Papa por sorpresa

Capítulo 26

N/A: Bueno, hoy tengo varias cosas que decir. Primero que me da mucha pena porque le tengo un tremendo cariño a este fic, pero tengo que anunciar que le quedan dos capítulos más, tres si contamos este. Serán dos capítulos ñoños que intentaré hacer lo mejor posible y que espero los disfrutéis, pero sí, ya toca darle un final a la historia. Porque tampoco creo que sea conveniente alargarla mucho más y porque mi tiempo para poder escribir y actualizar se va a reducir bastante próximamente y no voy a tener tanto tiempo.

Y segundo espero que disfrutéis del capítulo y si tenéis tiempo y dejáis una review os lo agradezco mucho.

El café calienta mis manos a través del vaso de cartón, aunque lo dejo inmediatamente sobre la improvisada mesa de la furgoneta, en cuanto me doy cuenta de que mis manos están temblando.

Miro a Kate, que me mira por encima del hombro de Ryan, mientras éste le coloca el micrófono en el bolsillo de la camiseta. Al contrario que yo, que estoy cargado de preocupación, ella parece segura y concentrada en lo que está a punto de hacer.

Cuando el irlandés termina de colocarle el micrófono, Kate le hace un gesto de asentimiento y Ryan se aleja, sentándose junto a Espo quien está preparando el ordenador desde el que vamos a controlar los movimientos de Kate.

Yo me levanto y ella se acerca a mí. Agarro su mano, sintiendo su calidez, y deslizo mis dedos sobre su piel, necesitando acariciarla.

-Todo va a estar bien - me promete ella, casi en un susurro.

Yo miro por encima de su hombro, observando cómo Esposito y Ryan trabajan en el ordenador, tratando de darnos la privacidad que aquel habitáculo no nos permite tener.

-Ten cuidado, por favor - le susurro, llevando su mano hasta mis labios, dándole un rápido beso. Mi tono de voz suena preocupado, pero no puedo evitarlo. Me preocupa que Kate se vaya a enfrentar sola a ese monstruo, y me preocupa que él le pueda herir, verbal o físicamente.

Ella asiente, antes de rodear mi cuello con sus brazos, aspirando después el aroma de mi cuello.

-Volveré en unos minutos, recuerda que tenemos planes.

Sus palabras me obligan a curvar los labios hacia arriba, aunque sigo preocupado.

-Te quiero - le susurro antes de que sus labios sellen los míos en un rápido beso.

Ella no me devuelve el "te quiero" y sé que no lo hace porque está segura de que todo saldrá bien, de que tendremos tiempo de decírnoslo después, sin embargo mi preocupación nubla toda la razón que ella tenga. Se suelta de mi agarre y finalmente sale de la furgoneta.

-Hey bro, está todo controlado - me dice Espo mientras me ofrece unos auriculares.

-Sigo pensando que debería llevar también cámara, sería más fácil si pudiésemos ver lo qué ocurre,

-Podemos controlarlo así.

Ignoro lo que dicen y me centro en escuchar a través del micrófono que lleva Kate.

-Voy a llamar al timbre - dice ella.

-Recibido - Es Esposito quien habla, mientras yo me mantengo callado. Me gustaría decirle una vez más a Kate que tenga cuidado, pero me han dado instrucciones de estar callado para no desconcentrarla.

Lo siguiente que se escucha es el sonido del timbre, tal y como Kate había avisado, seguido de un pequeño suspiro.

Me concentro en pensar que ella necesita esto. Que odia ver que él puede disfrutar y saborear la libertad después de lo que le hizo, mientras ella seguirá teniendo cierto temor o limitaciones a sentir esa libertad mientras él esté libre. Ella lo necesita, es lo único que importa.