To Hold Up the Sky (Percico/Pernico) Traducción

Capítulo 23: ¿Beso?

Profecía:

Habrá seis al principio y al final.

Uno de ellos será enemigo y uno será amigo.

Una elección; la mente o el corazón.

Los oídos del amante serán sordos y sus ojos ciegos.

Engañarte él intentará.

Para el malestar del Dios del hoyo.

Un antiguo dios cubrirá.

Un camino final que se avecina: destruir o salvar.

Capítulo:

ADVERTENCIA: Este capítulo probablemente te matará de diabetes. ¡De nada!

Percy miró Cupido desaparecer con total y absoluta confusión en el rostro, la boca abierta como un pez. Nico sonrió interiormente ante su expresión, tratando de alejar el miedo que amenazaba con desbordarse en él. Esperaba que su cerebro infestado de algas no fuera capaz de entender lo que significaban las palabras de Cupido, porque él no estaba listo para confesar sus sentimientos.

Afortunadamente, el sesos de algas parecía haberse alejado de sus pensamientos, volteó su cabeza hacia Nico con preocupación en su semblante. "¿Estas bien?" preguntó.

"Bien." Nico murmuró, tratando de olvidar las pesadillas que lo habían atormentado cunado estuvo en estado de coma. No quería pensar en ello.

"¿Estás seguro? Te ves un poco pálido." Percy señaló, llegando a poner su mano en la frente de Nico.

Nico golpeó la mano, la ira tensando su cuerpo. "Dije que estoy bien, ¿de acuerdo?"

Observando a Percy dejar caer su mano, el semidiós más joven notó el dolor que brilló en esos orbes verde mar. Sintió una punzada de culpa, pero no podía evitarlo. La versión pesadilla de Percy había sido dolorosa, y no sabía si podía hacerle frente en este momento.

Las imágenes de la pesadilla pasaron por la mente del hijo de Hades, y Nico hizo una mueca de dolor visible mientras se apoyaba en un pilar en ruinas. Percy se dio cuenta, enviando miradas de preocupación por el rabillo de sus ojos. "Será mejor que encontramos un lugar para acampar y pasar la noche." él dijo. Agarrando el hilo, caminó hacia la entrada del laberinto y empujó el símbolo azul que brillaba intensamente. "El hilo nos ayudará a encontrar un lugar."

Nico siguió Percy de las ruinas al laberinto, arrastrándose detrás del semidiós mayor pese a que se obligaba a soportar cada paso, exhausto hasta el punto de colapsar. Sus pasos resonaban en el largo pasillo por el cual caminaban, con el techo muy alto. De hecho, extrañamente se parecía demasiado al techo de esa iglesia-

'Deja de pensar en eso.' Su mente le regañó. 'Pensar en eso sólo empeorará las cosas.'

'Pero eventualmente pasará.' Otra parte de su mente protestó. 'Es mejor estar preparado para el peor-'

"¡No!" Nico gritó en voz alta, sus mejillas tomando un color rojo de vergüenza al ver a Percy levantar una ceja.

"¿Algo está mal Nico?" Preguntó Percy, estudiando la cara de Nico. El semidiós más joven supo que notó algo, pues él dejó caer la ceja y la reemplazó con una expresión de preocupación.

Nico rodó los ojos. "Deja de actuar como mi madre, Percy." Él chasqueó. "Te dije que estaba bien." Cuando vio una expresión imperturbable en la cara de Percy, añadió con un gruñido, "y lo diré de nuevo si tengo que hacerlo."

Percy rodó los ojos hacia él, perdiendo la paciencia con el hijo de Hades. "Di lo que quieras decir, pero sé que no estás bien. Lo que haya pasado allí te puso mal."