—¡Tu papá es tan gay que...!—Skyler retrocedió algunos pasos, mirando a los ojos a la niñata que había osado hacer aquello, era nueva por supuesto, o no se habría metido con ella. Todos lo sabían.
—Él es tan gay ¿Qué...?—Pregunta con una sonrisa maliciosa, mirando directo a los ojos a la otra. Esperaba por su respuesta con ansias, pues si algo había heredado de sus padres era la capacidad de responder sarcásticamente a todo.
—Es tan gay que es pastelero...—Dijo la rubia, sabiendo que era una total idiotez, pero ciertamente intimidada por la cercanía.
—Mira, dulzura. Mi papá es gay, pero bien podría haber sido alcohólico, o podría no tener un padre. ¿Y sabes qué? Tengo al mejor puto padre, a los mejores putos padres del mundo. Y son dos maricas que se aman hasta la muerte. Y ¿Sabes qué más? Mi padre está lleno de dinero porque todo el mundo lo ama, y mi otro padre tiene la panadería más grande de la ciudad. ¿Crees que eso me molesta en absoluto?—Se alejó, moviendo su falda y sus caderas al compás de su caminar. Algunos rieron, ella estaba orgullosa de sus padres incluso cuando peleaba con ellos todo el rato.
Alex la abrazó por la espalda, ellos no eran parecidos, pero todos creían que eran mellizos. Sabían que eran adoptados y amaban serlo, amaban a sus padres y amaban sus vidas. Aveces...
—¡Mi par favorito!—Gritó Alice desde el otro lado, abrazando a ambos.
—Hola, primita.—
Alice era la hija mayor de Liam y Zayn, un año y medio menor que los bebés. Había nacido gracias a un vientre solidario de una chica que apareció y desapareció al instante. Era la más cercana a ellos, puesto que el hijo de Niall y Ashton apenas tenía 5, y los hijos de Gemma eran menores de 9 todos. Lottie, por el momento, era la única que no tenía pequeños.
—Le has pateado el culo a esa zorra, bah, no sé por qué me sorprendo. Siempre lo haces.
—Sólo la puse un poquito en su lugar, que va, no fue nada. He tenido peleas reales con zorras más grandes, ella ni siquiera pudo inventar un insulto real. Es deplorable.—Alex ríe y abraza un poco más a su hermana, la ama cuando es tan agresiva.
—Alex, necesito tu ayuda, tengo una tarea de mate para la quinta hora, no tengo idea de nada.
—Dámela, te la haré y tú la copias.
Ni Alex ni Skyler eran los mejores alumnos, pero se las arreglaban para promover de año sin desaprobar nada. Skyler era una experta en historia, y Alex en matemática, el resto era cuestión de suerte.
—Bien, allí está Ryan, los veo luego.—Dijo Skyler alejándose.
—Ese chico no te agrada ¿Cierto?—Preguntó Alice ante el rostro de su primo.
—Obvio que no, mi hermana es una pequeña niña, no me gusta que ande con tipos.
—Pero Ryan no te agrada...
—No, me da mala espina ¿Qué sabes de él?—Alice se encogió de hombros.
—Averiguaré algo para ti ¿Vale?—Alex asintió y revolvió el cabello de su segunda niña favorita.
—Adiós, Al, voy a ponerme a hacer tu tarea.
