Llego a casa de Amy para recogerla como acordamos, aparco el coche y me dirijo hacia la puerta, la toco y espero.
-Amor.-Expresa Amy soltando un suspiro de alivio, lanzándose hacia mí para abrazarme como si hubiese pasado mucho tiempo sin verme.-Estaba preocupada por ti.
-Tranquila... Aquí estoy.-Digo mientras le doy un beso en los labios, echando a un lado la preocupación de que su madre pueda salir y encontrarnos así.-¿Nos vamos?.-Pregunto en lo que lentamente finaliza el abrazo.
-Sí.-Responde con una sonrisa en el rostro.-Pasa a la sala en lo que me alisto.-Añade mientras entramos a la casa, me dirijo a sentarme en el sofá y ella sube a su dormitorio.
Luego de unos largos minutos de espera la noto bajar por las escaleras, me quedo observándola detenidamente por un momento, está tan tierna con su blusa color azul en combinación negro de manga corta, la cual le queda ajustada al cuerpo, jeans cortos y sus converse favoritos. Consigo trae su mochila y por la apariencia que tiene, se nota bastante llena.
-¿Vas hacerme compañía esta noche?.-Pregunto un poco retórico en lo que se acerca a mí y se queda pensativa.
-No lo sé... Tal vez.-Responde levantando su mochila, me guiñe el ojo en forma traviesa.
-¿Dónde le dijiste a tu madre que dormirías?
-En tu casa...-Responde y noto como se sonroja bajando un poco la mirada.
-¿Ya sabe de lo nuestro?.-Pregunto un poco sorprendido.
-Más o menos... Su insistencia logró hacer que le explicara.-Responde cubriéndose el rostro con ambas manos mientras sonríe y se me forma una leve sonrisa torcida por su ternura.-Ay ya, no preguntes tanto y vayámonos.
***
Después de pasar varios minutos en la carretera y escuchar música, llegamos a mi departamento. Entramos y luego de un rato decidimos hacer unos sándwiches para relajar la tarde.
-¿Entonces el profe regañó a Megan?.-Pregunto un poco retórico por saber lo que pasó después de que me despidiera mientras le doy un mordisco a mi sándwich y ella asiente con la cabeza.
-Y no sólo eso... También le asignó un lindo castigo.-Contesta si poder aguantar soltar una carcajada.
-¿Cuál fue el castigo?
-Limpiar la cancha de baloncesto... Por lo que queda del año.-Responde.
-Se lo tiene bien merecido.-Murmuro terminando mi sándwich y ella asiente.
-Y no se conformó con haberme echado su bebida encima, sino que también fue a insultarme... Pero le di una buena cachetada y Alex le terminó de hacer caer con sus palabras.-Expresa y me quedo sorprendido.
-¡Le pegaste!.-Exclamo en forma de ¨No puedo creer que lo hicieras¨.
-Sí... Sus feas palabras me hicieron hervir la sangre y no me contuve.-Expresa terminado su sándwich y toma un sorbo de su jugo mientras yo me limito a mirarla en forma de ¨Eres asombrosa¨.
-¡Bien!.-Exclamo saliendo de mis pensamiento y me dirijo a llevar los platos a la cocina.-Tendremos que inventar algo que hacer para no dormirnos temprano...-Murmuro y ella asiente de acuerdo conmigo.
Después de pensar y pensar, nos decidimos a pasar a mi cuarto y jugar una partida de guerra en mi consola de vídeos juegos. Nos sentamos bien pegados el uno al otro en la cama, quedando yo detrás y ella delante recostando su espalda en mi pecho.
-Te enteraste de que Daniela estuvo en la fiesta de Maicol.-Murmura de repente un poco retórica. ¿Daniela?... ¿En aquella fiesta?...
-No... ¿Cómo sabes?...
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No Quiero Un Amor De Lejos
Novela JuvenilSinopsis Si la oportunidad de tus sueños tocara a tú puerta... ¿Le abrirías y la aceptarías? O ¿La dejarías pasar? James... Chico de 18 años, clase media, popular por ser un excelente jugador de baloncesto, deseado por las chicas qu...