❄Prólogo❄

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Sus ojos están fijos en los míos con cierto dolor en su expresión. Me odio a mí misma en este mismo instante, no tenía por qué haberles ocultado la verdad, pero sencillamente no tuve el valor de decírsela y tampoco quería que se preocuparan por mí. Yo estaba consciente de que tarde o temprano llegaría este momento.

—Ice, contéstame. ¿Por qué no nos dijiste nada? —su voz se escucha casi tan baja y pausada como la mía. 

—No quería preocupar a nadie —respondo segundos después con cierta dificultad. Mis labios están demasiado entumecidos.

Yoongi se ve desesperado, se revuelve el cabello una y otra vez mientras yo sólo tiemblo en su regazo y le miro a los ojos.

—Idiota, idiota, eres una idiota —repite una y otra vez y la impotencia y rabia se reflejan en sus ojos.

—Lo sé, soy una idóta como tú —trato de bromear pero su expresión no cambia.

—Ice no es gracioso, ¿te has dado cuenta de la gravedad de la situación? Si hubiera llegado más tarde tu podrías...

—N-no —le interrumpo—. Cállate...Min, m-mejor...abrázame.

Le sonrío débilmente y entonces él me abraza con fuerza.

—Mierda, resiste Ice...

Nos mantenemos abrazados por no sé cuánto tiempo más y él maldice una y otra vez hasta que se queda sin fuerzas e insultos nuevos.

—Ice...

—¿Mmm?

—Te odio —musita.

—Lo sé.

—¿Lo sabes?

—Ya me...lo has dicho...muchas veces.

—Entonces hoy te odio aún más.

Sonrío sin muchas fuerzas para hablar de nuevo. Yoongi me acaricia mis frías mejillas y me pone en la cabeza su gorro azul que tanto me gusta. Aún no puedo creer que aún lo conserve.

—You are...my Sweet...Ice —trata de hablar en inglés y yo asiento sonriendo.

—I'll always be your sweet Ice, Yoongi.

Sweet Ice [Suga]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora