Chica Mala

Capítulo 13

DRAKE

Me desperté al no sentir su cuerpo contra el mío. Se había ido. Me levante de golpe y baje las escaleras con la esperanza de que siguiera todavía dentro, pero no la veía. Abrí la puerta y vi como un taxi se alejaba hacia las afueras de beverly hills. Volví dentro de la casa y me senté en el sofá echándome las manos a la cabeza. Me sentía impotente, joder, ¿por qué cojones se había ido? Decidí darme una ducha y relajarme. No tenía por qué pasar nada, siempre que me acostaba con una tía a la mañana siguiente la echaba de mi casa... pero si pasaba, pasaba que era Juls. A la tarde llamé a Alice para despejare un poco ya que los borrachos de mis amigos seguían ebrios. Estuvimos el resto de la tardé viendo películas y comiendo palomitas. Alice era como esa amiga con la que no tendrías nada, solo sería tu amiga y siendo mi hermana era mejor. A la noche la llevé a su casa disculpándome con ella porque al día siguiente no podía ir a recogerla a la universidad. Kaden me dijo que tendría que ir a la empresa de abogados a conocer y dar confianza entre los abogados que irían al almuerzo, sobre todo a Hukk, el abogado chico al que tendría que matar.

Era martes, el día en que tendría que tener lugar el almuerzo. El día anterior me hize buen amigo de los pijos abogados y del chino ese. Esto de la mafia no iba a ser para siempre, una vez que terminara con el tema de Gohan, lo dejaría todo, o eso quería pero abandonar el mundo de los mafiosos no era tan sencillo, entrar era muy fácil pero salir no tanto... Eran las diez de la mañana y tendría que estar allí a la una. Me pegué una ducha y me coloqué el traje azul marino que Kaden me había alquilado. El camino hacía el hotel donde tendría lugar el almuerzo lo pase pensando en Blanca nieves... desde el otro día que no me la quitaba de la cabeza y eso nunca me había pasado con ninguna otra tía que ya me había tirado. Salí del coche y me coloqué la pistola en la cintura. La entrada del hotel era de colores neutros con dos sofás de color negro. Una rubia extremadamente buena se acercó hacía mi moviendo las caderas de manera muy llamativa. Me indicó donde estaba el comedor y la seguí detrás de ello admirando las buenas vistas. En la mesa ya había algunos abogados que conocí el día anterior pero el chino que es el que me interesaba no lo veía. Dirigí mi vista atrás mía de donde provenían unas leves risas. El chino se estaba riendo con una camarera que quedaba espaldas a mí, esas curvas me sonaban... La chica se dio la vuelta fijándose en mí y al ver de quien se trataba mi yo interior experimento una nueva sensación como esa cuando ves a alguien que hacia mucho tiempo que no veias y tenias ganas de verla, pero seguro que esa no es la sensación que nace en mi... Blanca nieves abrió los ojos como platos y giró tras de sí hacia el pasillo. La seguí hasta una puerta que daba detrás del edificio

JULS

No me podía creer que Drake estuviera aquí y menos con esas pintas de abogado. Me despedí de quien sería mi próxima víctima, el señor Hukk, y me di la vuelta saliendo detrás hacia la parte trasera del edificio, necesitaba un cigarro. Una fuerte mano me agarro del brazo y sintiendo miedo de quien podía ser le di con la bandeja en la cabeza a quien quisiera que fuera. Me había asustado joder. La persona empezó a quejarse y me di la vuelta viendo que era Drake. La ceja le estaba sangrando y con su mano derecha se estaba intentando quitar la sangre. Joder, si que le había dado fuerte. Saqué un trozo de papel de cocina del bolsillo del delantal y lo coloque sobre su ceja, le iba a curar pero Drake atrapó mi mano.

—¿Por qué te fuiste? —De todas las preguntas que pensaba que me podía hacer, aquella no entraba.

—Drake...—Intente librarme de su mano contra la mía pero solo conseguí que me la agarrara más fuerte. —Olvidado joder.

— ¿Qué olvide que? ¡Si al menos supiera porque te fuiste podría olvidar algo! ¡Aunque no creo que eso fuera posible joder! —dijo echándose las manos a la cabeza y pude recuperarme de su agarre

Siento que sea tan corto, pero apenas tengo tiempo para escribir con tantos examenes y trabajos. Os recompensare.