Capítulo 16

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Estaba en un hermoso bosque. Este, a diferencia de en el que había estado antes, estaba muy iluminado. Tenía unos árboles muy lindos y unas flores muy coloridas. Era muy bonito.

Encontré una pequeña castaña y comencé a jugar un rato mientras me divertía. Estaba ahí, cuando de la nada, vi a una figura atigrada que movía su cola llamando la atención. Confundido, me acerqué para ver mejor y saber de quién se trataba. Cuando la reconocí, me quede estupefacto. Era mami.

Su brillante pelaje centellaba a la luz del Sol y sus ojos resplandecían. ¡Mami! ¡Estas aquí, conmigo! Velozmente, corrí hacia ella y me restregué en su costado. Ella me sonrió. Estubimos un buen rato juntos, y luego, nos acercamos a un sauce. Mi mami se recostó, y yo, me puse a su lado. Descansamos mucho, hasta que de la nada, empezó a desaparecer. ¡Noooo!

Cuando desperté, me asusté. No estaba en la guarida ni con mi Mami, y tristemente, recordé lo que había pasado. Una lágrima bajo por mi mejilla. Quería que todo volviera a ser como antes.

Débilmente, me levanté. Estaba dentro de algo que parecía una cueva redonda. Arriba estaba el Bosque. Tenía mucha hambre, no comía hace mucho tiempo y mis costillas se asomaban ligeramente por mi pelaje blanco. Miré detras mío y ví unas gotas de sangre seca, mi pata izquierda trasera estaba muy lastimada.

Di unos pasos. Pronto, noté algo, había un extraño objeto cerca mío. Era negro con unas pequeñas líneas azules y era del doble de mi tamaño. ¿Que era? Curioso, me acrequé, pero no se movio. No es un animal. Luego, me di cuenta de que tenía un hoyo. Con precaución, me asomé. Un hermoso aroma invadió mi nariz, ¡Comida! Sin pensarlo dos veces, con mis pequeñas garras intenté agrandar el agujero, y con mucho esfuerzo, logré romper la cosa. Adentro se encontraba algo que parecía una rama transparente, que tenía un líquido adentro, ¡Agua!

Pero pronto, descubrí el problema. El agua estaba adentro. ¿Como la sacaré? Intenté abrirla con mis dientes, pero no pude. Desesperado, busqué a mi alrededor algo con lo que abrir el envase, pero no había nada que me sirviera. Solo había tierra y unas pequeñas raíces. Pero pronto, una idea llegó a mi cabeza. ¡Cavar! Con mis garras, comencé a cavar en el suelo en el que me encontraba, cavé mucho tiempo, y justo cuando empecé a perder la esperanza, sentí algo duro. Con cuidado, lo saqué. No era nada más ni nada menos que una piedra de punta filosa. Con ella en mi boca, corrí hacia el objeto transparente, y le clavé fuertemente la piedra.

Al principio, el chorro fue débil, pero luego, más poderoso. Feliz, solté la piedra, y comencé a beber como nunca antes. ¡Agua, por fín!

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En la foto, la cosa de la cual Copito de Nieve sacó agua.

* No me demanden si lo que ocurrío en este capítulo es físicamente imposible :( xD

Copito de Nieve: La vida cambia rápido (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora