Convaleciente.

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-¿Tan preocupado estabas?- me pregunta con cara de pena.

-Por supuesto. Por ti y por nuestro pequeño- le respondo. Ella se mueve lo poco que le permite el dolor y me abraza.

-¡No te muevas, aún estás convaleciente!- le riño y me pone cara de niña pequeña cuando hacen algo malo y no quiere que le regañes.

-¿Cómo están Kyle y Leandro?- 

-Ambos están muy preocupados por ti. Leandro se siente muy culpable de todo lo que te ha pasado- le respondo mientras que cojo la silla para sentarme al lado de ella.

-Eso es una tontería. Él es el que menos culpa tiene de tener un padre así-.

-Lo sé nena, pero le entiendo perfectamente-. Llaman a la puerta:

-Buenas tardes señorita Jenner, soy su enfermera y me llamo Kendall. En seguida vendrá la doctora para revisarla-.

-¿Puedo beber algo? Tengo mucha sed- le pregunta.

-En cuanto la doctora la revise- le responde con una sonrisa. Unos 10 minutos después de que la enfermera se fuese aparece por la puerta un médico muy joven:

-Buenas tardes soy Rob, su nuevo médico-.

-¿Qué ha pasado con la doctora?- pregunto de inmediato.

-Ha tenido que viajar por una urgencia y me ha pedido expresamente que cuide muy bien a la señorita Jenner- dice con una sonrisa demasiado expresiva.

-Ah- respondo muy borde y Kaytlin sonríe.

-Necesito que nos deje a solas, por favor- pide el médico.

-No- respondo de inmediato.

-Tedd, por favor- me suplica Kaytlin y le hago caso porque no está para que le haga pasar más disgustos. 

Llevo cinco minutos fuera y estoy demasiado nervioso porque no sé porque se tiene que tirar tanto tiempo con ella ahí dentro y además solos:

-¿Qué te pasa Tedd?- pregunta Cody. ¿Cuando ha llegado? Ni si quiera me he dado cuenta.

-El médico está revisando a Kaytlin-.

-¿Ha pasado algo malo? Pareces muy nervioso-.

-No, tranquilo. Por el momento está todo bien-. Tras cinco minutos más por fin sale el médico de la habitación de Kaytlin. 

-¿Cómo está Doctor?- pregunta Cody.

-La herida está sanando muy bien. Además la veo bastante animada y con muy buen aspecto, eso es lo más importante. Estará aquí hasta mañana por la tarde y si las demás pruebas que le vamos a realizar salen bien podrá irse-.

-Gracias doctor- le responde Cody. Yo no digo nada, simplemente le miro con mala cara y entro en la habitaci

Cody y yo entramos de inmediato:

-¡Qué ganas tenía de abrazarte!- dice nada más soltarla.

-Ahora entiendo porque Tedd estaba con esa cara de perro-. 

Cody y yo entramos de inmediato:

-¡Qué ganas tenía de abrazarte!- dice nada más soltarla.

-Ahora entiendo porque Tedd estaba con esa cara de perro-. Miro a Cody con mala cara:

-¿Qué ha pasado?- pregunta Kaytlin.

-Tu médico es muy guapo- dice Cody riendo. Kaytlin me mira y sonríe:

-A mí no me hace gracia- digo de mala gana.

-No seas tonto- dice Kaytlin mientras tira de mi mano para que me acerque a ella.

La tarde pasa con tranquilidad en el hospital, ha venido mucha gente a verla y eso me alegra. Se ha animado muchísimo más de lo que estaba:

-Que locura de tarde- dice Kaytlin con una sonrisa.

-Toda la gente que te quiere preciosa- le respondo.

-¿Me ayudas a ir al baño?-

-Claro cielo-. Acompaño a Kaytlin al baño y espero en la puerta hasta que termine para ayudarla a volver a la cama.

-Puedo sola tranquilo- me responde mientras me acaricia la cara. Me acerco a ella y comienzo a besarla:

-Echaba tanto de menos tus labios- digo mientras acaricio su nariz con la mía.

-Te amo- dice con una sonrisa muy tímida.

-Te amo nena-. Kaytlin se gira y camino despacio hacia la cama. Cierro la puerta del baño y cuando me giro para mirarla siento como el color abandona mi cara:

-Nena siéntate ahora mismo-.

-¿Qué ocurre?-

-Estás sangrando-.

-¡Nuestro bebé Tedd!- grita con la cara muy pálida.

-¡ENFERMERA!- grito desde el pasillo rápidamente. Dos enfermeras y el médico vienen rápidamente a la habitación.

-Necesitamos que salga de aquí- me pide la enfermera y me niego por completo.

-No pienso dejarla sola-.

-Nos la llevamos al quirófano- dice el médico de antes. Cogen la cama y la sacan rápidamente de la habitación sin dar explicaciones de nada:

-¿Pero que le pasa?- digo mientras corro detrás de ellos.

-En cuanto esté controlada saldrá el médico a explicarle-. 

Siento como las fuerzas abandonan mis piernas y caigo al suelo sentándome en él. Escucho que alguien grita mi nombre desde el final del pasillo pero ni si quiera tengo fuerzas para ver de quien se trata:

-Tedd ¿qué pasa?- siento como los brazos de mi madre me rodean.

-Kaytlin está sangrando, se la han llevado al quirófano- digo llorando y mi madre me abraza más fuerte.

-No te preocupes cariño, las embarazadas a veces sangran-. 

Todo el tiempo que pasa Kaytlin en quirófano se hace eterno. No paro de dar vueltas por el pasillo porque los nervios no me dejan estar quieto a pesar que mi madre me lo pide un montón de veces. Su madre y sus hermanos están de camino pero con la hora que es van a pillar todo el tráfico:

-¿Cómo está mi hija?- pregunta su madre nada más llegar.

-Bien, estamos esperando que salga el médico- le respondo. Unos 10 minutos después de que llegan la madre de Kaytlin y sus hermanos aparece por fin el médico:

-¿Familiares de Kaytlin Jenner?-

-Soy su marido- 

-La hemorragia está controlada, va a quedarse en observación porque no queremos que vuelva a sangrar ya que podría causarle problemas al bebé-.

-¿Tiene riesgo de perder a nuestro hijo?- le recalco al medicucho.

-Si volviese a sangrar si- me responde.








Theodore Raymond Grey 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora