CAPÍTULO 23

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-Hola. La saludo.-la chica me mira preguntándose quien soy. Yo también me lo pregunto de ella, ¿habrá venido buscando a Drake?

-Hola. Drake me había pedido que le buscara ropa para una chica. Debes de ser tú.-la chica me tiende la bolsa y muestra una sonrisa bastante falsa.-Toma.

-Muchas gracias-le digo. La chica asiente y se marcha.

Pongo la maleta de deporte sobre la mesa y veo lo que hay dentro. Hay de todo un poco. Camisetas, algún que otro pantalón, un pijama, y cosas para el aseo. Me pregunto en como sabía mi talla, pero me da igual, todo es muy bonito. La chica tiene muy buen gusto. Sonrió sin querer, al pensar en Drake pidiéndole a esa chica ropa para mí. Oh. Escucho ladridos provenientes del jardín de la casa de al lado y me acuerdo de Weekend. A esto que me llaman por teléfono. Es Erica.

-¡JULS¡

-Érica- no hablo con ella desde lo sucedido anoche.

-¿Cómo estás? ¿Bien? Espero que sí. – lanza una pregunta tras otra y se le nota nerviosa.

-Estoy muy bien Érica. Le digo para tranquilizarla.

-Que bien de verdad. No te he llamado antes porque no he podido. Tengo buenas noticias.

-¿Sí? Cuéntame.

-¡Nacho me ha contratado en su hotel!-grita- Seré camarera en su hotel. Así que me quedo aquí en Los Ángeles.

-¡Pero qué bien!

-Sí. Genial. Oye, quiero verte.

-Estoy en casa de Drake. Pásate. Te mando la dirección por correo.-Me despedí de ella y colgué.

Drake

Kaden está muy cabreado. Dice que no entiende lo que he hecho, y la verdad es que yo tampoco. Solo sé que estoy empezando a sentir algo por la bonita capulla de Juls y no soporto que le hagan daño. He salido muy tarde del local donde me había llamado Kaden y mi casa está muy lejos para ahora ir. Tengo mucha hambre. Llamo a Karina y le pido que me reserve mesa. Esta loquita por mí y sé que no me fallara, y así lo hace. A las tres llego al bonito restaurante de carretera. Siempre me ha gustado venir aquí cuando estoy solo. No suelo encontrarme con nadie conocido y me relajo mucho viniendo aquí. Pido lo de siempre, y Karina entra y sale de la terraza en la que estoy sentado con una amplia sonrisa coqueteándome. Me ha llegado un mensaje de Kaden diciéndome que el traje para la fiesta de esta noche está listo en la tintorería. Me ha mandado a que esta noche arregle unos asuntos con uno tipos en una fiesta que organiza un tal Jefri Sanchez uno de los muchos peces gordos de todo Los Ángeles. No quiero ir, prefiero quedarme en casa y estar con Juls pero se me va a hacer imposible. Salgo de la tintorería y me encuentro con Dakota, no sé si soy yo o cada vez lleva menos ropa. Me ve y se acerca hacia mi contoneando sus caderas.

-Hola Drake-dice con una amplia sonrisa. Se lo que quiere. Y yo también lo quiero.

Chica MalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora