Infertility ➵ j.b

treinta y ocho

Maratón 3/3.

Juliet's Point of View.

Otra arcada vino a mí y largué todo el contenido que tenía en mi interior, el cual creo que ya no quedaba. Hoy me había levantado sintiéndome completamente mal y odiaba estar así. Ojalá no sea apendicitis.

Me levanté del suelo y fui directo a lavarme los dientes. Ya no me sentía con mucha energía, siempre vomitar me dejaba sin fuerzas y sólo quería volver a dormir. Volví a la habitación y me acosté a un lado de Christopher, ya que Justin se había ido a trabajar.

Ya había pasado una semana desde el problema en la fiesta de Halloween y me sentía un poco mejor, pero de todos modos las palabras del primo de Justin seguían en mi cabeza, "has tenido la peor elección, hasta tu padre lo dijo. Te elegiste a la peor de todas". Esas son simples palabras que te pueden herir hasta en lo más profundo del alma.

Nunca podré terminar de agradecerle a Justin por defendernos a Christopher y a mí de esa manera, no le importó en lo absoluto que ese fuera su primo, lo golpeó de todas formas por haber hablado mal de nosotros.

-Tu padre es nuestro héroe. -Susurré en el oído de Christopher y éste se removió en la cama.

Me levanté de la cama y salí de la habitación. Bajé las escaleras y caminé directo al jardín. Me senté en el pasto bien cortado y sonreí al ver que Esther vino corriendo a mi.

-Hola pequeña bola de pelos. -La tomé en mis brazos y besé su cabeza. -¿Por qué no estás con Chris? -Sonreí y la solté.

Tomé uno de los juguetes que Justin le había comprado y se lo lancé lejos para que fuera a buscarlo. Tomé mi celular del bolsillo de mi suéter y miré la pantalla para saber la hora.

10:13am. Aún era temprano, pero Justin me despertó cuando pasó al niño a nuestra cama y desde ese momento no he podido volver a dormir.

Me levanté del pasto y comencé a caminar por el jardín aburrida. Quería que Christopher se despertara para poder hacer algo con él. Una brisa fresca me azotó en el rostro haciéndome estremecer, así que me volteé y entré a la casa. Ya que estaba mala del estómago, no quería también resfriarme.  Me senté en un taburete de la cocina y comencé a ojear un diario que al parecer Justin había dejado aquí esta mañana.

"Aún no puedo creer que estoy embarazada. Lo habíamos intentado por mucho tiempo y no había caso, hasta que ahora por suerte se dio. Ya no puedo aguantar para que nazca". Decía el diario en la parte de espectáculos sobre una famosa. De repente, un pensamiento, bastante absurdo, se cruzó por mi cabeza, así que tomé nuevamente mi celular y busqué en la aplicación que te controlaba los días del periodo.

-Oh Dios. -Susurré tapándome la boca al notar que tenía un atraso de seis días.

No, no y no. Era imposible que yo estuviera embarazada, aunque en realidad no. Yo podía quedar embarazada tranquilamente, pero no podía llevar a cabo el embarazo. Ojalá sólo sea una alucinación desesperada mía, no soportaría otra pérdida.

Me levanté del taburete de la cocina y comencé a caminar por ésta nerviosa. Las náuseas volvieron a mí, pero el hambre ganó, así que caminé hacia el mueble y saqué un paquete de galletitas de chocolate. Comencé a comerlas mientras maquinaba sobre un probable embarazo, el cuál no quería.

Mi estabilidad psicológica no soportaría la pérdida de un tercer bebé.

Dejé las galletitas sobre la encimera al sentir que quería vomitar nuevamente y corrí al baño. Me arrodillé en el suelo y largué lo poco que había ingerido ahora. Quizá estos eran nervios y estrés que me hacían sentirme mal. Salí del baño de la planta baja una vez que sentí que no vomitaría más y subí hacia mi habitación.

Me lavé por tercera vez los dientes y me senté en mi cama. Me acerqué a Christopher y comencé a zamarrearlo para que despertara. Necesitaba ir urgente a una farmacia.

-Bebé, despierta por favor. -Le pedí y él abrió sus ojos perezosamente.

-¿Qué mami? -Preguntó. 

-Tenemos que ir a comprar unas cosas. Levántate así desayunas y nos vamos. -Dije besando su mejilla y él se sentó en la cama.

Mis nervios me estaban jugando una muy mala pasada. Mi mente estaba entre "quizá estoy embarazada y eso me hace muy feliz, confío en que llegará a término" y entre "si estoy embarazada volveré a perderlo y quedaré destruída nuevamente". Y sabía que, dolorosa y lamentablemente, la segunda estaba más cerca de la realidad.

{...}

Mi turno en la farmacia llegó y caminé nerviosa hacia la caja donde una chica esperaba con una sonrisa en su rostro detrás del vidrio.

-Buenas tardes. -Saludó. 

-Buenas tardes. Quiero dos pruebas de embarazo. -Dije y comencé a golpear mis uñas contra la madera del mostrador.

-¿Digitales? -Preguntó y asentí.

Desapareció de mi vista por unos minutos y cuando volvió dejó las dos cajas delante mío. Tragué grueso y saqué dinero de mi suéter.

-Serían siete dólares. -Dijo y asentí mientras le entregaba el dinero y tomaba las bolsas con las pruebas de embarazo.

Una vez que me devolvió el vuelto, le agradecí y caminé hacia donde estaba sentado Christopher para tomar su mano.

-Vamos mi amor. -Dije y comenzamos a caminar hacia la salida.

-¿Estás bien mami? -Preguntó y sonreí.

-Estoy bien cariño. Mami se ha levantado un poco molesta, pero estoy bien. -Acaricié su cabello y caminamos hacia el auto. No tenía las energías suficientes para venir caminando.

Una vez que llegamos a casa, Christopher se quedó mirando televisión en la sala y yo corrí por una botella de agua a la cocina para luego subir directo a mi habitación. Ahora mismo me estaba orinando, pero tenía que producir más líquido para la segunda prueba de embarazo.

Lo quité de la caja y sin leer las instrucciones, ya que me sabia esto d3 memoria, le quité el capuchón con las manos temblorosas y me senté en el retrete. Oriné sobre la parte donde debía hacerlo y lo tapé para dejarlo sobre el lavado. Me lavé las manos y me volví a sentar en el retrete para colocar mi cabeza entre mis manos. Me encontraba desesperada ahora mismo, no quería estar embarazada, me negaba a estarlo. Debía ser sólo una imaginación mía.

No me atrevía a ver el resultado, pero mi curiosidad a la vez me estaba matando. Así que una vez que sentí que habían pasado los cinco minutos, me levanté y me acerqué al lavado.

-Mierda. -Susurré al borde del desmayo aún sin poder tomar la prueba. -Vamos Juliet, no seas cobarde. -Me dije a mí misma y tomé una profunda respiración.  Tomé la prueba en mis manos y cuando la volteé, mi mundo cayó a mis pies.

Positivo. 3-4 semanas.

En mi cabeza ahora mismo sólo había preocupación por el futuro de éste embarazo. No tenía buena espina con esto, sabía que quizá lo perdería en unas semanas. O que quizá la prueba se haya equivocado, por eso mismo tengo que esperar a tener nuevamente ganas de orinar para hacerme la otra prueba.

Pero una hora después, al lado de la anterior prueba, estaba ésta que decía exactamente lo mismo "Positivo. 3-4 semanas".

Y ahora es cuando comienzo a maldecir el viaje a Alemania y haber tenido tanto sexo con Justin. Había vuelto embarazadísima de ese viaje.

{...}

Al finnnnnnnnnn, después de un mes un algo capítulo 😭😭😭

Realmente lo siento, había tenido un bloqueo de inspiración y no pude escribir😩😩

¡Juliet está embarazada zkslsjdlsjd! ¿Qué opinan ustedes? ¿Piensan que ese embarazo llegará a cabo? 👶

Espero que les guste este maratón, las amo mucho mucho, nat 💕💖