No Quiero Un Amor De Lejos

Capítulo 31 - No Quiero Un Amor De Lejos

Empiezo a despertar lentamente mientras mi vista va cayendo a la realidad, tratando de enfocar el techo... Escucho como suena el timbre del departamento repetidamente, me estiro un poco en lo que decido salir de la cama. Al mirar el fuerte rayo solar entrar por la ventana, deduzco que no es temprano. Salgo del cuarto para dirigirme a abrir la puerta mientras escucho como tocan el timbre más repetidamente.

-¡Ya voy!.-Grito saliendo del pasillo.

-Rápido niño, es la policía.-Escucho que dicen detrás de la puerta antes de tocar la manija para abrirla y me tenso un poco. ¿La policía?... ¿Acaso Maicol me jugó otra trampa peor?... Suelto un suspiro y me decido abrir la puerta lentamente.

-¡No puedo creer que te estés acabando de levantar!.-Exclama Taylor, quien me quedo fulminando a muerte con la mirada.

-¡Sabes el susto que me acabas de dar!.-Exclamo en tono molesto, dejando la puerta abierta para que pase en lo que me dirijo a la cocina por un poco de jugo.

-Lo sé...-Contesta cerrando la puerta mientras pasa a sentarse en los taburetes del desayunador y le doy un vaso con jugo.-¿Y sabes que es medio día?.-Pregunta retórico y me sorprendo al escuchar eso. Tanto he dormido... Casi es hora del juego.

-Demonios, tenemos que prepararnos para el juego.-Digo en lo que me termino rápidamente mi jugo.

-Hermano... Si ganamos este torneo... ¿Cómo lo celebraremos?

-Después de la partida de Amy... No creo tener ánimo para celebrar...-Respondo y me quedo pensativo.-Hablando de Amy... ¡Demonios!... Se marchará esta tarde y no podré verla por el juego.-Murmuro un poco desesperado.

-Dormiste toda la mañana... Debiste ir a verla por última vez.-Murmura lo cual me tensa completamente. ¿He perdido la oportunidad de verla por última vez?... Esto no me puede estar pasando, ni siquiera me dijo si me perdonaba.

-Tengo que ir a verla ahora.-Digo en lo que me dirijo al pasillo para ir a mi cuarto y alistarme.

-Hermano... Casi es hora del juego.-Dice Taylor haciendo que me detenga. No... Por qué las cosas tienen que pasar así... Se irá y no podré despedirme de ella...-Lo lamento hermano...

-Sí... Entonces tendré que alistarme para el juego.-Murmuro con la vista baja y derrotado ante el intento de verla por última vez. Paso a mi habitación, al entrar miro el celular en la cama y me lanzo a cogerlo para llamar a Amy.

-Vamos... De prisa...-Digo en voz baja en lo que espero a escuchar su contesta. Luego de unos minutos de espera cuelgo, ya que no llega a responder. Vaya suerte la mía... Lanzo el celular a la cama y decido alistarme rápidamente. Aun sabiendo que voy a estar en el juego y que ella se marcha en ese mismo momento, no pierdo la esperanza de poder verla antes de su partida.

Narración -Amy-

Me quedo un momento viendo mi ropa acomodada en la maleta encima de mí cama. James ni siquiera se apareció por aquí esta mañana... Al parecer no le ha importado despedirse de mí, antes de mi partida.

-Entonces... ¿Perdonaste a James?.-Pregunta Alex mientras saca mis zapatillas favoritas del armario y me ayuda a empacar las cosas.

-No...-Respondo con la vista baja.-Creí que volvería esta mañana para hablar.

-¿Deseabas que viniera aun molesta con él?.-Pregunta interesada y acierta perfectamente, asiento con tristeza y ella se acerca a abrazarme.

-Oh nena... Vamos, no te pongas más triste.-Dice mientras me consuela como si fuera mi madre.-Tal vez pasó algo y no pudo venir, también deduzco que todo esto que pasó fue una trampa de Megan, eso no lo dudo.