Infertility ➵ j.b

diez

Justin's Point Of View.

Miré nervioso la última prenda de ropa de Christopher que tenía en la mano y la guardé en el closet. Ya se había acabado la espera, mañana sería el día en el que tendríamos por fin al niño con nosotros, y con Juliet estábamos que nos moríamos de los nervios.

-Juro que me dará algo. -Dijo Juliet mientras guardaba los nuevos juguetes que le habíamos comprado al niño en el baúl de madera.

-Te tranquilizaría amor, pero yo estoy igual. -Dije y me senté en la cama aún sin sábanas.

-No tienes por qué tranquilizarme. -Respondió y soltó una carcajada.

Por fuera ella se veía tan relajada, pero sabía que por dentro era un manojo de nervios. Hoy ya nos habían llamado y nos habían dicho que el niño estaba completamente listo para venir con nosotros y que lo habían notado con más ánimos, cosa que nos daba mucha alegría.

-¿A qué hora saldremos de aquí? -Preguntó.

-¿Para qué amor?

-Para ir a buscar al niño.

-Ah. -Asentí. -A las cuatro de la madrugada saldremos de aquí para poder llegar allí a las ocho. -Respondí y ella asintió nerviosa.

-Creo que deberíamos salir y despejar nuestras mentes por ahora, para no pensar tanto en mañana. -Sugirió Juliet.

-¿Y cuando terminaremos de preparar todo? -Pregunté.

-Ahora. Terminaremos todo e iremos a pasear por ahí. ¿Te parece?

-Si preciosa, me parece. -Respondí y le sonreí.

Ella asintió y tomó del closet ropa de cama para poder armarla. Yo me levanté para ayudarla y tomé las sábanas. Cuando la cama estuvo lista, tomamos unos peluches y almohadones que habíamos dejado en el suelo y los colocamos en la cama. Estaba quedando hermoso. Queríamos que nuestro hijo se sintiera completamente cómodo con nosotros.

Juliet caminó hacia la puerta y sonrió mientras miraba todo el lugar. Sonreí y caminé hacia ella, me paré detrás de ella y pasé mis brazos por su cintura, apoyé mi mentón en su hombro y besé su cuello.

-Ya estamos listos para ser padres Juliet. -Susurré.

-Ya estamos listos para ser padres Justin. -Respondió y reí. -Yo creo que le encantará. Aunque no creo que quiera dormir solo al principio, seguramente está acostumbrado a dormir con muchos niños. -Dijo y asentí.

-Dormirá con nosotros entonces princesa. -Respondí y me separé de ella poniéndome delante. -Mañana al fin tendremos nuestra familia. -Dije feliz y noté como su sonrisa se borró luego de unos segundos. -¿Qué sucede amor? ¿Qué he dicho de malo? -Pregunté preocupado.

-No has dicho nada malo amor. -Negó y se alejó un poco de mí.

-Juliet, dime que te sucede. -Dije tomándola por los hombros realmente preocupado por su repentino cambio de ánimo.

-Lo mismo de siempre amor. -Negó con la cabeza. -Me imagino que pasaría si esta habitación fuera para un bebé o una bebé, a la que yo le haya dado a luz. -Respondió y asentí. Sabía que esto iba a pasar. -No me hagas caso.

-Amor, podríamos haber adoptado un bebé. Tú quisiste un niño grande. -Susurré acariciando su mejilla.

-Lo sé, no hablo de eso. Hablo de que si yo hubiera dado a luz, claramente sería un recién nacido. Si yo no hubiera perdido esos dos embarazos.

-No puedes saber lo que hubiera pasado amor. Sólo concéntrate en que mañana vendrá nuestro hijo a casa, y tenemos que estar felices por eso.

-Estoy feliz, sólo no me hagas caso. -Dijo y asentí, besé su frente y tomé su mano para salir de la habitación.