X

2.2K 137 10
                                    

___ POV

No sé qué estaba pasando por la loca cabeza de Lennon, pero lo justifiqué diciéndome que solo estaba triste y alterado porque todos partiríamos y él seguiría en la calle. Estaba segura de que alguno de los chicos lo ayudaría, pero ahora con lo que había pasado lo dudaba fuertemente.

¡Un asesino! Eso explicaba por qué de vez en cuando él llegaba con algo de sangre en su ropa; él siempre decía que se había cortado intentando conseguir algo. Ni siquiera sabía que cargaba con un cuchillo. A juzgar por la cara de los chicos, ellos también estaban enterándose de lo psicópata que es Lennon.

Sentía su cuchillo contra mí, presionando cada vez un poco más. No podía moverme o sería mi fin. Me resigné y lo engañaría de alguna manera para que me soltase y después vería cómo librarme de él.

—Bien Lennon, me quedaré contigo, baja el arma. Vayámonos de aquí. Déjame despedirme de ellos —dije lo más resignada que pude.

—Así me gusta, preciosa —dijo él besándome el cuello, de lado derecho.

Ugh, qué asco.

Había funcionado. Él poco a poco fue bajando su cuchillo hasta que lo guardó en su bolsillo trasero.

Yo apenas había avanzado unos pasos, cuando por el rabillo del ojo vi a Ally abalanzarse sobre él y comenzar a golpearlo fuertemente por la espalda. Cayeron juntos, pero ella se incorporó rápidamente poniendo a Lennon boca arriba. Realmente aunque pequeña, Ally era fuerte.

Ella seguía golpeándolo una y otra vez en la cara y las costillas. Me alteré, así que fui de regreso e intenté separarla, pero estaba tan enojada que era difícil.

—¡Ally! ¡Por Dios Ally, suéltalo! —grité.

Sin embargo ella no me escuchaba, ella seguía haciendo lo suyo. Todos intentamos separarla de Lennon, pero nadie pudo. Se me ocurrió algo.

—¡Ally, me gustas! ¡Te quiero tanto! —dije desesperada.

Estaba llorando, no sabía ya qué hacer para separarla de él. Esperaba que con mi confesión tan cierta ella parara. Funcionó. Al escuchar mis palabras inmediatamente paró lo que estaba haciendo. Se levantó y fue hacia mí. Rodeó mi cintura con sus brazos y puso su frente sobre la mía.

Lennon yacía en el piso sin moverse.

—¿En serio, bebé? ¿hablas muy en serio? —preguntó Ally sollozando.

—Nunca dije algo tan cierto en mi vida —dije.

Podía sentir el calor en mis mejillas. Bajé mi mirada. Separó nuestras frentes, se acercó a mi oído y me susurró algo que me hizo sonrojarme aún más:

—Tú también me gustas. No creo en el amor a primera vista, pero tú eres diferente. Te quiero conmigo. Te quiero tanto, bebé.

Se acercó a mis labios y me dio un tierno beso. Solo se quedó ahí, no movió sus labios. No intentó profundizarlo ni nada.

Después de lo que parecieron minutos nos separamos y nos sonreímos afectuosamente. Estábamos en nuestra pequeña burbuja y no habíamos notado a los demás.

Jason se acercó a comprobar el estado de Lennon. Se agachó y tomó su pulso. Lennon no estaba cubierto de sangre ni nada, pero no se movía. Ally solo tenía unos cuantos moretones en sus nudillos.

—Beats, Brooke... vámonos de aquí. Su pulso está demasiado débil —dijo Jas seriamente, levantándose.

Sus palabras me golpearon lentamente. Mi cara y la de todos era de terror. Estábamos en shock, el único tranquilo era Jas. Al ver que no me movía él me gritó:

Lo que me llevó hasta ti (Ally & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora