Estupido y loco amor (Editando)

Capítulo 58. Clave y un miembro mas.

《Aquí es donde Harry y Hermione discuten sobre la clave del huevo de oro, solo que no llega Cedric a decirle nada》

P.O.V. Harry Potter.

Estaba desesperado no sabía cómo descifraría la clave, esa cosa cada vez que se abría soltaba un sonido horrible y ensordecedor, me quede mirando el huevo de oro, estaba sentado en unas bancas del jardín, no había casi nadie en los pasillos, pero era normal, mañana salía el tren a casa, yo me quedaría aquí, no quería pasar navidad con los Weasley, no hasta que Ginny me superara.

–Valla Potter, ¿No te preparas para ir a casa? –dijo Draco tomando un poco de nieve, haciéndola una bola y estampándola en la cara de Blaise, quien por el susto callo.

–No, iba ir con los Weasley, pero Ginny termino conmigo, entonces no me apetece ir –dije sin muchos ánimos.

– ¿Porque miras tan fijo el huevo de oro? –pregunto Theo levantando el libro y cubriéndose de una bola de nieve que lanzaba Blaise.

–Wow que bueno reflejos –dije asombrado –la verdad es que la clave que contiene no la puedo descifrar dije mirando el huevo una vez más.

–Yo te ayudo –dijo Blaise, lo quise detener para que no lo abriera pero fue demasiado tarde, el horrible sonido comenzó a sonar por todas partes y Theo le arrebato el huevo y lo cerró de golpe.

–Idiota –dijo Draco –ahora veo porque no la descubres.

– ¿Por qué? –dije confundido.

–No viste el diseño, parecían burbujas de abajo del agua, esa cosa debes sumergirla en agua y meterte en ella para escuchar lo que dice.

–Con este frío claro –dije sarcástico – ¿Quién me acompaña al lago negro?

–Potter, Potter, Potter que corto de vista, ven sígueme, vamos a darnos un chapuzón –dijo Draco adentrándose en los pasillos.

Llegamos a una puerta algo grande, no conocía cual era esa habitación, al abrirla me encontré con una tina o mejor dicho una alberca bajo techo, tenía un montón de llaves para el agua, toallas y jabones de baño, todo era sorprendente.

–Ya ocupaba relajarme –dijo Blaise, tomando una toalla.

–Estoy contigo Blaise –dijo Theo abriendo las llaves y luego tomando una toalla.

–Vamos Potter, no nos digas que eres tímido –dijo Draco entregándome una toalla.

– ¿Qué haremos? –pregunte confuso y empezaron a reírse los tres.

–Valla Potter, que mentecita –dijo Blaise riéndose y me sonroje un poco.

–Vamos nos daremos una ducha y podremos checar la clave, ahora adentro –dijo Draco sacándose la camisa.

Entonces pude notar unas cicatrices casi invisibles en su espalda, esas marcas me hicieron sentir un escalofrío solo de pensar que cada que regresaba a su casa eso era lo que recibía.

–Vamos Potter solo faltas tú –dijo Theo cerrando los ojos, la espuma tapaba perfectamente los cuerpos de los tres.

Me arme de valor y me desvestí y entre en el agua, la cual estaba deliciosa.

–Esto es magnífico –dije hundiéndome un poco.

–Si, el baño de los prefectos, valla suerte que tienen los malditos –dijo Blaise.