chained to myself [ HxH ffic ]®™

26.

- Gon? - Kurapika asomaba la cabeza por la puerta de su habitación.
El pequeño pelinegro estaba sentado en la cama meditando, como solía hacer cada mañana.
- Gon. Me ha llegado un mensaje de aquel tipo enmascarado al cual dejé libre para que nos trajese información. Tendremos que reunirnos con el en dos horas, al este de la ciudad.
- Entendido.
- Sabes ... Como está Killua?
- Uh. Bastante sensible.
- Yo tampoco estoy muy allá.
- Lógico. Rin es una persona muy especial para ti, igual que Kira... Lo era para Killua.
- Quién era para mi qué?
El albino Zoldyck apoyó su mano en el marco de la puerta.
- Oh, Killua! Ya te sientes mejor?
- Cállate, Gon.
Gon sintió esa expresión caerle como un cubo de agua helada. Killua nunca le había contestado de esa forma tan borde y seria, no sin tener una verdadera explicación. Gon lo era todo para él.
- Killua, te encuentras bien? - se atrevió a preguntar el Kurta de cabellos rubios.
La mirada de Killua había cambiado. Era como si con una mirada, en un simple abrir y cerrar de ojos pudiera aniquilarte. Si clavaba sus ojos en ti estabas perdido. Muerto, acabado, asesinado, sepultado.

- Dicen que el problema de este mundo es que no vivimos el presente. Que nos anticipamos a todo. Al futuro.
-...
- Eso me sucedió a mi con ella. Aquella tarde no le dio tiempo a aquel niño rechonchete y en pañales a lanzar una sola flecha, porque yo ya me había enamorado de ella antes de que ninguna flecha pudiera atravesarme.
Ahora sufro pensando que me anticipé a la decisión de que viniera con nosotros. A dejarla morir. A no poder superarlo. Pero, pronto de acabará.
Me anticiparé y los mataré a todos.

Gon bajó la mirada un par de centímetros. Killua tenia los dos brazos completamente vendados. Pero, no era a causa de un daño grave, tampoco de entrenamiento. Los vendajes, empapados en sangre, goteaban a medida que Killua movía las manos.

- Dices que sufres, pero sacas tus garras modificando un poco tu cuerpo y te acuchillas los brazos, literalmente. Irónico, no?
Gon miró a Kurapika asombrado. Él también se había dado cuenta a pesar de que Killua trataba de ocultarlo con sus ropas.
- Pero nunca las hundes lo suficiente para matarte o tener una pérdida de sangre importante. Killua, realmente no quieres acabar con tu vida.
- Entonces, por qué me siento.. Por qué me siento así?! - a regañadientes y con la mirada clavada en Kurapika arremangó las mangas de su camisa.
- MIRAME. MIRAME! Soy un Zoldyck! Un maldito monstruo! Un ser despreciable. No he heredado el negocio familiar defraudando a mi familia. No puedo proteger a Gon tanto como querría! Nisiquiera fui capaz de proteger a la mujer que más amaba y salvar a mi futuro hijo. Doy asco.
- Estas muy equivocado. No has heredado el negocio familiar porque consiste básicamente en matar, pero matar al antojo de uno es de seres peores que la escoria, y tú en cambio lo rechazaste por completo, no es así? Siempre estuviste ahí para Gon. Maldita sea, eres su mejor amigo!

- Lo eres, Killua.♡

Puede que aquellas palabras pudieran surgir en una conversación normal cualquier día con Gon, pero para Killua, eran una salvación.
- No quieres acabar con tu vida. Quieres acabar con tu dolor. Por favor Killua, vuelve en ti. No voy a dejarte hacerlo solo, la mujer de mi vida también estará allí, entiendes. Crees que no estoy nervioso, furioso? Intento mantener la calma pero mis ojos me delatan, no es cierto? Los ves rojos, a pesar que llevo lentillas negras.

- Sí. Los veo rojos.

- Ioosh! - Gon se levantaba de la cama con una sonrisa de oreja a oreja.
- Huh?
- Entonces todo arreglado no? En dos horas habremos acabado con esos tipos, habremos vengado a Kira y salvado a Rin, cierto? No hay tiempo que perder.

- Por muy enfadados que estemos Gon seguirá siendo Gon. - Killua bajaba sus mangas despacio como hombre acobardado y Gon le detuvo.
- Súbelas.
- Qué.
- Voy a cambiarte las vendas y hacerte una cura. A donde crees que vas así, baka? Y que no me entere que vuelves a usar tus habilidades para esto. Kurapika, trae el botiquín, por favor.

- Gon.. Soy muy afortunado de tenerte. Lo siento.
- Killua. Me lo has dado todo, bien lo se. Sin ti no hubiese llegado hasta aquí, te debo mucho, mejor amigo.