Capítulo 6: Otra vez.

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Después de varios días de tragedias y muertes, los soldados pensaron que sería un buen momento para deshacerse de mí, tal vez porque estaban aburridos.

Me sacaron de la celda y luego me llevaron junto a un doctor para que revise mis heridas, el doctor las miró atentamente y decía que eran muy graves. Debían amputarme el pie, yo sabía que eso no lo haría el doctor, los soldados se divertirían quitándome el pie.

Luego de las dos horas que pasé en el "hospital ", me llevaron a un lugar que parecía una cabaña, pero no estaba deshabitada, en ella vivían miles de judíos mutilados, pero por lo menos estaban vivos. Luego estuve ahí aproximadamente por media hora, después de eso nos condujeron a través de un pasillo oscuro con paredes agrietadas. Y por último llegamos a un campo de concentración: el campo de concentración de Auschwitz.

El campo más cruel que puede existir, según mis libros ahí, mejor dicho aquí se realizan las torturas más retorcidas que puedan ser creadas por la mente humana.

Luego de llegar al campo hicieron grupos de 10 personas, que eran llevadas a una habitación pequeña que tenía barrotes para evitar que alguien trate de escapar.

Mientras agrupaban a todos, divisé a lo largo a un joven, divisé a Jackof, mi día se iluminó ya tenía un motivo por el cual seguir viva. Él estaba muy concentrado esperando a que le designen un grupo, yo me acerqué lentamente hacia él, luego Jackof notó que yo estaba. Me miró como si fuera que nunca más me vería, pero lo cierto es que, a partir de ahora nunca más me separaría de él.

Me abrazó y me besó suavemente en los labios, fue rápido pero no le quitó lo dulce.

No dijo ninguna palabra, pero ya me bastó, después de tanto tiempo sin él... después de tanta soledad. Ninguna palabra me calmaría.

Antes de que pudiera decir algo, los soldados nos llevaron junto con otras 8 personas a la habitación, por lo menos al fin podríamos estar juntos.

Cuando entramos a la celda, él comenzó a llorar, observó mi talón con la carne que quedaba, porque el resto de mi pie es historia. Traté de explicarle mi intento de escape pero se preocupó demasiado y lo calmé diciendo:

- Pero después de todo, lo que más me costó fue alejarme de ti, de tu sonrisa y tu cariño. Porque me enseñaste como sobrevivir, pero no me enseñaste a vivir sin ti.

Jackof se sonrojó y me dio otro beso y luego me miró dulcemente y me dijo:

-Éricka, ¿quieres ser mi novia?

- No.

CONTINUARÁ...



Esas rayas azules (#wattys2016)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora