreso, Theo y Blaise se la pasaban muy unidos, más de lo normal si consideramos las bromas de Blaise hacia Theo, parecía que algo se traían entre manos ese par, cosa nada buena para el pobre diablo al que pensaban enredar en su juego, al menos espero que no se metan en problemas esta vez.

Pase la tarde del primer día, solo en mi cuarto hasta que llegaron Theo y Blaise, ambos se sentaron en mi cama uno a cada lado, mirándome fijamente mientras leía un libro de pociones regalo de mi padrino, los ignore pensando que solo querían que los ayudara con lo que sea qué pensarán hacer, y cuando se cansaran se irían, pero luego de un tiempo sus miradas comenzaron a molestarme.

– ¿Qué quieren? –pregunte molesto, pero sin despegar la mirada del libro.

Con rapidez me quitaron mi libro de las manos y me miraron fijamente como tratando de descubrir mi mayor secreto.

– ¿Ahora que mosca les pico?

–Tienes que arreglar las cosas con Hermione –soltó Blaise como si fuera la cosa más normal del mundo, algo así como ''Está lloviendo a cantaros''.

– ¿Qué? Ustedes están dementes, ahora devuélvanme mi libro –extendí mi mano para que me lo entregaran, confundido y molesto a partes iguales.

–Draco si no hablas con ella no arreglaras nada –dijo Theo frustrado por mi respuesta.

–No entiendo para que quieren que hable con ella, ustedes fueron los que me dijeron que la dejara en paz para que no me delataran Crabbe y Goyle, ¿Y olvidan lo de navidad?

–Lo sé, lo sé, pero pueden mantener su amistad en secreto, así como... ¡Ay! –Blaise grito cuando Theo le dio un pellizco en el brazo.

–Draco, como amigo te digo que si ella era importante para ti no la dejes ir así de fácil -habló Theo mirándome con intensidad.

–No lo sé, además creo que no me perdonará lo que hice y... creo que tiene a alguien más –lo último no pensaba decirlo, porque no sonaba bien, pero necesitaba sacarlo de mi sistema.

– ¿Por qué lo dices? –pregunto confundido Theo.

–La vi con alguien, no quiero que me odie más, si arruino su oportunidad de una nueva amistad.

–Draco... –Blaise parecía dispuesto a subir mis ánimos, pero yo solo quería un momento a solas.

Salí del cuarto de prisa, pero me detuve en la sala común, no quería llamar la atención, una vez salí, me puse a vagar por los pasillos de Hogwarts buscando algo que me diera un poco de paz, que me hiciera sentir mejor aunque sea un poco, vague sin rumbo por no sé cuánto tiempo sin encontrar nada que un vacío profundo, al girar por un pasillo vi algo que me alerto, Hermione andaba a hurtadillas, seguida de Potter y Weasley.

Al principio pensé en irme a mi sala común, dormir un rato con una buena poción y dejarla ir a donde sea que fuera, pero entonces una idea surgió en mi cabeza, quizás si veía con mis propios ojos que ella ya me había olvidado, quizás podría olvidarla yo a ella.

Estupido y loco amor (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora