Infertility ➵ j.b

cinco

Justin's Point Of View.

Ver tan ilucionada a Juliet con ese niño me llenaba el alma. Yo también estaba muy feliz, me agradaba mucho la idea de que él iba a ser mi campeón.

Se notaba que era un niño solitario y que estaba triste, pero nosotros haríamos que sea el niño más feliz de este planeta.

-Señor Bieber. -Oí que me llamaron y miré hacia donde provenía la voz.

-¿Sí? -Le pregunté a Clarisse.

-Necesito que firme aquí. -Señaló una hoja, donde ya estaba la firma de Juliet, y me entregó un bolígrafo.

-¿Para qué es esto? -Pregunté confundido.

-Son los papeles de adopción. Ustedes se llevarán una copia. -Sonrió y asentí. Firmé el papel y le devolví el bolígrafo.

-¿Cuando podremos tenerlo con nosotros? -Preguntó Juliet estrujando sus manos.

-Dentro de unos meses. Esto es un proceso largo, que tienen que tomar con mucha tranquilidad. Pueden ser dos meses, como pueden ser más. -Respondió y asentimos.

-Está bien. -Respondió Juliet sonriente, lo cual me hizo sonreír. Verla feliz me completaba.

-Luego los llamaremos e iremos a revisar su casa y les haremos más preguntas, las cuales luego comprobaremos que sean reales las respuestas. -Agregó.

-No hay problema por eso. -Tomé la mano de Juliet y ayudé a que se levante. -Muchas gracias por la atención. -Sonreí.

Luego de que nos despedimos, salimos del lugar y comenzamos a caminar hacia el auto.

Una vez parados frente a el, Juliet me paró y enredó sus brazos en mi cuello. Se acercó a mí y me besó lentamente. Tomé su cintura y la pegué más a mí. Profundicé más el beso y ella gimió.

No era el momento ni el lugar para hacer esto, pero los besos de mi esposa eran mi perdición.

Segundos después nos separamos y pegué mi frente a la de ella.

-Te amo. -Susurré y ella sonrió.

-Yo te amo más. -Respondió.

Sonreí y le abrí la puerta del auto, una vez que entró, di la vuelta y me metí yo. Nos esperaba un largo camino a casa.

{...}

Miré la hora en mi celular y bufé al notar que eran las 2:00 A.M. Aún no podía dormirme, Juliet estaba completamente dormida a mi lado. Después de haber hecho mucho tiempo el amor, quedó completamente dormida. Yo intenté hacer lo mismo que ella, pero se me hizo imposible, algo me tiene nervioso y sin poder dormir.

Besé la espalda desnuda de mi mujer y salí de la cama, me coloqué un bóxer y mi pantalón de chandál, y salí de la habitación. Bajé las escaleras, y al llegar a la sala, me senté en el sofá.

Prendí la televisión, pero no le subí el volumen. Sólo estaba iluminando el lugar, nada más que eso. Ahora mismo me sentía raro, no triste, sino que emocionado. Feliz, pero nervioso. Tenía una gran mezcla de emociones en mi interior. ¿Qué pasaría si no era un buen padre?

Sabía que Christopher era el indicado para nosotros, lo queríamos a él como hijo. ¿Pero qué tal si no podía hacerlo feliz al niño? Yo desde ya, quería lo mejor para él. Quería que él sea feliz, que tenga amigos, que tenga todas las cosas que él pida. Y haré todo eso, pero tengo mucho miedo que me salga mal.

Aún tengo unos meses para prepararme, pero este niño no es un bebé, con el cual podré ir aprendiendo paso a paso, este en un niño bastante crecido, que ni siquiera usa pañales, y yo tendré que aprender a ser padre desde una edad avanzada. Es muy confuso todo, pero a la vez me entiendo.

Desde el momento en que lo vi hoy, sabía que quería que ese niño llevara el apellido Bieber. También tengo mucho miedo con el trato que mi padre le dará.

Por supuesto, apenas diga algo fuera de lugar sobre mi hijo, no será más mi padre, pero quiero que Christopher tenga un abuelo, y quiero que lo ame, así como yo hago con mi abuelo, Bruce.

-Amor. -Oí que me llamaban y miré hacia arriba, donde estaba Juliet bajando las escaleras, vestida sólo con una bata. -¿Qué haces despierto a esta hora? -Preguntó y se sentó a mi lado.

-Pienso. -Suspiré. -No podía dormirme.

-¿Te tiene preocupado la adopción? -Preguntó y suspiré.

-Sí, sólo quiero que ese niño sea feliz.

-Lo lograremos, no seremos los mejores al instante, pero aprenderemos al instante.

-No lo sé. -Negué con la cabeza.

-Justin, amor, si lo que te preocupa es ser un mal padre, quédate tranquilo, que serás el mejor que existirá en el planeta tierra. -Dijo tomando mi mano y giré mi cabeza para mirarla con una gran sonrisa en mi rostro.

Ella sin duda, siempre lograba subirme el ánino con unas simples y hermosas palabras.