Sweet Ice [Suga]

❄Capítulo 31❄

Mamá observa alucinada los brazaletes de la vitrina y al ver que yo no muevo ni un dedo, me hala del brazo.

—¡Mira este de aquí Ice! tiene dijes de mariposas, ¿no te gustan las mariposas?

—No —niego de inmediato.

—¿Y qué me dices de las flores?

—Mamá, ¿en serio no quieres darme otra cosa? Puedo comprarme una biblioteca entera con lo que cuesta uno de esos —reniego frustrada y la dependienta me mira de malas maneras. ¿Qué le pasa a esta? ¿Está preocupada porque la echarán si no vende nada?

—Mira Ice —Sarah me llama desde el otro lado de la vitrina y me acerco a ella —.Este no tiene dijes, pero puedes escoger letras iniciales para ponerle —dice emocionada.

Mamá parece interesada en aquello y se acerca a nosotras. Dan está al otro lado de la joyería mirando relojes.

—¡Oh Ice! Hasta puedes ponerle dijes en forma de corazón —a mamá le brillan los ojos y yo me muerdo el labio inferior.

—Creo que me gusta ese.

La dependienta amargada saca un brazalete sencillo con un corazón pequeño de plata en el medio.

—Puede ponerle hasta diez iniciales, usted dígame cuales desea —me dice la dependienta ahora de forma sonriente y profesional. Qué conveniente.

Pienso muy bien en mi respuesta. ¿Qué iniciales le pondré? ¿Mi nombre? Lo encuentro muy simple. En el fondo de mis pensamientos sé perfectamente cuáles elegir pero no estoy del todo segura. Antes que pueda pensarlo mejor, mi corazón o lo que sea hablan por mí.

—La Y, J, T, H y N.

Mi madre y Sarah me miran a la vez sorprendidas y desconcertadas.

—¿Por qué esas iniciales? —me pregunta mamá curiosa.

—Tienen un significado especial —respondo sin intención de dar más explicaciones.

—¿Cinco dijes?  —inquiere la dependienta mientras saca los dijes de la vitrina y yo niego.

—La letra J la quiero dos veces más.

La dependienta saca dos iniciales más de la letra J y las coloca alternadamente en el brazalete junto a las demás.

—¿Qué letra quiere dejar junto al corazón? —inquiere nuevamente y yo respondo casi al instante y sin pensarlo.

—la Y.

Mamá y Sarah siguen mirándome curiosas y yo no pienso decir una sola palabra. La dependienta termina de colocar los dijes y me pide que le acerque la muñeca, obedezco y me la abrocha con agilidad. Creo que ahora sí me gusta este regalo. Se ve bonito, sencillo y tiene un significado especial...que sólo yo sé.

En el regreso a casa ambas me insisten en que les diga sobre el significado de las letras pero yo me niego a responderles...Lo cómico es que ninguna inicial de ellas está en el brazalete, tampoco la mía, la de Dan o mi padre. Tal vez los chicos sí adivinen mejor el significado de los dijes.

Y ahora que recuerdo a los chicos, la noche se acerca y estoy un poco ansiosa y también decepcionada por ello. Yoongi no me ha llamado en todo el día al menos para insultarme o desearme el mal...No le veré esta noche y aún así no se ha dignado a mandarme un mensaje con los chicos....Creo que realmente no le importo. Bueno, tendré que aceptarlo y fingir que nada ha pasado entre los dos. Ignorar las amarguras y centrarme en lo positivo. Aún recuerdo al chico de aquella joyería pero no pudo haber sido él...No pudo...

Abro mi closet pensando en qué ponerme para la noche. Rara vez uso un vestido y con el frío tampoco debe ser una buena idea, pero supongo que la ocasión lo amerita así que elijo el vestido más elegante que tengo que es negro tipo cuero y con un solo tirante.