Parte 2/3
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─ Yo voy a ganar esta apuesta. -Dijo Manuel seguro-
─ ¿Si? Dudó que puedas acostarte con ella. -Rápidamente Mateo y yo nos miramos sorprendidos-
Habían apostado sobre nosotros.
─ ¿Y tú si te puedes acostar con Mateo? Ja. -Dijo Manuel-
─Mientras me la siga haciendo de niña buena, si. -Rió- Nos quedan tres semanas.
─ Está bien. Todo porque el imbécil no se quede con Joselyn, ella es mía. -Dijo Manuel y Mateo rápidamente quiso salir pero lo detuve-
─ ¿No me digas que te enamoraste de tu apuesta? -No hubo respuesta y la chica empezó a reír- ¡No puedo creer! ¡Que malos gustos!
─ Cállate, no hables así. -Murmuró- Ya vete, no deberías estar aquí.
─ Está bien. -Rió- Pero acuérdate cariño, quien se acueste con uno de esos dos vírgenes primero, gana. -Dijo la chica y oímos como los pasos y las voces se hacían lejanos-
Mateo me soltó y se empezó a mover en el corto espacio, claramente molesto y desesperado.
─ Ese hijo de...
─¡Hey!
─¿Hicieron una apuesta de nosotros? -Rió irónicamente-
─Si y... ¿Eres virgen? -No aguante más, quería reír, pero estaba tratando de contener mi risa en un momento tan serio como este-
─ Si Jos. No le entiendo eso de acostarme con alguien diferente que está con todos. Prefiero acostarme con una, que sólo sea mía. Y que ninguno sepa lo maravillosa que es, porque sólo será mía, y sólo yo lo sabré. -¿En serio este chico era real? Sonreí y antes de parecer una boba enamorada preferí hacer la gran pregunta-
─ ¿Y ahora que hacemos?
─ Fingir. -Respondió rápidamente-
─ ¿Qué?
─ Fingiremos que ya no nos hablamos más. -Lo miré sorprendida- Ellos no saben que eres mi novia, así que será fácil.
─ Yo no soy tu novia. -Dije murmurando aunque por dentro mi corazón estaba que explotaba-
─ Claro que sí Jos. Pero después hablamos de eso, primero lo primero. -Rió- Necesitamos refuerzos.
─ ¿Quienes?
─ Tus amigos, mis amigos, mi hermana... ellos.
─ Me gusta... -Empecé a decir pero fui interrumpida-
─ ¿Yo? Eso ya lo sé, tú también me gustas Jos. Pero no es el momento, estamos hablando de algo serio. -Dijo serio provocando mi sonrojo y un golpe en su hombro- ¡Auch! -Rió-
Pero dijo que le gusto.
¿Lo dijo verdad?
¿Verdad?
¡SI LO DIJO!
Que lenta Joselyn.
─ Joselyn, si te sigues sonrojando así, vas a provocar un incendió. -Rió-
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Existente pero Ausente.
Teen Fiction¿Qué pasa si te sientes presente y a la vez ausente? ¿Qué pasa si amas y no eres amado? Qué admiras, pero no tocas. ¿Qué pasa cuando te lastiman no físicamente, pero si verbalmente? Y lo peor, ¿Qué pasa cuando te sientes insuficiente? ...