Capítulo XXXI: Déjame entrar

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Allison miró a Theo desde su posición en el coche, este le había prácticamente empujado a subirse al suyo y luego se había sentado en la posición del conductor y comenzado a manejar hacia algún lugar que ella desconocía.

Sabía que podía fácilmente dejarlo inconsciente si intentaba hacer algo, pero no entendía la razón detrás de este impulso de sacarla de la estación.

—Entonces... —le miró nuevamente, nerviosa—, ¿Qué estabas diciendo... en la estación?

Theo le dio un breve vistazo, mientras volvía la vista hacia la carretera oscura y sinuosa que se extendía frente a ellos.

—Mientras leía la transcripción y luego de lo que me contaste, me puse a pensar que si el que nos estemos preguntando dónde está Lydia es la verdadera pregunta que deberíamos estar haciéndonos —la miró—. Quizás deberíamos preguntarnos: ¿Cómo sabemos que tú amiga aun no está dormida?

Allison frunció el ceño ante la idea del desconocido, aunque su mente comenzó a analizar esa idea.

—¿Quieres decir que ha estado dormida todo este tiempo? —pregunto, entre la confusión y el escepticismo. No era alguien que creyera en cualquier cosa, y menos si no le daban pruebas de eso. Así que espero a que él revelara algo que la hiciera creer en su teoría.

—Bueno, la gente sonámbula puede hacer cosas locas —le contó él hundiéndose de hombros—, un hombre va a la cocina y hace todo una comida. O decide ir a pasear por la calle desnudo. Demonios, incluso ha habido casos de personas que se despiertan en habitaciones con desconocidos y no recuerdan haberse acostado con ellos.

Eso solo intensifico el ceño de Allison, y frunciendo los ojos le miró.

—¿Por qué esto es importante? —le preguntó con curiosidad, esperando a que llegará al quid de la cuestión.

—Recuerdo que una vez cuando era pequeño —le contó Theo, mientras aceleraba y miraba fijamente al frente. Allison se sintió como si en esos momentos no estuviera con ella en la carretera, sino en algún lugar recóndito de su mente—, mi hermana mayor me rescató de morirme ahogado. Yo pensaba que estaba en la tina, pero realmente estaba en medio de un arroyo. Claro que mis padres se enfurecieron por qué pensaron que lo hice a propósito.

—¿Y? —Allison pregunto, esperando a que continuase cuando este se quedó en un extenso silencio.

—Solo que yo estaba convencido de que me encontraba en la tina —le dijo él, viendo que aun no comprendía del todo la idea. Tenía una media sonrisa en el rostro, y una ceja alzada.

Allison se cruzó de brazos, y exclamo un "" bastante alargado, dando a entender que seguía sin entender a que se refería con todo su monólogo.

—Entonces... ¿Cómo sabemos que ella no solo está convencida de que esta en una especie de habitación? —Le miró—, ¿Y si no está realmente allí y su mente le hizo creer que está allí?

—Como en una tina... —Allison comprendía de repente a que se refería

—Creo que Lydia puede estar aun dormida —le confesó él—, y creo que tengo una idea de donde está.

***

Stiles empujó cada puerta que no estuviera cerrada en Eichen House, y cada habitación reveló estar vacía. La última a la que entró fue a la que Lydia había ocupado.

Cuando la empujó, esperó encontrarla en el interior, pero la misma se hallaba vacía.

—No es posible —Kira sentenció, mirando alrededor—, no está aquí... pensé que estaría aquí...

Despierta | Teen Wolf #5|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora