Reencuentros y... ¿Amor?

Solo nosotros dos.

Narra Elsa.
Había estado siguiendo a Jack por toda la escuela, los chicos se acababan de pelear y, aunque no puedo decir que eso no me afectó, creo que ellos ya tienen la edad suficiente para arreglar sus problemas, digo 19 años no pasan de enbalde ¿o si?
Pero eso lo veríamos más tarde, los chicos tienen que verse en el departamento así que, no pueden durar peleados por mucho tiempo, ahora nosotros teníamos que ver el arreglo para las competencias.
-¿seguro que es por aquí Jack?- dije jalandolo.
-¿cuándo no he estado seguro de algo?- dijo volteandome a ver con ese súper ego que se carga.
-eh.....
- Mejor no me contestes.
- Ya sabía.
- Ajá, bueno en verdad sí, pero por una vez en la vida sí estoy seguro de lo que hago, bueno además de cuando te dije que eras la mujer más hermosa que he conocido.
- Ja, ¿cuando dijiste eso?
- Ahora lo estoy diciendo.
-mmmm... Sí, puede que sea verdad, tuviste suerte en conocerme.
-¿ego? ¿donde?
- Mejor callate y vayamos a ver lo que tenemos que arreglar.
- bien, pues bienvenida, e aquí el auditorio "Snow- Fire"
- Vaya, dicen que tanto se odian, tantas diferencias y competitivismo que hay entre escuelas y ¿comparten un mismo auditorio?
- no se te olviden las canchas.
- cierto y lo peor de todo es que ahora solo nosotros dos somos los que vamos a arreglarlas.
- hay una parte en esa frase que me gustó.
-¿cual?
-"solo nosotros dos".
- mmm... No lo creo.
- Mala.
- si ahora me dices mala, cuidate de cuando estemos trabajando.
-¿a qué te refieres?
-suelo estresarme un poco. - dije comenzando a avanzar hacia adentro del auditorio.
- ¿cuando no?- dijo susurrando detrás de mí.
-¡te oí!
Minutos más tarde nos encontrábamos en la tienda comprando los materiales para el auditorio y las canchas, habíamos tardado unos cuantos minutos al ir por cada uno de los materiales, claro, y, aunque Jack y yo hubiéramos querido elegir todo de color azul, no podíamos, teníamos que ser un poco más... Igualitarios.
Después de media hora eligiendo los materiales regresamos a la escuela y comenzamos a arreglar las canchas, aún no teníamos la idea exacta de como queríamos el auditorio así que, decidimos pensarlo un poco más y dejarlo al último, ahora éramos solo nosotros dos, un puñado de banderas rojas y azules con franjas negras cada una, letreros, pintura y alguno que otro detalle.
Después de tres horas ¡por fin habíamos colocado todas las banderas en cada una de las canchas! Ahora, seguía la pintura que indicaría las rutas y cada uno de los límites para cada deporte, para ser sinceros, no era tan malo estar haciendo esto junto con Jack, de hecho, era divertido.
- Wow, jamás creí que nos quedaría tan bien- dije mirando a mi alrededor.
- Deberías de ser un poco más confiada en lo que puedes hacer, como yo.- dijo señalándose con la brocha, la cual a causa que estaba totalmente llena de pintura, lo salpicó completamente en la cara.
- Deberías de ser un poco más segura como yo- dije imitándolo- ¿Por qué tengo la ligera sensación de que tú no estabas seguro de que pasaría eso?
- Bueno tal ves no estuviese seguro de que eso pasaría, pero de lo que sí sé que estoy seguro es de esto- dijo tomando su brocha y sumergiéndola en la pintura para después apuntarme con ella y lanzarme pintura.
- Pero ¡¿qué?! ¡Te arrepentirás de haber hecho eso Jackson Frost!
- ¡Ay sí mira como...- estaba diciendo pero fue interrumpido por mí, que le lancé un puño de pintura.- No, no Els, creo que algo debiste de aprender antes de haber hecho eso.
- ¿A si? ¿Qué?
- Que si planeas jugar así con Jackson Frost siempre terminaras arrepintiéndote.
- Yo no veo que me esté arrepintiendo de ....- estaba burlándome de él, pero fui interrumpida ya que Jack me tomó entre brazos y me cargó dirigiéndose a los botes donde conteníamos toda la pintura que habíamos comprado.- Jack ¿que planeas hacer? ¡Bájame!
- ¿Ya te arrepientes de haber hecho eso?- dijo mirándome directamente a los ojos.
- Nunca lo haré.
- Bien, entonces, buen baño- dijo bajándome y vaciándome una cubeta de pintura encima.- Ahora estamos a mano- dijo extendiéndome su mano para que la tomará.
-¿Así que ahora quieres paz?
- Ya he tenido mi venganza así que, sí, quiero paz. ¿Vas a aceptar mi ofrecimiento o no?- dijo viéndome a los ojos.
- Bien, entonces paz- dije tomándola.
- Paz.
- Pero ¿Qué tal si antes mejor no me acompañas?
- Claro, espera ¿qué? ¡Ah!- estaba diciendo cuando lo jale de la mano y lo senté junto a mí y después me le aventé encima  llenándolo completamente de pintura.
- ¿Con qué así nos llevamos no?- dijo tomándome de la cintura y jalándome, pero no todo salió como se pensaba, por accidente resbalé y caí encima de él, estábamos tan cerca, nuestras respiraciones se mezclaban, tan solo unos centímetros... Nuestros labios se juntarían, él se estaba acercando, yo estaba súper nerviosa, nunca había besado a nadie, no podía negar que no tuviera unas inmensas ganas de besarle, pero... No pude.
- ¿Jack? - dije llamando su atención para que abriera lo ojos.
- ¿eh? ¿si?- dijo Jack viéndome a los ojos.
- ¿Que haces?- dije tratando de reírme, pero lo único que salió fue una risa nerviosa.
- bueno yo... ¿una guerra de pintura?- dijo "disimulando" lo que había pasado.
- si así lo quieres.- dije lanzándole un puño de pintura y así declarándole el inicio de la guerra, la cual él respondió jalándome y llenándome completamente, él me tomaba de la cintura y me tiraba y yo le lanzaba puños de pintura o me le abalanzaba encima, pasamos varios minutos así, siendo sincera fue divertido, pero gastamos un poco de pintura, unas.. ¿tres cubetas grandes?
Jack me estaba ayudando a levantar cuando oímos pasos detrás de nosotros, por un momento suplicaba que fuera Punzie, aunque me dijera tantas cosas que me llegara a hartar, pero... desgraciadamente... No era ella.
- ¿Jack? ¿Elsa? ¿Pero qué? ¿Qué es todo esto?- dijo el director Norte acercándose a nosotros. Obviamente enseguida me levanté y los dos nos volteamos a verlo, y para colmo, no solo era él, sino también August el director de Fire.
- Podemos explicarlo- dijimos Jack y yo al unísono.
- ¡Es asombroso!- dijo el director August.
- Nosotros no queríamos... Esperen ¿que es lo que dijo?
- ¡Esto es asombroso! Todo ¿como lo hicieron?- dijo Norte viendo hacia todas partes.
- ¿ok?- dijimos viendo hacia nuestro alrededor y era verdad, todo estaba asombroso, pero ¿no llenamos nada más de pintura que este círculo en el que nos encontrábamos y nosotros?
- Pero chicos ¿a ustedes qué les pasó?- dijo Norte viéndonos de arriba hacia abajo.
- E...- dije mirando a Jack para pedirle ayuda.
- Un accidente, se nos cayeron y resbalamos.
- Bueno pues tengan más cuidado chicos, ¿que les hace falta?- August
- Ya nada más el auditorio, y si esto les gusto, lo siguiente les va a encantar.- dije completamente segura de mí misma, creo que debo de reconocer que Jack me está contagiando un poco.
- Ya lo creo, confiamos en ustedes chicos.- dijo el director Norte yéndose
- Suerte chicos- dijo el director August siguiéndolo.
Y así fue como Jack y yo nos quedamos nuevamente solos, pero ahora con el ligero detalle de que estábamos completamente llenos de pintura.
Me giré hacia él y, noté que él no dejaba de verme.
-¿qué?- dije mirándolo.
-¿y que yo era el que estaba seguro de lo que hacía?- dijo cruzándose de brazos- Pues eso que ví no era lo que decía.
-Ja- dije acercándome a él, por un impulso al pasar a su lado le di un beso en la mejilla- ¿Que no alguien me estaba enseñando a confiar más en mí? Creo que ya aprendí- dije y seguí caminando en una pequeña mirada que di hacia él pude ver como se estaba llevando la mano a la mejilla y ponía su tradicional cara de bobo, yo no podía evitar reír, era tan gracioso y tierno.
-¿Vas a caminar o te vas a quedar allí con cara de bobo?- dije volteándome y caminando de espaldas, por supuesto que cuando me voltee él inmediatamente se llevó las manos a los bolsillos, hombres, jamás dejarán ver sus sentimientos.
-¿Cara de bobo? ¿Elsa Arendelle está volviendo a insultarme?- dijo con cara de ofendido y señalándose a sí mismo.
-Mmm ¿tú que crees?
- Oh no Els, te arrepentirás de eso.
- Primero tendrás que atraparme- dije comenzando a correr hacia el auditorio con Jack siguiéndome a toda prisa, por suerte todos ya habían salido de clases e ido a su casa y los directores estaban en su oficina.
Estaba a punto de llegar al auditorio, pero como la suerte decidió estar en mi contra, tropecé y casi caigo, pero seguí corriendo con Jack pisándome los talones.
Al llegar a la puerta de este, en un momento ya no ví a Jack, creí que ya había ganado, cuando, de repente, siento como unos cálidos brazos me abrazan por la cintura y me apegan a un cuerpo musculoso y tierno: Jack.
-¿Que haces? ¡Suéltame!- dije riéndome.
- No, no lo haré hasta que te arrepientas de lo que has hecho.
- Pues entonces me tendrás aquí todo el tiempo porque no lo voy a hacer.
- Bien.
-¿Qué? ¿en serio piensas que nos vamos a quedar aquí todo el tiempo que quieras?- dije volteándome hacia él y mirándolo fijamente a los ojos.
- No.
-¿Entonces?
- Va a ser el tiempo que tú quieras para disculparte.
- Ja ¿y algo más?
- Bueno tal ves un café, saliendo de la escuela, tú lo invitas.- dijo colocando su cabeza en mi hombro y mirándome, bien tal ves estaba demasiado cerca para mi gusto, pero esta vez, se sentía bien.
- Que tal mejor esto: tú tienes el gran privilegio de invitarme un café saliendo de la escuela, yo te hago el honor de acompañarte y me sueltas para poder terminar de arreglar todo.
- Mmm demasiado ego, pero bien, un café tú y yo.- dijo soltándome y estirando su mano para que la tomara.- ¿trato?
- Será un trato cuando terminemos de arreglar todo.- dije entrando en el auditorio.
- ¡Ay, Por Dios! ¡Ya te solté! ¡Es justo que sea un trato!- dijo siguiéndome y haciendo pucheros.
- mm mejor pásame aquella caja con los listones rojos y azules.
- Esto aquí no ha acabado Elsa- dijo "enojado" caminando hacia la caja que le había indicado.
- No, lo sé, también necesito que me pases aquella escalera de allá.- dije señalándola y haciéndolo enojar.
- Sabes que no me puedo enojar contigo, sino créeme que ya me estuviera yendo de aquí.
- ¿Por qué crees que estoy aprovechando?- dije riendo.
- Veo que el modo: Mala Elsa se está activando.
- mm no, todavía no.
- Ajá, si como no. ¿Donde quieres que ponga la escalera?
- si quieres no me creas, pero bueno ¿la puedes poner pegada a la pared por favor?, tengo que acomodar los listones.
- ¿Aquí?- dijo colocando la escalera donde le había dicho.
-mm un poco a la derecha.
- ¿Ahora?- dijo recorriéndola
-mm no, mejor izquierda.
-¿Aquí?
- je, creo que estaba mejor en el centro.
- Argh, ¿Ahora está bien?- dijo acomodándola.
-Mmm déjame pensarlo un rato y... no a la izquierda.- dije llevándome la mano a la barbilla.
- ¿Sabes? tengo la sensación de que estás jugando conmigo y, además de que eso rompa mi pequeño corazoncito, la escalera no está muy liviana que digamos.- dijo moviendo la escalera hacia la izquierda.
- Puede que tengas razón, pero mira el lado positivo.
-¿Hay lado positivo? ¡Ya no siento los brazos!
- Sí, la escalera ya está perfecta.
-Menos mal.- dijo sentándose en el piso.
-¿Qué se supone que haces?
-¿Descansar un poco?- dijo con su mirada de "¿No es obvio?" y moviendo las manos.
- Osea que el "Señor yo te ayudo" ¿Ya se cansó?- Dije cruzándome de brazos.
-mmm, mejor dicho no se podía, así que... descansaré un poco.- dijo acomodándose en el suelo.
-No lo creo, aún falta un auditorio completo y necesito tu ayuda, así que... vamos- Dije jalándolo.
- Bien- dijo haciéndome una mueca.
-Ok, entonces yo me subo a la escalera y tú... me pasas las mantas y los listones.-dije comenzando a subirme la escalera.
- Espera un momento- dijo tomándome de la muñeca
-¿Qué?
-¿No crees que esto de subirse a la escalera debería hacerlo yo? digo, puede que te pase algo y...
- Y a ti no te pasaría nada por que es trabajo de hombres ¿No?
- Sí... Digo, No, solo es que...
-Mejor déjalo así y súbete de una vez.
-Elsa yo no...
-¡Súbete ya! yo voy por la caja.- dije dirigiéndome hacia ella.

Narra Jack.

Perfecto arruinalo todo Jack, lo único que pude hacer fue suspirar y voltearme hacia la escalera, ¡yo no quería decir eso! ¡No soy machista! A lo que me refería era que.... No quería que se subiera por miedo a que le fuera a pasar algo, ¿Han oído sobre cuántos accidentes pasan por caerse de una escalera? Bueno tal vez no, pero no quiero que uno de esos le pase a Elsa.
Estaba subiendo la escalera y pensando en millones de cosas o palabras las cuales hubiera podido decir para que Elsa no me malinterpretara cuando doy un paso más tratando de subir al último escalón necesario para colocar las banderas y siento que me estoy desequilibrando, trato de sujetarme a la escalera, pero no puedo, ahora lo único que puedo hacer es sentir como mi cuerpo cae, voy cayendo poco a poco, cuando....