XXV

1.3K 94 4
                                    

Se llegó el día en el que finalmente podría salir del hospital. Las comidas ahí eran espantosas. Rupert y Sam se quedaron durante mi estancia, así que me traían comida a escondidas. Los adoro.

El show de las chicas fue todo un éxito. Lo complicado fue cuando tuvieron que salir del auditorio en el que se presentaron: había una estampida de fans. No llevaban seguridad con ellas, así que mis amigos las ayudaron a salir.

Me encontraba en el baño de la habitación tomando una ducha. No me dejaron moverme libremente hasta hoy. Así que me aseguré de limpiarme todo unas tres veces. Necesitaba quitarme el olor a hospital.

Cuando salí me encontré a Ally sentada en la cama.

—Hola bebé —dije mientras la abrazaba por la espalda.

—Hola amor —contestó—. ¿Qué tal la ducha?

—¡Asombrosa! —dije separándome de ella. 

Se volteó para estar de frente a mí.

—Deberías darte prisa. Aún hay que ver a tu doctor para ver qué cuidados te indica —comentó.

—A la orden, capitán —dije divertida. 

Ella rodó los ojos. Una vez que estuve lista nos dirigimos al consultorio de Ricardo, mi doctor. Toqué la puerta de su cuarto.

—Adelante —dijo desde adentro. 

Abrí la puerta y dejé que Ally pasase primero.

—Hey doc —dije sentándome en una silla frente a su escritorio.

Ally tomó asiento a mi lado.

—_____, es un gusto que ya estés lista para dejar este lugar —comentó.

—Gracias doc, solo vine por mis medicinas e indicaciones que debo seguir —dije.

—En realidad solo te daré pastillas para prevenir una infección y de cuidados, solo no hacer esfuerzos —dijo.

—Excelente —respondí sonriendo.

Él sonrió de vuelta. Sin una palabra más firmó mi receta y salimos de ese lugar.

—¡Soy libre! —dije lanzando mis brazos al aire.

—Sin esfuerzos, bebé —me regañó Ally.

—Lo siento —dije rodando mis ojos—.¿A dónde vamos primero?

—Las chicas están esperándonos en el hotel, así que vamos para allá. Después comeremos algo —contestó.

—¿Qué tal lasagna? —pregunté.

—Lo que tú digas —dijo guiñándome un ojo.

—¿Y si te como? —pregunté jalándola hacia mí. 

Rodeé su cintura con mis brazos y ella pasó sus brazos por mi cuello.

—Primero la comida y luego el postre —contestó rozando sus labios contra los míos.

Antes de que se separara la besé muy lentamente. Nos apartamos después de un rato con nuestras respiraciones erráticas.

—Ally, sé que nuestra relación es más emocional que física, pero realmente quiero pasar al siguiente nivel —dije recargando mi frente en la suya. 

Sentía que estaba sonrojándome.

—Lo sé, yo también quiero estar contigo —dijo rozando su nariz con la mía.

—¿En serio? —pregunté separándome ligeramente de ella.

—En serio —contestó—. Ambas hemos esperado ya mucho para eso.

Lo que me llevó hasta ti (Ally & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora