-Creo que se donde puede estar-exclamó Erika entrando en su coche.
No tardo ni diez minutos en llegar en cuando la llame diciéndole que se trataba de Juls. Cuando la llamé estaba trabajando, pero como Nacho es su jefe, al parecer no había ningún problema. El ya estaba al tanto de que cosas así con Erika podrían pasar.
-Quédate aquí - me dijo cuando llegamos a una especie de bar. El nombre de "Green" parpadeaba en unas luces de neón de colo verde. No me sonaba para nada este lugar.
-No pienso quedarme aquí- exclame abriendo la puerta del coche
-Si te reconocen la vas a cagar-se inclinó hacia delante cerrando de nuevo la puerta en toda mi cara. -Yo puedo pasar desapercibida. Tu, no. Solo voy a echar un vistazo. Cuando confirme mis sospechas te llamaré desde el baño y te indicaré.- me lleve las manos a la cabeza y bufé. Estaba mujer me estaba poniendo más nervioso de lo que ya estaba.
-Ni se te ocurra hacerte el valiente Drake. Es de Juls y de tu hijo de quien estamos hablando. -al final acepté.
JULS
Estoy sedienta. La cabeza no para de darme vueltas y he perdido la noción del tiempo. El lugar donde me tienen encerrada no tiene ventanas y no se si es de día o de noche. Desde que llegue nadie ha entrado, y solo escucho música muy fuerte que viene del exterior. Lleva sonando horas, creo que no ha parado desde que llegué y es lo que me mantiene despierta.
Escucho pasos acercarse hacia donde estoy, y me remuevo en la silla a la que me tiene atada. Me duelen mucho las muñecas y apenas siento ya las piernas. De repente abren la puerta de un sopetón y una ráfaga de calor me invade en todo el cuerpo. Jeff.
Con su habitual pinta de despreocupación y de rey del lugar se acerca hacia donde estoy lentamente. Va vestido como siempre que lo veo, con ese horrible traje negro. Cuando llega hasta mi se agacha hasta llegar a la altura de mi barriga, se me tensan todos los músculos, incluso los que no sabía ni que tenía. Primero me mira a mi, esa mirada fría de siempre pero ahora con orgullo y furia. Luego mira mi barriga y después de lo que creo que han sido cerca de 5 años vuelvo a sentir miedo. Miedo de que le haga algo a mi hijo.
-Cuando nazca tendrás que procurar que no se acerque a las pistolas, ¿no crees Juls?-no soy capaz de mirarle a los ojos, estoy sudando por lo nerviosa que estoy y noto que me empieza a faltar el aire. -¿No eras tú la que no creía en el amor? joder- se echa a reir- y me vienes con un bebé. -acerca sus manos hacia mi cara y me levanta la cabeza. -Mirame. -no lo hago, me resisto, me vuelve a insistir gritando. Le acabo mirando. Efectivamente, siente mucha rabia. Esta furioso.
-No le hagas nada al bebé-los ojos se me humedecen. Hace meses que no lloro y si lo hago después de tanto tiempo acabaré por descargar todo lo que he estado tragando.
-¿Por quién me tomas Juls? Sabes que no le haría daño ni a una mosca...-lleva su mano hasta mi barriga y la acaricia. -Además este precioso bebé me va a ser muy útil.
Jeff se levanta y recupera su posición de superioridad frente a mi. Más alto, sin estar atado, y muy seguro de lo que pretende hacer conmigo.
-¿Qué dices?-Jeff ignora mi pregunta y se aleja hacia la única puerta de la habitación, por la que había entrado. -¡Jeff!-sale de la habitación y cierra tras de si.
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Chica Mala
Teen FictionNo todos los chicos malos se enamoran de la chica tímida y dulce. Juls no es tímida, es vacilona, no es callada, no se calla nada, no es una chica normal, es una mafiosa. Drake, un chico malo, mafioso, al que le vuelven loco Juls y sus tatuajes. Si...